«Simplemente pasó, me enamoré», era lo que pasaba por la cabeza de MoonByul con Wheein a su lado apoyandola y diciendole que hable de lo que siente.
Terminará tomando el valor sin pensar en las cosas que estaban por venir, la aparición del ex de la...
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Hani era la que se encontraba en una situación apretada ahora, ¿DÓNDE se había metido Byul? o más bien ¿QUIÉN se la había llevado? Al salir del baño y preguntar por ella unos chicos le comentaron como había sido sacada de allí por otra chica que decía venir de su parte.
Ya se encontraba revisando los hoteles que estaban cerca de aquel bar y se percata de que solo faltaban doce horas para llevar a Byul a su casa sin que las otras sospecharan algo, por ahora no quería que se preocuparan y por, sobre todo, quería evitar ser reprendida por Wheein. La vez en que terminaron encarceladas por la pelea de hace unos meses el regaño fue tan espantoso que aún le causa escalofríos.
Pasada dos horas comenzaba a preocuparse más — Byul ¿dónde pudieron esconderte? — dijo preocupada y de pronto recibe una llamada, era del celular de Byul.
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LLAMADA
Hani: Sí, Byul, ¿dónde estás?
Seulgi: Veo que estás buscando a Byul, después de todo sigues siendo como antes, una perra que sigue el rastro de su dueña, debes buscarla en el hotel Sunshine en la habitación 22— concluyó para luego colgar sin darle tiempo a reaccionar a Hani.
FIN DE LA LLAMADA
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— ¿Perra?, pero quien se cree que es — gruñó — Bien, al menos me quedan diez horas y ya sé dónde se encuentra Byul— parece que va a mejorar mi día—, dijo mientras intentaba relajarse.
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— Byul, idiota— grito Hani intentando despertar a la soñolienta con un vaso de agua en su rostro.
— Pero qué cojones te pasa mujer — se sienta enojada por el golpe — santa mierda que resaca tengo... pero, dónde estoy— pregunto mirando a Hani confundida.
— Fuiste traída aquí hace unas horas por alguien que desconozco y no te preguntaré nada porque te apuesto lo que quieras que no recuerdas quien fue— le alcanza una de las toallas que están en el baño del lugar.
— Pues perderías la apuesta su nombre era...— después de unos segundos se da cuenta de que en verdad no lo recordaba — es algo como Seul... cierto, no lo recuerdo, pero lo importante es, como vas a mandar a alguien que ni conoces a traerme a un hotel.
— Mandar a traerte, ¿de qué hablas ahora?
— Venga Hani, no recuerdo su nombre, pero si como me decía que había sido enviada por ti para sacarme de allí.
— ¿Por mí? Byul que poco me conoces, no sabes que no confió ni en mi sombra, solo en ti y por todos estos años en los que nos hemos visto crecer una a la otra.
