Regálame un beso

Capítulo. II

Después de varios minutos apareció la profesora del aula, recuerdo que era de estatura mediana y con unos ojos color marrón que sobresaltaban en su piel blanca, caminó hacia el centro del salón y dijo:

-Buenos días chicos. Me han informado que tenemos a un alumno nuevo en el salón. Señor Sandler, ¿Podría ponerse de pie y presentarse ante la clase?-

Carajo, ¿Tenía que mencionarme en este momento? Casi paso desapercibido. Pensé.

En menos de 15 segundos, ya tenía todas las miradas de aquellos alumnos. Aunque debo de admitir que no les importaba ni les agradaba mucho el hecho de que haya llegado un tipo nuevo al salón. Me puse de pie y dije:

-Me llamo Joel Sandler, y tengo 17 años...

-¡Muy bien hijo! ¿Podrías decirnos de dónde vienes?.

-Vengo del estado de Nebraska.

-¡Vaya!, sí bienes desde lejos hijo. Bueno chicos, espero que le den una muy buena bienvenida a Joel... en especial usted, señor Hoffman.

Dijo la profesora, volteando a ver a un chico de una estatura alta (Demasiado, a decir verdad) y que tenía una chamarra blanca y roja al parecer pertenecía al equipo de fútbol americano del colegio. Cuando la profesora terminó de decir la frase, el chico me volteó a ver con sus ojos verdes como si quisiera aniquilarme con solo una mirada o como si quisiera dejarme en claro que él era el que mandaba; Claro que no mostré mucho interés cuando él volteó a verme, solo me senté y me quedé viendo la pluma que tenía encima de mi libreta por unos cuantos minutos, al cabo de no más de 2 minutos apareció nuestro profesor de la primera clase, dejó su portafolio negro encima de su escritorio y caminó hasta el centro del salón, después nos dijo:

-Buenos días chicos, soy el Sr. Watson y les daré la materia de "Probabilidad y estadística".

Nadie dijo nada, y comenzó la primera clase.