Aún era temprano, solo unas cuantas horas más para las once, tiempo suficiente para seguir indagando un rato más en la vida de Ragga.
— ¿Curar el cáncer? no te parece un poco trillado eso —Pregunte, tratando de ser Cortés —. Disculpe si suena a que me burlo, pero esa idea parece más una fantasía.
Se quedó en silencio unos momentos para luego soltar una gran carcajada, tan fuerte que hizo temblar la chatarra.
—Ha... Pequeña Violet, yo no buscaba curar su cáncer, pensaba en modificar y cambiar la zona afectada por el mismo, su corazón.
No me creía lo que escuchaba, pero Ragga sonaba serio y me pareció enfermizo eso, quise quedarme con el beneficio de la duda y seguí la entrevista.
—Bueno... ¿lo lograste?-Pregunte.
—Pues no podría decir que funciono del todo, hubieron... complicaciones, pero como en todo experimento por cada acción hay un reacción.
Comenzaron su "proyecto" a la mañana siguiente, Ragga se había quedado despierto toda la noche practicando más la ingeniería mecánica y estudiando intensamente la biología del ser humano, pensaba reemplazar el lugar más afectado por la enfermedad y no le había comentado nada a Lisa, pues sería un inconveniente que se negara y echara a perder todo.
Con químicos que consiguieron de la empresa del padre de Ragga y medicamentos del hospital del padre de Lisa, iniciaron su proyecto para aislar, detener y desaparecer el cáncer, él pensaba en hacer una anestesia temporal para después sustituir el área afectada con algún aparato, hacer morfina era lo más adecuado para luego inyectar el medicamento, aunque la medicina que estaban creando fuera falsa, él pensaba hacer un pequeño esfuerzo para que funcionara.
El padre de Ragga estaba en el trabajo así que tenían la casa para ellos solos.
Fue cayendo la noche, pero eso no detuvo su trabajo, se mantuvieron despiertos hasta altas horas de la noche, haciendo resonar herramientas y mezclando un sinfín de medicamentos.
— ¿No crees que será muy difícil conseguir un fármaco eficaz? —Pregunto Lisa, sus conocimientos eran bastos, pero ninguno había tenido experiencias médicas.
—El tratamiento más eficaz es la quimioterapia, esa nuestra base —Ragga se encontraba inmerso en su computadora, sacando todas las investigaciones y ensayos sobre el cáncer que se encontraba —. El problema es la ubicación tumor y por el estado de tu madre, no se puede realizar una extirpación.
—A ella le aplicaron la inmunoterapia en el hospital, pero eso solo nos consigue tiempo.
—Tranquila, basándonos en los recursos y el conocimiento que poseemos, podemos elaborar una medicina de precisión efectiva —Pero Ragga sabía que el tiempo no estaba a su favor, llevaría años lograr un fármaco efectivo, lo mejor era darle esperanzas y elaborar el verdadero proyecto aparte.
Las horas iban pasando muy rápido y en un abrir y cerrar de ojos empezó amanecer, Lisa no aguantaba más el sueño estando agotada y desaseada a la vez.
—No... No puedo seguir —Lisa somnolienta, pestañeaba del sueño.
Ragga por otro lado, seguía con muchas energías (pues había tomado más de cinco tazas de café) sus ojos mostraban grandes bolsas y sus brazos estaban cansados y adoloridos, aun así siguió experimentando e investigando.
—Yo estoy en perfecto estado, si gustas ve a ducharte y duerme, soy capaz de terminar solo.
— ¿Enserio? Bueno... que tengas una buena mañana, nos vemos dentro de unos minutos —Respondió entre dormida y se retiró del garaje.
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Ragga
Mystery / ThrillerVioleta S. Gilman una curiosa niña de ciudad a la que le encanta el periodismo y las historias excepcionales que de vez en cuando salen en la TV. Sale a recorrer las calles de su ciudad para entrevistar transeúntes y al caer la noche un infortunado...