Perdóname [ The Vamps fanfic]

Capítulo 7.

El coche se paró.

-Ya hemos llegado- Tris.

Me quitó la venda de los ojos. Era un sitío precioso. Era como una colina desde donde se veía un paisaje precioso.

Bajamos un poco la colina y Tris sacó de la bolsa una especie de mantel o manta muy grande. Había preparado un picnic. Que tierno.

-Siéntate-me pidió.

-Claro.

Empezó a sacar comida de la bolsa sobre todo eran frutas, fresas, uvas,...

-¿Te gustan verdad?- me preguntó.

-Claro, tranquilo.

-¿Quieres?- Me dijo mientras se metía una uva en la boca y me ofrecía una cajita llena de ellas.

-Vale.

-Esto no es todo.

-¿Como que no?

-No-dijo mientras abría la cremallera de la bolsa-, tengo un regalito para ti.

Sacó un estuche que parecía de un collar, un colgante o algo por el estilo.

-Cierra los ojos-Tris.

Me puso un colgante. Era un colgante plateado con una nota musical. Era precioso.

-No sabía que comprarte. Fui a la joyería lo vi y dije "esto tiene que ser de Lucy". Lo vi y me encantó es casi tan bonito como tú.

Me pareció un poco empalagoso y cursi. Pero hay que admitir una cosa, todos los adolescentes enamorados son cursis. No sé por que es pero ningún adolescente se libra de ello cuando está enamorado. Pero en Tris me parecía adorable y super tierno.

-Muchísimas gracias, te quiero- Dije sonriendole y le besé -. Yo también tengo algo para ti, pero después de esto... Es decir, creo que me he quedado corta. El colgante que me has regalado es precioso y no sé si mi regalo estará a la altura.

- Yo también te quiero- me sonrió.

Abrí la mochila de clase y saqué el regalo.

-Toma.

-Unas baquetas. Me encantan gracias.

-No sé si se ve, pero he puesto tu nombre en ellas.

Eran unas baquetas naranjas normales pero les puse en nombre de Tris. Aunque me encantase pintar, y se me diese bien las letras no eran lo mio así que no estaba segura de que le gustasen.

-Es verdad. Pone Tristan Evans. Enserio muchas gracias, me encantan.

-De nada.

Me abrazó pero me sentí mal. Necesitaba contarle lo de Brad.

-Tris una cosa, tengo que decirte algo importante pero antes de nada prometeme que no te vas a enfadar.

-Te lo prometo. ¿Pero, que pasa?

-Sabes que el día que empezamos a salir estuve tonteando con Brad en el laboratorio...

-Sí.

-Pues tontee con el porque llevaba cinco años enamorada de él.

-¿Cómo? ¿Me estás tomando el pelo?

-Pero ya no me gusta y tú me habías empezado a gustar. 

-No me lo puedo creer. Al final sí que eres igual que tus amigas.¿Sabes qué? Se acabó no tengo ganas de que nadie me tome el pelo.

-Pero Tris...

-Lucy va a ser mejor que te vallas. Adiós-Tris mientras se le caían la lágrimas por las mejillas.

-Adiós.

No pude evitar llorar. No sabía volver a casa pero por suerte seguí un camino y llegue a una parada de autobús. Cogí el autobús y me fui a casa.

En cuanto llegue a casa, fui a la habitación y me tire a la cama de un salto. Empecé a llorar como no había llorado nunca.

Era viernes por la tarde, mis padres estaban trabajando y James no estaba en casa así que me imaginaba que estaría con los chicos.

Estaba muy deprimida. Me levanté de la cama, bajé las escaleras, fui a la cocina y cojí una tarrina de helado.

Todo me recordaba a Tris, necesitaba distraerme así que fui a la habitación me tumbé en la cama y puse una película en la pequeña tele de mi cuarto.

Estuve más de una hora viendo la película pero todavía eran las siete de la tarde.

Eran las siete de la tarde de un viernes de primavera y yo estaba en casa sola y deprimida.

Estaba a punto de poner otra película cuando tocaron el timbre.