Dragón Fantasy

Capitulo XX.- La Alineación Del Rey.

A lo lejos se observaba como el castillo de Roy se acercaba, pero todos los soldados del rey estaban listos para combatir. Hombres con arco y flecha, otros con espada y escudo, y algunos con lanzas montados en salamandras gigantes. Un revoltijo entre hombres de todas las repúblicas se preparaba para la batalla.

–Nassa, Lexus, Kanon, ustedes tres irán al castillo de Roy– dijo el rey – Osu, tú te quedaras aquí con nosotros– Todos asintieron con la cabeza.

–Ha llegado la hora chicos– dijo Nassa.

–Vamos a acabar con esta guerra y todos regresaremos a nuestros hogares para vivir en paz– dijo Lexus.

–Ten mucho cuidado Osu– dijo Kanon.

–Nos veremos luego– contestó Osu.

Rápidamente todas las tropas se comenzaron a moverse, los arqueros se colocaron en la muralla que habían construido. Los guerreros caminaban hacia el frente y detrás de esta. El castillo de Roy estaba más cerca de lo que parecía.

–¡Prepárense! – grito el rey.

Tanto Rodavlas, como Tina y Zune estaban rodeando el Castillo de Plata. El rey se encontraba aun en donde había dicho su discurso, y Osu, se acercó hasta el puente que habían construido. El castillo continuaba avanzando.

Una vez estuvieran lo bastante cerca, de la orilla del castillo se vieron unas sombras, estas sin pensarlo comenzaron a caer. Soldados que superaban la altura de Finn caían sobre los soldados que se mantenían fuera de la muralla, otros caían sobre de esta. Detrás de ellos, soldados de Ignis caían también, pero estos, entraban por portales que Uribella creaba y aparecían en la tierra atacando a los soldados del rey. Cientos de hombres eran atacados en tierra, en ese momento, la batalla final, había comenzado.

Mientras más de los hombres de Roy caían desde el cielo, Osu mantenía a raya a los que ya estaban en el suelo con su lanza, cuando de la nada, Regim apareció saltando de un lado a otro del mar, llevándose por el medio a algunos de los soldados de Ignis que caían del cielo.

Finn por su parte, volaba por las cercanías del castillo con Nassa, Kanon y Lexus en su lomo, listos para atacar al castillo. Del cielo apareció Gaydar, impactando con sus brazos en las afueras del castillo y atacando a todos los hombres de Ignis que se encontraban ahí.

Desde abajo, el rey veía como los hombres de Ignis salían volando del castillo por las manos de Gaydar. Kanon se puso de pie sobre del lomo de Finn y salto hacia donde se encontraba Gaydar, este callo a su lado y comenzó a golpear a los hombres que se encontraban cerca. Pilares que levantaban a los soldados para que Gaydar los tomara e impactaran en el suelo y ráfagas de rocas que los golpeaba. A la lejanía Kanon observó como Dalio se dirigía hacia él.

Mientras tanto en tierra, Osu peleaba a lado de Zune y Tina. Soldado tras soldado, Osu lo atacaba con su lanza, mientras a lo lejos golpeaba a más hombres con corrientes de agua. Al descuidarse, fue derribado por un soldado con espada, pero antes de que lo atacara, Zune apareció y enterró su lanza en el pecho del soldado. Este le extendió la mano a Osu para que este se levantara y continuara peleando. Tina por su parte, peleaba a lado de Rodavlas. Este creaba escudos para protegerse a él y a Tina, mientras esta gracias a su entrenamiento, mandaba a volar a todos los soldados que se le acercaban con sus poderes. Uno que no fue detenido, golpeo a Tina en la mejilla, a lo que Rodavlas contestó golpeando su bastón en el suelo creando una onda expansiva, que repelió a todos los soldados que se encontraban a su alrededor. Al no haber ni un soldado a los alrededores, aparecieron Darlik, Guro y Garo, tras de pasar uno de los portales de Uribella.

El rey con su espada peleaba a lado de todos los hombres que había reclutado, alentándolos a todos. De la nada, en el cielo, apareció Eskol, en su forma de dragón, arrojando escamas a los soldados. Por su parte, el rey, tomó un marro que tenía cerca y lo arrojó hacia Eskol, el cual fue golpeado, y cayó en picada impactando en el suelo. Una vez que la nube de polvo desapareció, Eskol se encontraba en su forma humana. El rey impactaba su espada en las escamas de Eskol, pero esta rebotaba como si estuviera impactando en una pared. Eskol atacaba apero el rey esquivaba sus golpes a duras penas, pues era demasiado rápido para él.