Mia

265 8 0
                                    

-¿Te divertiste? –pregunto la chica de ojos verdes provocando que Camila se sobresaltara al no notar su presencia al momento de haber entrado a la habitación.

-Por la mierda Lauren, casi me matas –se quejó mientras colocaba una de sus manos sobre su pecho, sintiendo el latir desbocado de su corazón –Si, aunque en realidad la película no fue de mi gusto –se encogió de hombros dándole la espalda.

Lauren apretó la quijada, sabía que toda esta situación se estaba saliendo de control, sobre todo porque Camila no debería de estar saliendo con aquel chico que ella tanto detestaba. Pero nada podía hacer, reclamarle como lo estaba haciendo solo la delataría más de lo que las miradas lo hacían.

-Bien, me largo a dormir, que tengas buenas noches –se despidió mientras se ponía de pie.

-¿Te vas tan pronto? Oh claro, tienes que hablar con tu novio perfecto –ironizo la chica de ojos marrones.

Lauren sonrió satisfecha.

No era novedad el que Luis Felipe no le agradara a Camila y realmente agradecía eso, pero no podía hacérselo saber. ¡Maldita sea! Todo se estaba volviendo tan confuso, tan difícil, tan... cansado.

-Y tú tienes que contarle a Dinah cada detalle de tu salida con Austin, si no me equivoco –apretó los puños.

Por más que lo intentara no soportaba la idea de tener al chico cerca de Camila. Ella era suya a pesar de todo lo que estaban pasando en esos momentos. Camila era su chica, suya, de ella y nada ni nadie podría cambiar eso.

Íntimos momentos habían pasado juntas hace un corto tiempo atrás. Momentos que regresaban a su mente como flashes resplandecientes cegándola y haciendo que su corazón doliera por no poder tener la chica más joven entre sus brazos de nuevo de aquella manera, tan íntima, tan especial, tan... entregada.

Volvía en miedo de que se dieran cuenta que la amaba como lo hizo desde la primera vez que la vio. Volvía el miedo de que sus amigos la rechazaran, pero sobre todo volvía el miedo de que su familia le diera la espalda y su madre arruinara su sueño como el de sus compañeras de grupo.

«Si no te mantienes lejos de ella, juro por dios que muevo cielo, mar y tierra para sacarte de este grupo y no vuelvas a verlas nunca más... piénsalo bien Lauren, pues no es solo tu sueño, sino el de las cinco el que se vería acabado, pues si una se va, Fifth Harmony se muere...» Las palabras crueles de su madre cruzaban por su mente mientras caminaba a la salida.

-¿Qué nos pasó Lauren? –la voz rota de Camila sonó a su espalda.

-Solo... estábamos confundidas –intento controlar su voz lo mejor que pudo, pero por dentro se había roto al escucharla.

-Confundidas... no me vengas con esas tonterías –sintió la respiración de la menor en su nuca.

-Déjalo ser Camila, ya fue, sigamos como hasta ahora –suplico con los ojos cerrados antes de tomar la manija de la puerta e intentar abrirla.

-No –evito que Lauren abriera la puerta por completo.

Su mano deteniendo la puerta mientras Lauren tragaba seco, no podía tenerla tan cerca. El pecho de Camila choco con la espalda de la mayor haciendo que respirara pesadamente, necesitaba poner distancia antes de cometer una locura.

-Vete a hablar con Dinah –suplico la mayor con voz ronca.

-¿A que le temes Lauren? –Camila la ignoro por completo.

-Estoy enamorada de Luis –simplemente contesto, provocando que un enojo sobrehumano recorriera todo el pequeño cuerpo de Camila.

La chica de ojos marrones la giro antes de tomarla por los brazos y juntar su cuerpo completamente al de Lauren, mirándola directamente logrando que Lauren desviara la mirada. Sus respiraciones eran pesadas, irregulares.

𝐜𝐚𝐦𝐫𝐞𝐧 / one shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora