𝐜𝐚𝐦𝐫𝐞𝐧 / one shots

Miami Parte I

La miraba desde su asiento, como su cabeza descansaba en el hombro de esa señora que tan amable había sido al no moverla en cuando la sintió dormir casi sobre ella. Le dolía que no fuera a su lado y que no fuera ella quien cuidara de su sueño, pero de cierta forma lo entendía.

No, mentira.

No entendía porque seguía poniéndose de esa manera si sabía que todo lo que estaba haciendo era por el bien de las dos. «¡Él cree que estas en esta estúpida relación porque de verdad lo quieres!» Recordó lo que le había gritado en la última discusión que habían tenido.

Y tenía muchísima razón, LuisF era su amigo de años, pero no confiaba en él como para confesarle la verdad, además de que sabía que no le ayudaría con esto. Por lo tanto tenía que fingir que realmente estaban en una relación. Lo más difícil de todo eran los momentos cuando estaban a solas y él quería besarla, la mayoría de las veces pensaba algún pretexto y funcionaba, pero otras, bueno... Camila le besaba mucho mejor.

Diez minutos más tarde ambas chicas descendían del avión en busca de sus maletas para luego encontrarse por fin con sus familias.

-Camz... Camila –le llamo la chica de ojos verdes, no obteniendo respuesta –Camila te estoy hablando –la sujeto del brazo antes de salir del pasillo.

-¿Qué quieres? –pregunto sin voltear a verla.

-¿En serio vas a estar así? Sabes porque hago todo esto –susurro acercándose un poco para que nadie más lograra escuchar lo que decía.

-Sí, lo sé, pero tu entiende que todos tenemos un límite –se soltó del agarre de la mayor y camino en busca de su maleta.

Lauren pasó sus manos por su rostro intentando no gritar de frustración en ese mismo momento. Respiro profundo un par de veces y camino en la misma dirección que Camila. Como era de esperarse la menor ya había comenzado a caminar hacia ambas familias, prácticamente corriendo cuando vio a su hermana menor y a sus padres.

Sonrió al ver la escena tan tierna, giro un poco la cabeza y logro ver un poco más adelante a su propia familia. Su padre extendió los brazos mientras caminaba hasta ella, pero no lo soporto. Dejo la maleta sin importarle nada y corrió a sus brazos, lo había extrañado tanto.

Las lágrimas rodaban por sus mejillas al sentir esa paz que su padre le brindaba, solo existían dos personas con las que podía sentirse completamente segura, él y Camila.

-No llores Lolo –sonrió su padre también con un nudo en su garganta amenazando.

-Te extrañe tanto –sollozo abrazándolo más fuerte.

Luego de su momento sentimental con su padre, abrazo a su madre de igual forma, para luego prácticamente brincar a los brazos de su hermana menor y volver a llorar por estar por fin a su lado. Escucho como alguien tosía detrás de ellas y recordó que alguien más los había acompañado. Su novio.

-Mi amor –hablo él mientras la abrazaba.

-Hola –simplemente hablo cortando el abrazo rápidamente para secarse las lágrimas.

-¡Hola Lolo! –escucho la suave voz de la menor de los Cabello mientras sentía como se colgaba en su pierna.

-¡Sofí! ¡Mira que grande estas! –casi grito mientras intentaba abrazarla sin lograrlo del todo.

-Sofí, compórtate mija –escucho la voz de Sinu –Querida... –la abrazo fuerte también.

-Sinu, ¿Cómo está? –la miro con una sonrisa después del emotivo abrazo.

-Bien, bien... bueno, veníamos a despedirnos, Mila ya quiere irse –inmediatamente su atención se posó en la chica de cabello largo.

-¿Ya? ¿Tan pronto? –sintió la mirada de Luis sobre ella.

-Sí, está cansada, ya sabes cómo es... pero mañana te espero con tus padres para una pequeña reunión que haremos en la playa, ya les avisamos a ellos –sonrió para luego darle un beso en la mejilla y caminar junto con su marido hacia la salida.

Camila ni siquiera se había despedido de ella, ni de Luis.

-No se despido otra vez, ¿Verdad? –pregunto discretamente su hermana mientras Luis metía las maletas en la camioneta.

-No, ya sabes cómo se pone con todo esto –susurro.

-Lo sé, pero tú también debes entenderla, no es fácil ver a la persona que amas con alguien más –se encogió de hombros antes de sentarse en su asiento.

-¿Cuándo te volviste tan profunda? –intento quitarle un poco de tensión al asunto.

-¿Lista hermosa? –Luis llego a su lado. Simplemente asintió.

...

Durante todo el día no había recibido más que dos mensajes de Camila, el primero simplemente decía «Que tengas lindo día con tu novio, si tu novio» los harmonizers se burlaban de esa frase en especial en twitter, tumblr, Facebook, Instagram o cualquier otra red social. Ahora, la chica que amaba también la utilizaba para recordarle lo que ella misma estaba provocando. «Que te den, Cabello» había contestado llena de rabia, la cual se había disipado al leer la contestación de la menor «Lo siento Jauregui, no estás aquí como para hacer eso». Si, sabía que Camila iba a matarla algún día.

-¿Puedes por favor dejar ese teléfono e integrarte a la fiesta? –pregunto malhumorado el chico del afro.

Lauren simplemente levanto el rostro al darse cuenta que no le había prestado atención a lo que había dicho. En realidad no le había prestado atención a la "pequeña reunión" que la familia del chico tenía en su casa.

-Lo siento, yo solo... -levanto el teléfono con una mano –estoy esperando un mensaje de mi papá –dijo lo primero que le llego a la mente.

-¿Mensaje? ¿Sobre qué? –estaba confundido.

-Cosas sin importancia –quería dar el tema por finalizado.

-¿Entonces por qué no mejor hablas con mi hermana? Seguro se hacen grandes amigas –la levanto de su asiento para llevarla hasta ella.

Durante el pequeño trayecto Lauren logro observar un tweet en su TL que le hizo hervir la sangre. Más bien era una foto que no la dejo tranquila ni cuando comenzó la pequeña plática con su "cuñada", ni mucho menos le dejo posar bien para la foto doble que les tomaron.

-Me disculpas un momento, debo hacer una llamada –se alejó sin esperar respuesta de la chica de cabello claro.
-Por favor contesta, por favor –suplicaba mientras se encontraba alejada de todos.

-¿Diga? –la voz feliz de Camila sonó al otro lado.

-¿Puedes decirme que mierda te pasa al subir esa foto? –grito de manera silenciosa.

-Oh, eres tu –su voz cambio –No tengo que darte explicaciones.

-¿Qué? Camila, por favor –suplico -¡Se te ve todo! –ahogo un grito llena de celos.

-Por favor, ¿Qué? No tienes derecho a reclamar nada... mi familia invito a toda TU familia a venir con nosotros y aquí yo solo veo a tus padres junto con Tay –se detuvo un momento –Inclusive Chris vino, ¿Pero y tú? Claro, estas en casa de tu novio. Pues bien, solo diré esto una vez... Yo no soy ni la segunda opción de nadie, y mucho menos la otra. Salúdame a tu suegra, Lauren –y sin más colgó dejando completamente confundida a la chica de ojos verdes.

¿Qué mierda había pasado?

Final abierto por posibles nuevos acontecimientos futuros.