-Kang Young Hyuk?- pregunto la mujer vestida de traje negro. Su vos era fuerte e imponente.
-Quien es usted?- pregunte exaltado, gracias a su contacto físico.
-mi nombre no importa, pero e recibido ordenes estrictas de escoltarlo a la oficina de la señora- dijo en un tono impotente y bastante molesto.
-Yo con usted, no voy ni al kiosko, si me permite, seguiré mi camino- saque su mano de mi hombro con brusquedad y camine en la dirección que me dirigía anteriormente, no logre hacer ni dos pasos, que dos hombres tamaño gorila me tomaron por la fuerza, metiéndome dentro d un carro azul obscuro, quede entre medio de ellos, mientras la mujer de nombre desconocido se sentó en el asiento del conductor.
Al cabo de media hora de viaje, llegamos a destino, mi plan era que cuando frenara el auto, yo huiría de cualquier manera posible, pero mis esperanzas fueron en vano ya que los señores gorila 1 y gorila 2 ya me tenían acorralado como si hubieran leído mi mente.
El edificio era enorme, poseía 15 pisos de altura, los cuatro subimos por el ascensor hasta el ultimo piso, la decoración de este era bastante sencilla, un pasillo largo, mostraba que al final habían dos grandes puertas blancas, aun quería huir, esto me estaba incomodando mucho, tenia ganas de agarrarme fuerte de la gran maseta con plantas artificiales que tenia a mi izquierda pero aun así los gorilas me llevarían con maseta y todo.
Al llegar a las puertas, la señora sin nombre anuncio mi llegada, abrió una de estas y los gorilas me tiraron dentro de la habitación haciendo que cayera de rodillas al suelo, cerrándome la puerta para no dejarme escapatoria.
-Disculpa el trato de mis hombres, solo siguen mis ordenes- dijo una mujer que se encontraba detrás de un amplio escritorio, no podía verle el rostro ya que no miraba hacía mi.
-Disculpe, pero no sabe que es de mala educación llevar a una persona a la fuerza?, es considerado un secuestro, así que mientras me encuentro estable, le pediré amablemente que me deje ir- concluí mientras terminaba de sacudir mis rodillas.
-Lo se y me disculpo de todo corazón, pero tengo entendido por un informante, que me estabas buscando- aun no podía ver su ostro, y mi paciencia se estaba agotando.
- Yo no busco a nadie señora, se ha equivocado de chico, hombre o ser como guste llamarme, pero no soy yo-
-Seguro?- pregunto.
-Más que seguro señora- afirme.
- He de admitir que me siento muy decepcionada que mi hijo no reconozca a su propia madre, pero también debo entender que ya pasaron muchos años- al darse la vuelta pude verla, era aquella mujer que había desaparecido de mi vida hace ya mucho tiempo, su rostro aun lucia como aquel porta retratos de mi departamento, solo que a diferencia de este hoy se le notaban pequeñas lineas de expresión cerca de sus ojos, marcando isa el tiempo en que no la había visto, su cabello que antes lo llevaba largo y suelto, ahora se encontraba corto y recogido, mi corazón explotaba dentro mio, y miles de emociones pasaban a través de mi cuerpo dejándome la piel de gallina, dolor, tristeza felicidad, ansiedad y muchas cosas mas se revolvían en mi estomago... por favor young no vomites...
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-Mamá?- pregunte bobamente, aun sabiendo la respuesta, solo quería asegurarme que esto no era un sueño, o mejor dicho una maldita pesadilla.
-Estas sordo, o de tantos golpes te has quedado estúpido, que no me escuchas cuando te hablo?- su voz ya no tenía ese toque dulce, era estricto y seco.
-No- respondí.
-"No señora"... también perdiste educación me párese-
- No señora- volví a responde, esta mujer no la conocía, esta mujer me daba miedo.
- Así esta mejor, ya estas mucho más grande, y puedes servirme ahora, ve que eres guapo así que también podrás modelar, pero nada de aquí es fácil- puedo servirle? a que se refería?
-Disculpe, pero no logro comprender un par de cosas, servirle?, modelar?- que rayos pasaba.
-Cuando eras pequeño solo eras un estorbo, tuve que irme para poder lograr estar donde hoy estoy, ahora que eres mas grande, y a mi suponer maduro, puedes empezar a trabajar para mi y serme de utilidad, al fin estaremos juntos hijo no crees? y sobre modelar, estas en un edificio de la industria de la moda, es algo obvio no crees?
-Señora, se esta equivocando conmigo, no voy a trabajar aquí, no modelare y creo que mi madre aquí tampoco se encuentra así que lo que haré, sera cruzar esa puerta e irme de aquí y no verla nunca mas en el resto de mi vida- estaba ya fuera de mis cabales, aun no podía creer que esta mujer sea la mujer que llame mamá.
-Esta bien, cruzala, y veras como mis hombres destruirán todo lo que es importante para ti- dijo de forma maliciosa-
-No sería capas- y lo único que pasaba por mi cabeza era e rostro de suzy
-Pruebame-
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-De acuerdo, trabajare para usted- ya la había perdido a Suzy, trabajar con esta mujer o la muerte era lo mismo, ya no tenía nada que perder... pero aun así la protegería.
no se habrán olvidado de mi no? aquí he vuelto y pido de todo corazón disculpas por mi desaparición, no se imaginan lo que pase y atravesé pero aquí estoy de nuevo... sigan leyendo y disfrutando...
