—Te lo diré, para mis padres amar a un hombre es una enfermedad— Termino dejando a Ismael en blanco ¿Estaba escuchando bien? —Usted es...- No supo ni como aquellas palabras salieron por si solas tratando de aclarar las anteriores dichas. —Si Isma soy gay— Como había pensado anteriormente, se sentía demasiado bien el poder hablar con alguien después de todo.
—¿Sucede algo?— Hablo de nuevo al notar a su alumno que parecía sorprendido por su aclaración.
—Es sólo que no puedo entender cómo es posible que su familia le rechazara por algo tan absurdo— Su tono de voz era bajo acompañado de un gran descontento, para él entender el rechazo sobre los distintos gustos era imposible. —Digo lo mismo, espero que nunca tengas que sufrir algún descontento por parte de tu familia Isma— Pudo percibir la gran sinceridad que Raúl intentaba transmitir con sus palabras, deseando que aquél chico nunca sufriese de tales maneras aunque era inevitable.
El pequeño silencio que se había creado acabo con el timbre del celular de Raúl avisando una llamada entrante, Ismael fácilmente se percató del emisor de aquella llamada pues la mueca y el cambio repentino de la apariencia del castaño lo dijo todo. Observo que este no contestó bloqueando el celular dándose la oportunidad de tomar la palabra. —He visto a mis padres derrumbarse y fallar, mi madre tenía una enfermedad que acababa con ella cada día cosa que oculto mintiendo, mi padre nunca estaba para nosotros creía que podía llenarnos con una sonrisa cada domingo para después volver al trabajo. Nunca pensaron en mí, y para cuando ellos me necesitaron yo estuve ahí sin importar el que me hayan abandonado. Profesor nadie es perfecto y puede ser que sus padres hayan fallado pero de cualquier forma ellos quizá ahora estén necesitando de usted ¿Haría lo mismo que hice yo?
La nueva hora de clases comenzaba e Ismael se levantó dirigiéndose hacia la puerta y antes de retirarse se despidió dejando en que pensar a su profesor. —Por favor piénselo— Un enorme suspiro lleno de confusión dejo escapar tomando entre sus manos el celular que no dejó me observar, era posible que dependiese de aquel aparato para poder tomar una decisión demasiada importante.
[...]
Era la séptima vez que se negaba estresándose aún más y de un momento a otro dejaron de insistir quedando en tranquilidad. "¿Usted haría lo mismo"
Tomo es celular marcó a ese número desconocido, el tono le desesperaba tenia un pequeño lapso de tiempo para retractarse.
—¿Raúl?—
Lo primero que se le venía en mente era gritar desahogando todo el daño y dolor que había recibido de ese bastardo.
—Jorge ¿Que necesita?—
Pero no lo hizo, porque su poco autocontrol aún existía, aunque fuese demasiado difil.
—Discúlpame si te estoy molestando en horario de trab-
—Ve al grano ¿sí?—
No tenía ninguna razón para expresar cualquier sentimiento ya que no lo merecía.
—Está bien, tu madre...
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Durante esas clases su mente estaba perdida divagando en un sólo tema, un tema que le estrujaba el corazón. Apresuró su paso chocando con unos cuantas personas y deseando que su plática con Raúl hubiese funcionado para arreglar tan horrible situación.
Estaba acompañado de un mal presentimiento el cual deseaba con todas sus fuerzas que fuese erróneo. Sin preocuparse abrió la puerta de la oficina encontrándose con aquella escena tan dolorosa, Raúl cubría su rostro con ambas manos dejando salir sollozos tan dolorosos de escuchar. —Profesor— Dijo el menor para después cerrar la puerta con rapidez, dirigiéndose hacia él.
—I-Isma— Se descubrió para dejar ver su rostro rojo a más no poder y lágrimas que parecían no dejar de salir. Algo que sin poder explicarse le indujo a abrazarle con fuerza tratando que ese animó tan espantoso desapareciera, que sus lágrimas cesaran y que el dolor que trasmitía fuera inexistente. Acepto el abrazo donde presenció un calor complaciente y solidario, solo quería que todo lo dicho en esa llamada telefónica no hubiese sido una broma estúpida.
—¿Que sucedió?— La voz temblorosa de Raúl intento hablar pero su primer intento fue fallido, entre sus dedos apretó la camisa del menor respiro hondo e intento de nueva cuenta.
—E-Ellos... se disculparon por todo—
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HOLO!!!!
me desaparecí por 2 semanucas xdxd
perdon ;-;