007

2.3K 352 41
                                    

Las manos del pequeño tiemblan de anticipación antes de empezar a tocar la puerta celeste o decidirse por el timbre que está posicionado en el rincón del lado izquierdo.

Se ha repetido múltiples de veces que debe dejar a Jungkook tranquilo por un par de horas, dejarle salir con sus amigos como Taehyung también lo hace. Sin embargo su inquieto corazón no se lo permite con libertad.

No se siente listo por ahora, todavía necesita tiempo. Por eso él está allí, frente a la vivienda de Seokjin con sus manos temblando de miedo mientras oprime su labio inferior.

El menor no ha querido ir donde está Seokjin pero su necesidad de tener a Jungkook es más potente que cualquier cosa. Ir a la casa del mayor es como perder gran parte de su orgullo, pero como siempre Jungkook lo vale más.

La seguridad que necesita sentir del mayor es mucho más fuerte. Quiere que su hyung lo mime hasta tener suficiente. Quiere sentirlo, quiere de sus besos, quiere todo.

—Todo está bien. Jungkookie no se enojará, lo sé. Hyung irá conmigo a casa.

Sube sus temerosos ojos hacia el dichoso timbre y entonces las ganas de huir vuelven a él como una ráfaga de viento. El pequeño tiene tanto miedo de enfrentar a Seokjin. Su corazón no está preparado para eso. No todavía, desde luego que no.

Tal vez hay veces donde Taehyung puede decir múltiples de cosas como que no le importa en absoluto lo que Seokjin piense de su relación pero al final sabe que sin la aprobación de Jin su relación no está completo. Detesta tanto que Seokjin sea tan importante para Jungkook.

No está preparado para enfrentarlo como se debe por lo mismo. Teme que Seokjin lo eche de allí, o peor aún, que le haga pasar un mal rato en presencia de Jungkook. Seokjin no es tan malo pero últimamente no sabe que pensar. Todo le parece confuso.

—Mejor voy a llamarlo.

Busca con torpeza sus bolsillos encontrando el móvil. Se queda unos minutos contemplando el fondo de pantalla, la foto de Taehyung y Jungkook besándose. Eso tranquiliza su corazoncito. Él está a salvo. Jungkook lo protege siempre.

Desbloquea su móvil y marca al mayor. Espera con miedo que él conteste y los segundos son una eternidad para el pequeño.

—¿Sucede algo bebé?

Allí está su hyung, su voz indudablemente amable y lleno de amor, el amor que siente por Taehyung.

Quiere decirle que todo está mal, que necesita que esté de vuelta a su lado, que se siente enfermo.

Necesita reírse con Jungkook viendo una película romántica, no lo ve mal discutir unos segundos por el último trozo de pizza, o que el mayor bese su cuerpo hasta tener suficiente de él. Quiere sentir las grandes manos de Jungkook recorriendo su cuerpo.

Él necesita todo eso y más. Él necesita de su hyung...

—Kookie...yo... Sabes...eh...

Taehyung no ha terminado de hablar por completo, ni siquiera ha podido expresar su idea principal pero Jungkook está allí, entendiéndolo rápidamente por lo que corta su pésimo intento de explicar lo que está sintiendo en esos momentos.

—Está bien, cariño, hyung estará de vuelta en minutos—el mayor lo dice con una seguridad que calma su agitado corazoncito.

French fries ❥ KOOKVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora