Un secreto a voces

V

"Dicen que de la distancia nace el olvido,
pero en la distancia no hago más
que recordarte."

Vanessa no era una persona a la que le gustaran mucho las sorpresas, pero sabía que si esa sorpresa la traía Pedro, solo podía ser algo bueno. Hoy era el día en que Pedro regresaba del Reino Unido, una vez hubo terminado todos sus compromisos con la dirección y la producción de la serie. Habían quedado en verse en un restaurante cerca de donde Vanessa vivía. La espera parecía devorarla por dentro, pero por suerte para ella, no tuvo que esperar demasiado.

—Perdón por el retraso, flaquita. Cosas de aeropuertos —se disculpó Pedro nada más llegar al restaurante y verla. Le dio un corto beso para luego abrazarla con fuerza.

—No me puedo creer que ya estás aquí de vuelta —dijo Vanessa mientras lo abrazaba.

—Pues acá estoy. Todo para ti. Te vas a aburrir de mí —bromeó Pedro, deshaciendo el abrazo.

—Creo que eso es bastante improbable.

—¿Te parece si comemos? Muero de hambre —sugirió Pedro y los dos se sentaron, esperando que el camarero les trajera las cartas.

—¿Y cuál es esa sorpresa de la que me hablaste? —preguntó ansiosa Vanessa, una vez el camarero les tomó la orden.

—Y yo que pensé que ya lo habrías olvidado —respondió irónico Pedro —, pero no te preocupes, tu sorpresa está a salvo —Vanessa rodó los ojos y Pedro sonrió divertido.

—Todavía no me lo vas a decir, ¿verdad? —se quejó Vanessa haciendo un pequeño puchero.

—No, me temo que no —rio Pedro —, pero para que no te enojes conmigo, voy a compensarte con otra cosa.

—¿De qué se trata?

—En unas semanas comenzará el rodaje de la serie y me gustaría que me acompañaras —Vanessa abrió los ojos al máximo nada más escucharlo.

—¿Hablas en serio? —preguntó incrédula.

—Claro que hablo en serio. Hablé con la producción de la serie y no hay ningún inconveniente en que me acompañes mientras dure el rodaje. ¿Qué me dices? —dijo expectante Pedro.

—Nada me haría más ilusión que acompañarte —respondió aún sorprendida —¿Y dónde va a ser el rodaje?

—Pues principalmente entre Reino Unido y Croacia.

—¿Croacia? —dijo Vanessa antes de taparse la boca con sus manos.

—¿Hay algo de malo con Croacia? —preguntó Pedro sin saber muy bien cómo interpretar su reacción.

—Para nada. Amo ese país. Es uno de mis favoritos —respondió con toda la ilusión que le cabía en el rostro.

—Pues será un placer para mí que me acompañes en esta aventura. Sabes lo importante que has sido para mí durante todo este tiempo y, aunque lo niegues, parte de este éxito te lo debo a ti —confesó Pedro tomando las manos de Vanessa, que lo miró con ternura.

—Sabes muy bien que todo lo que logres será gracias a tu enorme talento. Yo estoy aquí para darte mi apoyo y mi amor incondicional.

—¿Te parece poco? —preguntó divertido.

—Me parece poco al lado de lo bien que se te da tu trabajo.

—Deja de ser tan modesta. Tenerte a mi lado es lo que más necesito ahora y no te imaginas lo feliz que me hace saber que me vas a acompañar.

Vanessa no se podía creer lo mucho que había cambiado su vida en tan poco tiempo. Le sabía un poco mal no poder pasar las vacaciones con Eli, pero ella ya tenía planes para el verano: pasaría unas semanas en Bogotá, tratando de recuperar ese antiguo amor de verano que había dejado atrás y que ahora había vuelto a su vida. Vanessa estaba muy ilusionada por Eli, es su mejor amiga y lo único que quería era verla feliz y ahora parecía estarlo. Aun estando en continentes diferentes, las dos mantenían el contacto y hablaban a diario a través de vídeo llamadas.

(Eli): ¿Qué tal todo en Croacia?

(Vanessa): Es precioso. Mucho mejor de lo que me habría imaginado.

(Eli): Me alegra que todo esté yendo tan bien. Aquí las cosas marchan por buen camino.

(Vanessa): ¿Habéis avanzado en vuestra relación?

(Eli): Creo que estamos dando los pasos correctos. Los dos estamos muy a gusto el uno con el otro y tengo buenas vibraciones.

(Vanessa): Estoy muy feliz de oírte decir eso. De verdad.

(Eli): ¿Y tú que tal todo con Pedro? ¿Le va bien en el rodaje?

(Vanessa): No te puedes imaginar lo feliz que está. No se le quita la sonrisa de la cara.

(Eli): Qué mono... me lo puedo suponer. ¿Y habéis avanzado en vuestra relación?

(Vanessa): Sé muy bien por donde va esa pregunta y no, todavía no hemos dado ese paso. Y no porque no queramos, es que Pedro está muy ocupado y termina los rodajes realmente agotado.

(Eli): Lo están explotando por ser latino. Me parece muy mal eso.

(Vanessa): No lo están explotando. De hecho a partir de esta noche tendrá un par de días de descanso.

(Eli): Menos mal que se han apiadado de él. Es momento de que afiancéis esa relación y dar el paso definitivo.

(Vanessa): No hay nada que desee más.