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Clarke vio la pantalla de su celular y rodó los ojos, guardó su celular un tanto molesta y prefirió centrar su atención en su novia que estaba frente a ella. Lexa se llevó un par de papas fritas a la boca mientras le guiñaba un ojo y Clarke sonrió a la vez que le daba un sorbo a su bebida. Estaban sentadas una frente a la otra en una mesa de un restaurant de comida rápida, no era la cena más saludable pero lo único que les importaba era estar solamente las dos.

La castaña la tomó de la mano por encima de la mesa y Clarke trató de no voltear a los lados para asegurarse que no las veía, Lexa conectó sus miradas y le dio un apretón al tiempo que le regala una sonrisa. La rubia le correspondió la sonrisa y al ver la forma en que la ojiverde la veía, entrelazó sus dedos sin importarle la gente a su alrededor.

-¿Te puedo hacer una pregunta? –Preguntó Clarke-

-Claro que puedes, ¿De qué trata? –Lexa deshizo el contacto para que ambas siguieran comiendo sus hamburguesas-

-¿Cuándo fue que te diste cuenta que te gustaban las chicas? Me refiero si lo recordabas o después del accidente te diste cuenta o... bueno, no sé explicarme. –Dijo un poco nerviosa-

-No te preocupes, te entendí. –Contestó con un tono divertido- Después del accidente muchas cosas estaban confusas para mí. –Clarke asintió al comprender- Cuando comencé a salir a los lugares para pasarlo bien y no para recordar me di cuenta que me llamaban más la atención las chicas que los chicos, esa idea se plantó en mi mente y comencé a darle vueltas, si era algo nuevo o si ya lo sabía. Si ya lo sabía ¿Ya lo había aceptado? Y si lo había aceptado, ¿Mi familia ya lo sabía? ¿Mis amigos ya lo sabían? Estuve con esa idea rondando en mi mente hasta que un día me harté y se lo pregunte a Raven.

-¿Y qué te dijo? –Preguntó realmente interesada-

-Que sí, ya me gustaban las chicas, mi círculo social ya lo sabía al igual que mi familia. –Contestó Lexa y recordó la forma en que la veía Raven, como si hubiera estado esperando a que algo más sucediera- Y bueno, me quedé tranquila y fui con mis padres para decirles que me gustaban las chicas y ellos me dijeron que ya lo sabían y que si antes me apoyaban después del accidente me apoyarían aún más.

-¿Entonces se podría decir que saliste del closet dos veces? –La rubia arqueó una ceja-

-Creo que sí. –Se encogió de hombros- La verdad es que no recuerdo muy bien cuando me acerque a hablar con ellos sobre mi orientación sexual, está todo borroso. –Entrecerró los ojos-

-Tal vez hable primero con mis hermanos. –Clarke le confesó y Lexa no pudo evitar sorprenderse-

-¿Estas segura? ¿No quieres dejar que pase un poco más de tiempo? –Preguntó delicadamente-

-No lo sé pero ahora que lo digo en voz alta tal vez tengas razón, mejor dejo pasar un poco más de tiempo. –Hizo una mueca y se removió en su lugar-

-Todo a su tiempo. –Lexa le dijo mientras hacía a un lado el jitomate que contenía su hamburguesa y le ponía papas fritas en el interior-

-Gracias. –Dijo sincera- Por todo, Lex.

-Por ti lo que sea. –Contestó la castaña mientras le estiraba la mano y Clarke la tomaba-


Al día siguiente Clarke estaba acomodando algunos papeles en unas carpetas cuando vio a Octavia entrar a su despacho, la pelinegra tomó asiento frente a ella y le entregó una hoja, Clarke la tomó y le hecho un rápido vistazo.

-Acaban de comprar una cadena de hoteles y quieren que el presupuesto para la publicidad sea alto, no es la única adquisición de la empresa. –Clarke le dijo y ahora fue su turno de darle una carpeta-

High Hopes [Clexa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora