High Hopes [Clexa]

39

Clarke volteó a los lados rogando no encontrarse con su madre o con Luna, se reprendió internamente al estar haciendo eso justo cuando horas antes le había dicho a su mejor amiga que se alejaría, no sabía porque lo hacía pero sentía cierta comodidad con aquella ojiverde. Siguió empujando la silla de ruedas donde iba sentada Lexa quien veía todo sumamente entretenida, la castaña le había pedido salir de aquella habitación y después de minutos rogándole terminó accediendo, la empujaba lentamente y entraron al área de emergencia, se detuvieron en una esquina cuando llegó una ambulancia.

Lexa veía atenta cada detalle y acomodó mejor su brazo enyesado sobre su regazo, desde donde estaban tenían una buena vista de aquella gran sala, vio como un par de paramédicos empujaban rápidamente una camilla mientras le decían las instrucciones a los médicos, agudizo un poco su oído y reconoció una de las voces.

"¿Me escucha? No se mueva, la vamos a sacar de aquí y todo estará bien. Confié en nosotros."

Volteó a ver a Clarke quien también veía aquello, le jaló un poco la bata para que la viera y al unir sus miradas sintió una sensación que hace mucho no la invadía, le hizo una seña para que se acercara y cuando la rubia se inclinó un poco se aclaró la garganta.

-¿Los conoces? –Discretamente señaló a los paramédicos-

-Sí, ¿Por qué la pregunta? –La vio interesada-

-Creo... creo que ellos fueron quienes me trajeron, la voz de él se me hace conocida. –Le explicó sin quitar la mirada de aquellos paramédicos-

-¿Estás segura? –Sorprendida dirigió su vista a ellos-

-No mucho pero algo recuerdo. –Volteó a ver a la rubia y su vista viajó por su perfil y notó como el azul de sus ojos tenían un brillo especial- Pero me gustaría darles las gracias. –Terminó de decir-

Clarke esperó a que los paramédicos estuvieran libres, cuando terminaron con su deber con aquel paciente caminaron hacía la salida y comenzó a empujar a Lexa hacía ellos, cuando estuvieron un poco más cerca les habló para que se detuvieran.

-¡Bellamy! –Trató de no gritar tan fuerte-

Aquel chico pelinegro se detuvo junto con su compañera y voltearon a ver a la rubia, le regaló una agradable sonrisa y se pasó una mano por su mejilla libre de barba mientras la rubia terminaba por acercarse.

-¿Tienen cinco minutos libres? –Les preguntó mientras veía a cada uno-

-¿Qué pasa? –Pregunto Bellamy-

-Pasa que alguien les quiere dar las gracias. –Les dijo y bajó la mirada a la castaña que veía fijamente a sus compañeros-

Ambos voltearon a ver a la ojiverde y le regalaron una gran sonrisa al reconocerla, Lexa se las correspondió y entrelazó sus dedos en señal de nerviosismo.

-Gracias por ayudarme. –Sintió como la rubia colocaba una mano en su hombro en señal de apoyo- También por ustedes es que estoy bien, enserio muchas gracias.

-Me da gusto ver cómo mejoras. –Le dijo Bellamy y sonrió de lado- Aunque debo admitir que me sorprende un poco que nos reconocieras porque solo nos viste un momento antes de desmayarte.

-Fue más por las voces. –Admitió y vio como asentía-

-Enserio nos da gusto verte estable. –Aquella chica pelinegra contestó-

-No les quitamos más su tiempo y gracias. –Clarke les volvió a sonreír-

-Nos vemos, Clarke. –Se despidió Bellamy.