Cita

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Con una sonrisa se miro una vez más en el espejo. Cuando estuvo satisfecho se decidió a salir para encontrarse con Steve. Este lo esperaba no muy lejos de su centro de estudios. Miró su reloj y se percató que había llegado 15  minutos antes. Al mirar al frente se encontró con un distraído Steve con una caja en la mano. Se acerco sigilosamente y lo sorprendió por detrás.
-Hola guapo, ¿a quién esperas?
-A mi lindo novio. Se podría poner celoso si me encuentra con un chico tan encantador como tú.
-Creo que se pondrá más celoso si nos ve así.- Dicho eso se paro de puntas y abrazo por el cuello a Steve para atraerlo en un largo beso. Al separarse se quedaron mirando por un rato. Steve fue el primero en romper el silencio.
-¿Listo para nuestra aventura?
-Contigo estoy listo para enfrentar el universo.- Steve lo acerco más a sus brazos hasta que recordó el regalo que le compró a Tony.
-Te compré algo.- Le entrego la caja a  Tony para que la abriera. El castaño se encontró con un juego de donas de diferentes sabores y glaseados. Los ojos de Tony brillaron junto con su sonrisa y ese fue el mejor regalo para Steve.
-Gracias. Podría casarme contigo si me vas a alimentar con donas.- El capitán rió ante las ocurrencias de su pequeño.
-Te alimentaré con comida más saludable.- Bromeó.
-No lo arruines.- El regaño del menos hizo reír al capitán.
-Será mejor que nos vayamos para aprovechar el día.
-¿A donde iremos?
-Ya te dije que sería una sorpresa.- Dijó Steve poniéndose sus lentes de sol y guiando a Tony hacia su nuevo carro.
-Linda nave, pero no tanto como su piloto.
-Jarvis me tiene amenazado si no te transporto en un vehículo seguro.
-Lo siento por eso.
-No te preocupes. Me gusta que se preocupe por ti.
-El ha sido mi niñera desde que tengo memoria.- Tony sonrió al pensar en su peculiar mayordomo.
Tras un viaje de un par de horas por la larga carretera rodeada de campos llegaron a una feria de pueblo. El lugar estaba lleno de coloridos juegos mecánicos, puestos de comida y otros juegos de habilidad. Nunca había estado en una feria de pueblo, así que se emocionó al ver toda esa cantidad de juegos. Por un lado no quería mostrarse tan emocionado porque no quería lucir como un niño, pero no pudo evitarlo y jalo a Steve a varios juegos y a los puestos de comida. En uno de esos juegos de habilidad, Steve ganó un oso con un polito de la bandera de Estados Unidos. El día no podía ser mejor para Tony. Amaba las cosas sencillas que Steve le enseñaba. Al anochecer, asistieron a la proyección de una vieja película en un autocine. En una parte de la película se distrajo viendo el rostro de Steve concentrado. Sonrió para si mismo cuando recordó lo despistado que era su capitán. Steve despegó sus ojos de la pantalla para dirigirse a la castaña mirada que lo estaba vigilando desde hace unos minutos.
-¿Tengo algo en la cara?.- Preguntó confundido.
-No... Solo me distraje pensando en todo este tiempo juntos. Gracias por hacerme feliz.- Steve cogio suavemente una mejilla de Tony y lo atrajo para depositar un dulce beso.
-Te amo Anthony Stark. Eres la estrella que guía mi vida. Todos los días intentó ser mejor persona por ti. Me gusta cada detalle de ti y tus hermosos sentimientos que aveces temes mostrar. Yo siempre voy a cuidar de ti.- Tony casi rompe en lágrimas al escuchar la confesión de su amado.
-Antes de ti, mi vida no tenía un rumbo fijo que seguir. Me enseñaste a disfrutar de la vida y amar la sencillez de mi alrededor. Tu confianza en mi ha hecho que logre cosas que no sabía que podía lograr. Te has adueñado de mi corazón Steven Rogers. Te amo.
Ambos corazones se acercaron para sentirse más. Los besos llenos de amor no faltaron esa noche, hasta que fueron interrumpidos por fuegos artificiales de los colores de la bandera. Como el día que se conocieron fueron desplegados para ver el cielo. Era un espectáculo hermoso. Tony aprovecho para acercarce a Steve y plantearle un beso y acercarce a su oreja para susurrarle un "Feliz cumpleaños". Para cuando Steve se dio cuenta de ese detalle solo sonrió. Su pequeño era increíble.

SOLO TÚ ♡ STONY AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora