DESPACITO, domberto.

O25

— Hola — Alberto sonrió amablemente mientras entraba a la habitación del rubio quien se encontraba acostado con su celular en las manos, probablemente en Instagram —, tu mamá me dejó pasar.

— Sí, está bien — Dom trató de sonreír sin llegar a lograrlo y dejó su teléfono en su mesa de luz —. ¿Cómo te fue con Matt?

Dominic lo miraba serio, por dentro deseaba que le dijera que había ido mal, que había sido una mala idea salir con Matt y darle la espalda a él.

— Bastante bien, Matt es algo estúpido pero es genial. Nos sirvió para conocernos más, ¿sabías que ama el helado de menta? Porque yo no — el castaño rió y dejó su mochila en el suelo al lado de la gran cama —, tampoco tenía idea de que se sabía un par de canciones de fifth harmony.

— Sí, Alexandra y Catherine aman fifth harmony, por ende Matt se sabe un par de canciones de ellas, de hecho, creo que sólo se sabe Bo$$, Work from home y Worth it — el chico de ojos azules suspiró.

Alberto sonrió, las cosas estaban volviendo a ser como siempre y no sabía si eso era bueno o malo.

— ¿Para qué querías que viniera? ¿Qué es tan importante que no puedes esperar?

— Yo ... — Dom mordió su labio, claramente nervioso. Iba a seguir hablando cuando el celular de Alberto avisó que tenía un mensaje.

— Déjame ver quién es — el otro chico se disculpó sacando su celular del bolsillo delantero de sus pantalones.

Whatsapp
2 mensajes de 2 conversaciones.

Alberto suspiró y abrió la notificación, un mensaje era de su madre avisando que Dom dijo que quería que se quedara allá y que se portara bien.

El otro mensaje era de Matt, Dom miró la notificación por arriba del hombro de Alberto. Bufó frustrado sin mirar el contenido del mensaje.

"Adivina a quién le envió un mensaje Harry."

El castaño rió.

"¿A Kaytlin?" Se burló.

"A mi, idiota. 🙄"

Alberto estaba por contestarle cuando Matt volvió a escribirle inmediatamente.

"Olvídalo, sólo quería saber si teníamos cosas que hacer para dibujo técnico."

El chico comenzó a reír a carcajadas, y Dom sonrió levemente, le encantaba oír reír a Alberto aún cuando él no era quién lo hacía, luego recordó que se reía por Matt y volvió a ponerse serio.

— ¿Qué quería Matt?

Alberto ignoró el hecho de que Dominic no había respetado su privacidad y le respondió mordiéndose el labio, tratando de no sonreír o reír mejor dicho.

— Él sólo quería saber cómo estaba yo, si había llegado bien y eso — mintió deseando que Dom no se diera cuenta.

— ¿Él sabe que venías para aquí?

— Sí, de hecho me acompañó hasta la casa de Emeraude, quería acompañarme hasta aquí pero me negué — explicó, la pelinegra vivía a un par de casas del rubio.

— Ajá.

— Debe pensar que vas a comerme, o no sé.

— No voy a comerte — Dominic se apresuró a decir —, es decir, sí quieres que lo haga lo haré pero no.

— No quiero que me comas, eso suena escalofriante. De hecho, detesto la expresión "voy a comerte", es como, no soy comida. ¿Tengo cara de pizza o algo por el estilo?

Dom rió.

— Si lo pones de esa forma, suena bastante estúpido.

Alberto negó divertido mientras sonreía. Le encantaba estar de ésta forma con Dom, sólo ellos. Sin aparentar, sin filtros que decir.

El castaño miraba sus zapatillas, pensando en cómo es que había terminado enamorado de Dom, porque sí, estaba seguro de que estaba enamorado, sin siquiera percatarse de que el rubio lo miraba como quien mira el atardecer por primera vez.