17•

2.8K 260 16
                                    

- ¿Aquí es?. - Preguntó frenando de a poco.

- Si, es ahí, la casa color verde. – Respondió Taehyung apuntando a la residencia.

Hoseok paró la motocicleta justo al frente de la casa y con sumo cuidado se estacionó. Taehyung, quien viajaba en la espalda de Hoseok, hizo lo posible por bajar de la cómoda motocicleta, pues el chico se había casi dormido, de no ser por que se sostenía fuertemente de él para no caer. Con un suspiro aún más cansado que su cuerpo, se bajó.

- Gracias por el viaje, te debo una.

- No te preocupes, no es nada. Bueno,me voy, te veo luego. – Se despidió encendiendo la motocicleta de nuevo.

- Espera. – Dijo Taehyung, deteniendo su huida. - ¿No quieres tomar algo? Debes estar sediento. Agua, jugo, lo que quieras.

- Bueno, ahora que lo dices... – Apagó la moto, bajándose para después colocar el freno. – Estoy un poco sediento, me gustaría beber algo de agua. – Dijo con una sonrisa.

Taehyung simplemente asintió ante aquella sonrisa brillante, realmente ahora que lo pensaba, ese chico si que era lindo y más cuando esa sonrisa acorazonada y perfecta aparecía en su rostro. En sí pensaba que él era genial, era un punto a favor para el chico quien lo había cautivado con una excelente primera impresión, y tal vez, si se daba la oportunidad podría lograr una amistad con él o algo más.

Invitó al chico a pasar y tomar asiento. Hoseok pensaba lo ordenado que estaba todo, los muebles estaban relucientes, el color de la madera brillaba al igual que el piso, la decoración era rústica pero no aburrida. Se sentó en el sofá de cuero color chocolate, era cómodo y relajante.

- Ahora vuelvo, voy por algo de agua. – Dijo Taehyung por lo que Hoseok asintió con la cabeza.

Para Hoseok, el husmear en las pertenencias ajenas nunca era bueno, la privacidad de cada persona era sólo suya, más sin embargo, la curiosidad siempre se ponía por delante de sus principios, pues no tardó mucho para que se levantara del sofá y decidiera observar más de cerca las fotos familiares que decoraban la vitrina al frente. Comenzó por una fotografía de marco color pastel, en ella se observaba a un niño pequeño que al parecer era Taehyung, sonreía felizmente mientras estaba sentado en una de esas mesitas para bebé, era tan lindo que hizo a Hoseok sonreír.

- La tomaron cuando mi mamá cumplió años, estaba comiendo pastel, mamá dice que me encantaba y siempre comía a pesar de tener solamente dos dientes. – Dijo Taehyung, con dos vasos de agua en sus manos. Se acercó hasta Hoseok, entregando el vaso de agua, observando las fotografías frente a él.

- Ésta de aquí. – Apuntó a un marco con seis fotografías. - Fue la primera vez que visité el mar, tenía apenas siete años. Papá tenía que trabajar en una fabrica cercana, así que aprovechamos el tiempo para visitar el mar.

- Se ven muy felices, ¿ese niño de ahí es tu hermano?. – Preguntó apuntando hacía un chico un poco más grande que él.

- Si, tenía doce años, siempre peleábamos por cosas sin sentido pero al final ambos terminábamos pidiéndonos disculpas. Él solía llevarme a todas partes, era como su chicle humano. – Rió.

- Deben llevarse muy bien. – Dijo Hoseok.

- Nos llevábamos excelente, siempre era mi guardaespaldas, me protegía en todo momento.

- ¿Él ya no vive contigo?. – Preguntó el mayor.

- Él murió hace siete años en un accidente automovilístico. – Contestó, tomando un trago de agua.

- Lo siento..

- No te preocupes, aprendí a vivir con resignación. Después de que mi hermano muriera, la relación con mi padre cambió rotundamente, él tan sólo llegaba a casa, cenaba y se dormía, los "Buenos días" que antes solía darnos, se convirtieron en una mirada fría, había ocasiones en donde ni siquiera una mirada merecía. Cuando nos sentábamos a desayunar, trataba de sostener una conversación con él pero simplemente me ignoraba o contestaba cortante. Mi madre siempre trató de ayudar a mi padre, lo atendía tiernamente, sin embargo nunca fue suficiente. Con el paso del tiempo, la relación de mis padres empeoró a tal grado de pelar todos los días, pero fue el colmo cuando mi padre golpeó a mi madre después de llegar ebrio a casa. La muerte de mi hermano no sólo lo afectó demasiado, lo hizo volverse una persona fría y grosera. Dos años después del accidente de mi hermano, mis padres se divorciaron debido al carácter de mi papá. Entré en depresión a tal grado de no asistir a clases, sólo dormía y dormía, mientras mamá trabajaba. Pude superarlo con ayuda psicologíca y gracias a mamá y Jungkook, quien fue como un hermano para mí. Fueron momentos difíciles, es por eso que amo a mamá, nunca se dejó vencer a pesar de todo, es como una heroína para mí. Y talvez por eso quiero tanto a Jungkook, porque siempre se portó como un hermano para mí. – El silencio hizo eco en la sala de estar, ambos seguían inmóviles, tan sólo observaban la vitrina. - Ohh, y-yo, lo siento, creo que dije demasiado, lo lamento no tenías porque saber todo eso.

BabyLand🍼[지국]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora