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~Pelirroja~


Una fiesta en honor al cumpleaños del joven Eric se realizaba en los jardines de palacio, era una fiesta de cumpleaños de la cual muchos jóvenes burguéses estaban presentes en ella, hablando de cosas burdas o solo jugando criquet en los pastizales del jardín. Kyle observaba al pelinegro con necesidad. Una mano calida se puso en sus cabellos rojizos.

"Señor Stotch"

Dijo Kyle al notar de quien de trataba aquel cariñoso gesto. Al rubio al ver al azabache arrugó la nariz sutilmente mientras que al ver los ojos de enamorado que Kyle poseía un suspiro escapó de sus labios.

"¿Estas enamorado de Marsh?"

Dijo sin más y tomó asiento junto al pelirrojo quien no dijo palabra alguna, solo se limitó a observar al pelinegro con adoración.

"Es algo imposible, no lo diga por favor"

Respondió mientras de sus ojos caían unas lágrimas saladas de gusto amargo en el paladar. Estaba hundido en lo imposible, ya lo había aceptado, cada parte de ese hecho lo había aceptado por completo, el jamás podría sentirse amado por esa persona gentil.

Leopold tomó la mano del pelirrojo con suavidad y lo arrastró hasta su habitación. Habían subido escaleras interminables y Kyle ya estaba cansado. Al ver el gran ropero del chico rubio sus ojos se sorprendieron, docenas de vestidos de fiesta estaban en el, de todos y variados colores mientras que las zapatillas de tacón estaban en los muebles de más abajo. Al rubio buscó por unos minutos el vestido adecuado y se lo lanzó al pelirrojo mientras que sacaba las zapatillas y otras cosas de los muebles.

"Eric dijo que cuidara de ti en la fiesta, así que... Te haré feliz por hoy, magnolia"

 Habló el rubio con diversión, el vestido de color blanco que fue elegido por el muchacho, las extensiones de cabello que eligió del mismo color que los del cabello del pelirrojo; el maquillaje y los detalles del cabello. Al cabo de una hora Kyle parecía una chica muy guapa y pura. Al verse al espejo de la gran habitación noto que no era él, que era una chica muy linda.

"Habla más agudo de lo que ya lo haces, siempre recto y delicado, aunque eso ya estaba listo..."

Dijo el rubio mientras que arreglaba los últimos detalles del vestido. Sus manos fueron maquilladas y hasta su cuello para ocultar algunos rasgos masculinos.

"¿Porque me vistes de chica?"

Preguntó Kyle mientras se observaba detenidamente en el  espejo.

"De chico no tienes oportunidad de nada, pero de chica.... Tienes el cielo comprado y aún más alguien tan femino como tú"

Tomó la mano del pelirrojo y le llevo  hasta el lago que también era parte de los alrededores de palacio y en la cual  las personas no siempre visitaban en las fiestas.

Dejó al chico completamente solo en aquel lugar, pero este al ver como el azabache se encontraba en uno de los puentes que cruzaban aquel gran lago, no dudó en quedar en blanco, temeroso e incapaz de caminar hacia ninguna dirección. 

De un momento a otro sonó un "Crash" y una de las ramas de los árboles que envolvían al lago había caído golpeando al muchacho pelinegro y destruyendo parte del puente de madera, dejándolo en pedazos.

Kyle se quitó las zapatillas y corrió lanzándose al lago frío, el vestido era estorboso pero llegó hasta el azabache y acunadole entre sus brazos lo llevó a la orilla de este dándole sobre el pastizal frondoso de la orilla de este, se sentó en la orilla del lago y observó las facciones húmedas del rostro, el como respiraba por qué el pecho lo delataba pero al ver y encontrarse con la mirada del pelinegro su sonrojo fue suave y al momento de acariciarle la mejilla con suavidad este cerró sus ojos. Unos pasos a la lejanía y una risita y voz de mujer lo soprendieron pero  al querer pedir ayuda tuvo en cuánta que el maquillaje, el vestido y las zapatillas ya no los tenía consigo. Dio un grito de pavor y volvió al agua nadando por bajo esta y saliendo por otro lugar del lago; tras unos árboles vio como la chica se hacía cargo de su gentil pelinegro y se sentía aliviado por ello, pero algo le dolio, ella junto a él, tomándolo en sus brazos y  tocándole el rostro con sutileza "Quiero ser ella... Porque no puedo serlo" pensó mientras que sus manos se aferraban al tronco de uno de los árboles y en sus ojos esmeralda se formaban dos posas de agua salada que luego se derramarían por completo.

Al verlos desaparecer entre el pasto acolchonado en dirección a palacio comenzó a buscar las zapatillas  que le hacían juego al vestido y tomando este que en la espera de había secado por completo, caminó por la parte trasera del palacio hasta llegar a las escaleras de servicio de las cuales anteriormente había bajado. Al llegar a la habitación del muchacho rubio comenzó a desvestirse dejando el vestido en una de las sillas y las zapatillas sobre esta, se quitó los aretes y el resto de maquillaje disperso en su rostro. Un "Click" sonó sutilmente y una voz familiar se hizo presente.

"Leo, ¿estás aquí?"

Hablo un castaño que sin preguntar solo entró a la habitación encontrando a un pelirrojo en ropa interior con un pañuelo manchado de maquillaje. Eric al verlo cerró la puerta tras de él, sus ojos se posaron en la leve desnudes del muchacho y otra vez ese sentimiento de devorarlo lo volco pero se contuvo de alguna barbarie.

"¿Qué haces aquí? Judío"

Preguntó con un gélido tono de voz y unos ojos fríos y calculadores. Se acercó al muchacho removiendo su cuerpo, el chico pelirrojo estaba en shock, había Sido descubierto usando ropas inadecuadas y además en la habitación de uno de los sobrinos de la reina.

"¡Responde, mocoso de mierda ¿Qué haces aquí?!"

Se exaltó el castaño, las lágrimas del pelirrojo cayeron por sus mejillas y un chillón hilo de voz salió lentamente. Eric al verlo solo pudo abrazarlo suavemente, estaba tomando a un ser tan frágil que si le apretaba demasiado creyó romperlo en pedazos.

"Yo... No le diga a alguien, por favor"

Jadeo entre lágrimas Kyle, no podía ser descubierto en aquella posición o sería si muerte total. Eric no aceptó la tentación de besarlo pero si acariciar esos rizos que le fueron tan llamativos la primera vez.

"Soy un tumba pero deja de llorar por la mierda, me estresas, Judío "

Habló con un leve tono de amabilidad, Eric estaba tomando a un ángel y eso era lo peor. Mientras que Kyle asentía varias veces sobre el pecho del robusto muchacho castaño y se abrazaba de este con fuerza.

Sirenita [KyMan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora