— ¡Que hermosa!— fue lo primero que dijo la mujer de ojos marrones claros y cabello castaño rizado. Fue un grito muy impulsivo que salio naturalmente de la sastre.— Estas aun mas hermosa que antes de irte querida Elizabeth, será un gusto hacer tu vestido de boda.
— Muchas gracias Señorita Nina, es bueno volverla a ver después de tanto tiempo y de saber que esta dispuesta a realizar mi vestido, seguro será muy bello...— no pudo terminar de alagar a la mujer que pareció estallar de emoción
— ¡Bello es poco! — respiro un segundo y libero todo el aire acumulado en otra frase mientras se arrancaba la falda que llevaba puesta con el fin de mostrar que debajo de esta tenia un pantalón algo corto— ¡ya me llego la inspiración! ¡Arranquemos!
Nina se acerco a Elizabeth y tomo medida de todos lados de su cuerpo. Mientras todo esto sucedía Lady Margaret y Frances Midford se encargaban de otros asuntos tales como adelantar pedidos o reorganizar la boda. El doce de Abril era perfecto por es un día de primavera, pero pleno Febrero... Aún no era la mejor temporada para festejar un matrimonio. Incluso el padre de Lizzy, Alexis y Edward tuvieron que colaborar con el asunto. No era tarea fácil ver los preparativos para una fiesta de semejante calidad como tenían planeado las estrictas mujeres.
Del otro lado, en la mansión Phantomhive, donde se celebraría la boda, Sebastian iba viendo como quedaría mejor todo tal y como se lo planteo Margaret. De tal manera que Sebastian también estaba participando en los preparativos.
Unos días después fueron enviadas las nuevas invitaciones, tal hecho desconcertó a todos. Nuevamente los comentarios por lo bajo surgieron con mas intensidad, estando en boca de cada ciudadano de Londres, en especial de la Corte. Esta vez hasta a la mismísima Reina Victoria se vio preocupada por ese repentino cambio de planes de parte de su perro guardián y su prometida.
Pero quien sin duda la que estaba mas que al pendiente de cualquier tema, incluso el mas mínimo, relacionado con el matrimonio era Miranda. Quien incluso llego a retrasar su vuelta a su país con el fin de quedarse hasta el ultimo momento. No se dio por vencida, solo esperaba, sentía que su oportunidad se iba a presentar y que junto a Calima la iban a utilizar tanto como sea posible.
Ya cayendo la tarde la modista se retiro de la Mansión Midford con algunos bocetos hechos junto con las medidas que tomo, y algunas peticiones de las encargadas de la ceremonia. Lizzy aprovecho ese breve momento para tomar un poco de té mientras disfrutaba del jardín a través de un gran ventanal. Pero esos minutos no pudieron vivirse a pleno ya que fue solicitada su presencia para saludar a un visitante.
Aquel visitante era Ciel, pero de alguna manera se veía raro, utilizaba un traje que no parecía muy del estilo habitual, ademas de otros detalles que podías notar si observabas con mucha precisión, tales como algunos mechones peinados de distinta manera, y un pequeño lunar en la mandíbula que Lizzy juraría que nunca noto.
— Buenas tardes querida familia.— eso se sintió raro, esa frase: "Querida familia" tan inusual en Ciel, con ese tono tan sarcástico, con una sonrisa tan hipócrita, con esa voz levemente mas aguda.— Disculpen que llegue sin avisar, pero quería ver como iba todo...
— Esta bien, es bueno ver que muestres interés, después de todo Elizabeth no se casa sola...— respondió la Señora Frances regañando al muchacho frente a ella.— ¿Que quieres ver? Porque es muy raro que vengas a saludar solo por el hecho de que seamos familia.
— Lo siento querida tía, quería conversar con mi prima, luego pasaré a saludar al resto.— pareció decirlo con cierto tono de insolencia y molesto por los reproches de la mujer.— quería conversar con Lizzy sobre unos temas en privado, no es nada grave...¿Esta bien?
— Puedes, pero no me agrada mucho tu actitud el día de hoy sobrino. Tampoco que gusta que anden con secretos entre ambos, aun no están casados.
Lois acompaño a ambos jóvenes hasta el invernadero donde anteriormente Elizabeth disfrutaba de tu cálido té y luego se retiro para dejar a ambos muchachos a solas.
Algo no estaba bien, Lizzy lo sentía, estaba nerviosa, pero luego aclaro su mente, por mas cosas sin sentido que hayan pasado en este ultimo tiempo dudaba que el verdadero Ciel se haya atrevido a entras a su casa fingiendo ser el hombre que ella ama.
— Creo que tenemos que hablar muy seriamente querida Lizzy...— lo dijo de con una voz muy intimidante mientras se acercaba a ella lentamente, Elizabeth dio unos pasos atrás pero se encontró con la pared. El muchacho frente a ella se quito el marche que llevaba puesto y mostro que tenia dos ojos azules que no le quitaban la vista de encima a la joven. Él no tiene la marca.
*Me equivoque, este no es mi Ciel...
— ¿Que quieres?
— Que altanera que te haz vuelto Lizzy querida ¿Acaso aprendiste eso de mi hermano menor o en tu viaje fuera de Londres? — el hecho de que este sujeto supiera tantas cosas de la vida de ella le molestaba demasiado.
— ¿Y tu cuando aprendiste a ser tan sarcástico y amenazante? — Lizzy estaba temblando, pero no pensaba dejar que ese Ciel la asustará con sus palabras y acciones. Ya no era ninguna niña tonta para que la intentaran tratar así nuevamente.—Entonces ¿Que quieres?
— Wow, parece que haz crecido en todos los sentidos. — recorrió rápidamente con su mirada la figura de Lizzy y volvió a retomar la palabra.— Aunque bien que te desmayaste la otra vez, ahora dime..¿Acaso no sabes que es conmigo con quien te debes casar?¿Por qué diablos quieres adelantar la boda?— Elizabeth no emitió respuesta e intento esquivar la mirada pero él tomo su rostro obligandola a verlo.— Ya veo, ahora si guardas silencio. Sé muy bien que algo planean tú y el idiota de mi hermano.— bajo un poco el tono— ¿Acaso olvidaste cuanto nos queríamos?
— Jamas lo olvidaría, sé que la vida fue injusta contigo querido primo, pero eres tú o él.
— ¿Lo amas?
— Así es, por eso te suplico que no compliques la situación... Retírate en paz de nuestras vidas.
— ¿Quieres que me vaya? ¿Acaso no ves lo injusta que eres?— Lizzy lo sabia estaba mal su petición, pero era lo que deseaba— Quieres que me vaya, que olvide que soy un Phantomhive, que deje que mi vida la viva mi hermano menor, que disfrute de todo tipo de comodidades mientras yo vivo en el completo anonimato, sin poder gozar de lo que es mi por ley.
*Soy una mala persona y una egoísta, ahora lo tengo en claro. Ahora lo siento mas, pero si no lo soy voy a perder al hombre que amo, el será castigado incluso si su hermano se apiada y pidiera que no lo sentencien, la corte lo condenarían de todos modos y yo me vería obligada a casarme con este sujeto.
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¿Amor o Deber? - Ciel y Lizzy
Romance[completa/finalizada] Esta historia se centra cuando la Marquesa Elizabeth Midford, después de unos años alejada de Londres, regresa con la idea de afrontar su compromiso con el Conde Ciel Phantomhive con una mirada mas adulta y responsable. En cami...