Obsesión carnal. » Min Yoongi.

Calm.

Daba vueltas de un lado a otro en la cama, no podía sacar de mi cabeza ese sentimiento de culpa.

He matado a inocentes...

No había logrado pegar un ojo durante toda la noche, no dejaba de ver los cuerpos apuñalados y ensangrentados, que yo misma me encargué de dejar sin vida.

Nunca me había sentido tan atormentada, pero no debería sentirme así, si todo lo que hice dio frutos, mañana puede que cumpla mi sueño.

Debía hacerlo, debía hacerlo, debía hacerlo. Repetí en mi mente, hasta convencerme de ello. Si no lo hubiese hecho, no hubiese logrado tanto. Los mediocres de mis padres, ya no me estorban, el que haya matado a aquel viejo verde, salvó a muchas chicas de tal vez ser violadas por él, y el conserje, bueno, no quiso cooperar.

Analizando bien las cosas, dejé de sentir culpa, pero aún sentía preocupación. Estaba asustada de que descubrieran todo, aunque, estaba muy lejos del lugar dónde maté a tres personas, aquí bien podrían encontrarme por matar al conserje. "La policía está haciendo averiguaciones", las palabras de la mujer que escuché antes de salir del edificio, saltaron a mi mente, causando que me hiperventilara. ¿Y si me encontraban? ¿Y si me encarcelaban? No podría hacer lo que vine hacer, no podría cumplir mi objetivo de que él me haga suya.

Mantén la calma Sunhee, lo has hecho bien hasta ahora, y nada va a impedir que realices tu sueño.

Empecé a relajarme, pensando en lo bien que besará Yoongi, en lo deliciosa que se debe sentir una caricia de él. Esos pensamientos me ayudaron a sacar toda la preocupación de mi sistema, y me ayudaron a deslizarme a otro de mis sueños mojados.

~~

Desperté, gracias a la alarma que puse el día anterior. 5AM. Hora de trabajar.

Fui al baño, me di una ducha, y luego me vestí con el uniforme que había comprado en una tienda cualquiera. Se supone que iría a limpiar el estudio de Hoseok, y me pidió que estuviese temprano. Así que salí de la habitación, cerciorándome de llevar todo lo necesario, mi ropa de repuesto, mis herramientas de manipulación de personas, el teléfono y algunas sogas, por si eran necesarias. Bajé por el ascensor, y en cuanto pasé por la recepción, pude notar la presencia de dos policías, hablando con el recepcionista. Pasé de largo, no quise ni detenerme a escuchar que decían, estaba en pánico, y lo mejor era que me fuese rápido al departamento de los chicos.

Caminé de forma apresurada, sentía que la policía me estaba siguiendo, aunque no fuese literalmente así, de cierta forma lo hacían, ¿qué hacían allí? ¿Será que saben que me hospedo allí? No, seguro ni siquiera saben quién fue que mató al señor aún.

Ya, ya, céntrate Sunhee.

Llegué en poco tiempo al edificio. Puse el carnet en el lector, entré y subí las escaleras lo más rápido que pude.

Estaba muy ansiosa, por alguna razón sentía que se me acababa el tiempo, pero no, nada va a impedir que cumpla mi objetivo, nada.

Toqué el timbre, y un adormilado Seokjin abrió la puerta al cabo de unos minutos, el corazón me dio un vuelco, se veía tan guapo. Me miró extrañado, y yo sólo sonreí.

— Buenos días, emm... el señor Jung me pidió que viniese temprano, disculpa si molesto.— Inmediatamente el cambió su expresión, y me dio espacio para pasar.

— Ya voy por él.— Dijo, y se fue hacia el pasillo que da a las habitaciones.

Esperé por unos cinco minutos, y luego un animado Hoseok apareció, dándome los buenos días, con una sonrisa radiante, la que yo respondí con una igual. Él me indicó dónde estaba su estudio, y me abrió para que yo empezara mi trabajo.

— Yo debo salir.— Dijo cuando estaba por retirarse del cuarto.— Pero me imagino que ya sabes dónde está todo lo de la limpieza aquí, es tu trabajo. De todas maneras, por allí quedará Yoongi.— ¿Yoongi? ¿Solo?— Gracias por venir temprano.— Volvió a sonreír y se fue.

Quedé un momento en shock, sin poder creer lo que acaba de decir, por fin tendría a Yoongi sólo para mi, el universo está poniendo las cosas a mi favor, y no desaprovecharía la oportunidad.

Di pequeños saltos de emoción. Yoongi será mío, y yo seré suya.