Rechazada Por El Alpha

Todo como lo queria

Evans

Cargue en mis brazos a Ale, caminé por el corredor hasta poder llegar a la puerta de salida de estas celdas y luego caminar hacia la salida de la casa. Al llegar los chicos estaban asegurándose de que las personas inocentes estuvieran bien.

Llegue hasta la camioneta y dejo recostada a mi hermosa mujer en la pasarte trasera.

Los chicos estaban colocando a los lobos en camiones especiales para el trasporte de lobos como ellos. Ann y los demonios de la manada estaban colocando a los cazadores muertos en un camión también, para luego ser quemados.

-ya está todo listo para partir a la manada y dejar a los prisioneros en las celas Alpha, necesita algo mas- dijo uno de mis guerreros

-si, avisar a todos que ya nos iremos cuando terminemos de apagar los incendios, dile a los camiones que partan a la manada, puedes retírate.

-de acuerdo, con su permiso Alpha

Mis guerreros comenzaron a ir hacia la manada, algunos en los camiones y otros trasformados. Caminé hacia los lobos pubertos que están amarrados para así desatarlos.

Rodrigo comenzó a ayudarme a liberar a todos los niños ya que eso son, niños están creciendo es igual que la pubertad pero mejor.

Sebastián y Pedro se dedicaron a apagar el fuego, Javier y Luk estaban reuniendo los cuerpos de nuestros caídos, Antonio estaba en la camioneta cuidando de mi mujer.

Cuando ya estaban todos libres, el fuego apagado y todos mis caídos reunidos partimos hacia la manada.

Caminé hacia mi camioneta, Ann subió de copiloto ya que Antonio estaba en la parte trasera acariciando el cabello de Ale.

El camino fue callado, algunos de los camiones estaban frente a la camioneta, algunos de mis guerreros que llegaron en las camionetas están detrás de mi camioneta.

Cada vez quedaba menos para llegar a la manada y darme la satisfacción de torturar al maldito de Luka, por mi mente solo paraban las una y mil ideas de cómo torturar al infeliz.

No me había dado cuenta de que ya habíamos llegado, los chicos comenzaron a sacar a los lobos de la manada Victoriano y los comenzaron a distribuir por las celdas que tenemos.

 Yo tenía una celda especial para el maldito infeliz de Luka, estaba al final en el último piso. Mi calabozo se divide en 4 pisos, el primer y el segundo piso es para cazadores, lobos y vampiros. Los dos pisos tienen un total de 200 celdas de plata y oro puro que está asilada para que así a mis guardias no les haga daño ya que ellos pueden salir dañados, los pasillos tienen un vidrio super resistente que aísla la plata y el oro de los pasillos.

 El tercer piso consta para diferentes criaturas tiene alrededor de 150 celdas y sirven para criaturas como gnomos, hadas, elfos, enanos, sirenas, ninfas, centauros, trols, etc....

 Y él último piso es para las torturas un cuartos especializado, tiene un total de 4 habitaciones que dos de ellas son para la tortura de cualquier ser mágico, un cuarto esta lleno de herramientas a demás de armas que sirven para la tortura y el la cuarta habitación es el cuarto de vigilancia de la manada y obviamente de el calabozo completo.

Los guardias dejaron a un inconsciente Luka en el cuarto piso ya que yo se los ordené, comencé a bajar por las escaleras para asegurarme de que todo estuviese como debería, que todos los implicados en el secuestro de mi mujer estén en sus celdas como tiene que ser.

Estaba llegando al tercer piso y siento varias pisadas detrás de mi, tengo más que claro que son los chicos ya que al igual que yo están furiosos y desean hacer justicia por sus manos.

-necesito saber quiénes fueron aquellos que osaron tocar de aquella manera a su luna.- dije con los dientes apretados y el cuerpo muy tenso, Antonio estaba a mi lado y también se tensó.

-y sabemos quienes son-dijo Rodrigo- luk se está encargando al igual que Ann. No dejaron que nadie se acercara ellos querían torturarlos.

-Fernando ve a verificar que todo está bien ya que sabes cómo se coloca luk y la idea es que no esté peor.

-okey yo me encargo de el 

-gracias

Fernando se retiró de la sala para poder cuidar a Ann y a luk de cometer alguna locura.  Antonio también fue ya que el es el único que puede calmar a Ann sin salir herido.

Seguí bajando las escaleras con el resto de los chicos hasta que llegamos al piso deseado. Caminé hasta la puerta en donde se encontraba el mal nacido de luka y el único pensamiento que cruzaba mi mente en esos momento es que estaba todo como yo quería que estuviera.

Los chicos se quedaron afuera y no necesite decir celos ya que lo tienen mas que claro 

Gire la llave de la puerta y empuje de esta para poder ingresar.