Lost City. Mi Nueva Vida.

18

Capítulo 18 "Café y viandas"

Harry llegó por la mañana con una resaca tremenda que les sorprendió a los Granger, mientras que Hermione durmió como un ángel en cuanto Draco la dejó en el departamento. Ambos se veían complacidos con su noche.

—Harry espero que no adquieras el mal hábito de beber —sugirió el señor Granger, picando con entusiasmo un huevo con pan tostado.

—No, nada de eso señor, es que me dejé convencer por una serpiente que es demasiado persuasiva.

—Todos los Slytherin son así, Harry —comentó Hermione ofreciéndole un café.

—No volverá a pasar.

—El alcohol daña mucho el esmalte de los dientes —participó la señora Granger acercándole un jugo de naranja y una servilleta.

—Lo pensaré la próxima, siento mucho causarles estos problemas, si desean puedo irme.

—Nada de eso. —El señor Granger dejó de lado su periódico y observó a su hija e invitado. —No es un regaño. Ambos son lo suficientemente grandes para tomar sus decisiones, no comparto el alcoholismo y las salidas nocturnas, pero...

—Papá...

—Lo sé corazón, se que no hicieron nada malo. Aunque me parece que el joven del 403 no es la mejor elección de amistad. Tal vez podrían separarse un poco de él.

—No creo que pueda hacer eso. —explicó Hermione sin ceremonias, cogió un poco de aire y terminó por informar lo que suponía debía ser una bomba para todos. —Estoy saliendo con él.

El tenedor de Harry y la señora Granger se quedaron a medio camino. El papá de Hermione parpadeó un par de veces antes de hablar.

—Creí que no lo soportabas.

—Aún no lo soporto.— exhaló.

—¿Cómo puede ser tu novio una persona que no soportas?

—No es mi novio papá, solo saldremos, para conocernos mejor y todo eso. Así que como comprenderás no puedo alejarme mucho de él. De hecho, tal vez todos lo vean por aquí más seguido. Se que no tengo que pedirles que sean agradables con él.

—Cariño...— Jean Granger cuadro los hombros, y Harry noto el impactante parecido que Hermione y ella compartían. —Tu padre y yo nunca hemos interferido en tus decisiones porque sabemos lo centrada e inteligente que eres, pero en este caso, nos gustaría que escucharas nuestra opinión. Ese chico tiene muchos problemas a cuestas, no creo que sea el momento adecuado para que salgas con él.

La mirada de Hermione cayó a su plato y a Harry se le formó un nudo en la garganta. Estaba seguro que todo eso, Hermione ya lo sabía, pero oírlo de otros era peor.

—Si me permiten...— Harry tragó el nudo e intervino a favor de Draco. —Yo tampoco era una buena opción de amigo. Se puede decir que toda mi vida era una maraña de problemas, aún ahora, sigo tratando de arreglar todo, pero se que si Hermione y Ron no hubieran insistido en ser mis amigos... posiblemente todo habría acabado muy mal para mí y para todos. Draco es la definición de: un malcriado petulante parado en un mal lugar, en un mal momento. Pero no creo que eso lo defina. Hermione quiere darle una oportunidad, la que me dió a mi, a Ron y a muchos más. Confíen en su juicio una vez más.

El silencio en el comedor reinó después de eso. Hermione le agradeció con la mirada y los Granger se centraron en analizar sus palabras.

Tal vez, apesar de todo, Harry también era capaz de interceder por su antiguo bully y en ello había tenido que ver Rosier.