EL MISTERIO (Editando)

9 LA DUCHA

Ahora ya si que me despierto, miro el reloj y marca las 8:00 no es muy tarde. Hago la cama y cojo la ropa con la que iba a vestirme ese día y entro al baño. Llega Amber a la puerta, sonríe y me dice:

-La señora pide que bajes a desayunar. Venía a poner la lavadora, pero si tu te tienes que duchar (dice Amber un poco cohibida por verme por primera vez casi desnudo).

-La solución es ducharnos a la vez.

-¿Ducharnos?

-Si nosotros.

-¡No me voy a duchar ahora!

-Mientras pones la lavadora nos da tiempo de ducharnos juntos,¿O no quieres?

Claro que quería ducharse conmigo, pero la daba miedo por si mi tía se daba cuenta de que nos duchabamos juntos. Podría castigarla como ella quisiera, pero se decide, entra a ducharse conmigo y antes de nada ella enciende la lavadora. Coloco una toalla en el suelo para que no se cree un charco de agua en el baño. Cierro la puerta del baño yo ya estando desvestido, encuentro a Amber peleandose con su ropa hasta que la echo una mano y consigue desvestirse. Nos metemos juntos en la ducha doy el agua caliente, así es caliente, demasiado diría yo. Muevo la palanca hacia el medio, saliendo agua caliente, pero no tanto como la vez anterior. Nos movemos arcencandonos al otro para conseguir ponernos debajo de la ducha. Me abraza el pecho y yo la devuelvo el abrazo rodeandola con los brazos. Me agacho para besarla y al mismo tiempo ella se pone de puntillas. Nuestros labios se funden y nos quedamos para lo que fue una eternidad, ella se separa y coge el gel de baño y la esponja. Me enjabona todo el cuerpo, con mucho mimo, yo intento hacer lo mismo y ella se empieza a reir. La cojo y doy vueltas sobre mi mismo para quitarnos el jabón del cuerpo. Cuando todo el jabón acaba en el suelo de la ducha, Amber coge el shampoo para el pelo, me lo echa a mi y se lo echa a ella también. Ella me remueve el champoo con mucho mimo y la sonrío, nos aclaramos también el champú. La doy repetidas veces besos en la boca y me quedo parado ahí mirándola, ella era el centro de mi vida actual. Querría que lo fuera para siempre, esto esta interrumpido, como no, por los chillidos de mi odiosa tía.

-Te dije que era mala idea el ducharnos juntos, a la señora la diré que me acabo de duchar. Tu haz como si fueras a ducharte ahora.

Nos separamos, ella baja a atender a mi tía y yo voy a mi habitación sigilosamente y voy en dirección al baño con pasos exagerados que provocan ruidos en los tablones de madera del suelo. Y doy el agua para que mi tía se crea que me estoy duchando, aunque no me vaya a duchar. Tardo un rato de salir del baño, para que sea creíble, me visto, me dirijo a las escaleras mientras me mejora quedo parado al principio de las mismas y escucho gritos de mi tía diciendo:

- ¿Que todavía no tienes preparado el desayuno?

- No señora, me acabo de duchar porque aún no era la hora de desayunar.

-¡Yo desayunaré cuando me plazca!

Después de decir estas palabras la da un bofetón. En ese momento me encuentro bajando las escaleras y me acerco a la cocina donde esta ella.

-¿Que hay que prepararla para el desayuno? (la preguntó).

-Una taza de cafe con leche templada, una rebanada de pan con mantequilla y mermelada de frambuesa, una manzana pelada y troceada en trozitos cuadrados.

Me dispongo a hacerlo, pero ella me coge de la mano y me hace un gesto de  resignación.

- Lo debo de hacer yo, ve a la mesa y en nada tengo tu desayuno preparado también.

- El mío puede esperar.

Me marcho a la mesa y mi tía espeta:

- ¿Ya te has encariñado de ella?

-A ti no te importa.

Mi tía me esta mirando con ojos llenos de ira y me levanto y suelto:

- Amber traeme el desayuno a mi habitación, gracias.

-¿A tu habitación? Amber, ni se te ocurra.

Ya no escucho ninguno ruido, me extraña que no este gritando como acostumbra, así que Amber habrá servido el desyuno sin incidentes a mi tía.

Amber golpea en la puerta de mi habitación y me levanto rápido y la ayudo a pasar con el desayuno.Vislumbro unas miradas cómplices y una sonrisa de oreja a oreja. Deja el desayuno en el escritorio, lleno de humo, le dejo el cigarrillo, le da unas caladas y dice:

- La señora me ha dejado "servirte", al fin y al cabo fue para lo que me contrató. Por cierto el pájaro deberá estar recuperado ya.

- Ya lo soltaremos de la jaula.

-¿Puedo coger un cigarrillo? (dice mirando el paquete de tabaco que tengo).

-Si, claro ten cuidado, cuando lo fumes, no te ahoges( termina diciendo con una sonrisa).

Coge el cigarro y acabo poniendome detrás de ella y empiezo a besarla el cuello. La desato el uniforme, la quito la camisa, la desato el sujetador, la beso el cuello y cuando me dirijo hacia abajo ella me dice:

- Creo que no es momento, debería de estar preparando la comida.

- ¿No puede esperar?

- No, no puede esperar.

- ¿Y esto sí?

- ¿Prefieres tener a tu tía malhumorada para todo el día?

-No pero...

Después esto ella se abrocha el sujetador y dice:

- Subeme la cremallera de la camisa, por favor.

Llaman a la puerta, Amber me mira con una expresión de pánico y la subo la cremallera lo más rápido que puedo. Se apresura llena de nerviosismo al balcón, la agarro de la muñeca y la digo al oído susurrando :

- No hemos hecho nada malo, no te escapes por el balcón, dirigete a la puerta con la bandeja sin el desayuno.

Hace lo que la digo y...