Estoy besando a Amber como si nunca lo hubiera hecho y nos separamos de manera lenta ambos sonriendo. Decido marcharme, me fijo en su mirada antes de irme y denota tristeza. Lo que me deja un poco descolocado, llego a mi habitación, me tumbo en la cama durante unas dos horas y aparece Amber para darme el aviso de que bajara a comer. Ya en la planta baja en la mesa veo a mi tía sonriente, desconozco el motivo, pero eso me asusta en parte, miro aterrado la puerta de la cocina temiendo por el estado de Amber. Hasta que veo que sale, como de costumbre hacia la mesa, la sonrió, pero ella no me devuelve la sonrisa. Mi tía perpleja dice con un tono irónico:
-La quieres mucho, no?
-¿A qué viene eso ahora? Claro que la quiero.
-¿No te acuerdas de lo que pasó anoche?¿Ni esta mañana?
Ahora que mi tía lo comenta solo recuerdo de ayer cuando me bese con Amber y ese mismo recuerdo esta mañana. Lo demás ha desaparecido, recordando el tono altivo de mi tía la pregunto:
-¿Acaso tu te acuerdas?
- Perfectamente, nunca olvidaré ese momento en mi vida,-mientras Amber esta sirviendo la comida la coge de la cara-, cuando azotaste a esta rata.
Amber se faza de la mano de mi tía y va a la cocina a toda prisa. Yo estoy descolocado y mi cuerpo se levanta solo de la mesa. El cuerpo no me responde, cojo el cuchillo para el chuletón y chillo a Amber la que corre despavorida saliendo de la casa. Oigo unas carcajadas provenientes de mi tía, pero mi cuerpo solo sigue a Amber lo más rápido que puede. Y una parte de mi ser esta angustiada por pensar que la pasara a Amber si mi cuerpo no me obedece. Nos adentramos en el bosque, lo que hace más torpe a Amber a la hora de correr, lo que da ventaja a la parte de mi, que quiere acabar con ella. Amber no mira nunca hacia atrás, aunque su tensión y nervios denotan en su carrera un poco de inestabilidad. Cuando parece que la he alcanzado, desaparece dejando todo en silencio. Mi cuerpo se para e intenta escuchar lo que hay a su alrededor para encontrar a su presa. Mi cuerpo está aturdido, sea lo que sea que ha hecho espero que eso la mantenga a salvo de mi. Mi cuerpo ahora me obedece a regañadientes, se da la vuelta y empieza a andar despacio de vuelta a la casa. Dados dos pasos mi cuerpo se para y vuelve donde había estado hace escasos minutos. Observo y escucho la naturaleza, está silenciosa, pero se escucha no muy lejana una respiración. En ese momento Amber aparece a lo lejos del bosque corriendo y mi cuerpo se vuelve a poner en marcha detrás de la joven. Mi cuerpo no llega a alcanzar a la muchacha y corre más y más deprisa. Amber tropieza con una piedra y se desploma fuera del bosque. Mi cuerpo llega en pocos segundos hasta su situación, me apoderó por un instante de mi cuerpo, me arrodilló y me clavo el cuchillo en la pierna para detenerme, para no hacer daño a la persona a la que amo. El agobio se transforma en dolor y grito ya vuelto en mi. Me saco el cuchillo de la pierna y de repente Amber se eleva del suelo, abre los ojos, los que se encuentran llenos de luz. Me envuelve un polvo que cura mi herida al instante, me quedo boquiabierto hasta que recuerdo cuando yo cree el escudo en el bosque. Me sorprende bastante, su cuerpo desciende al suelo para quedarse de la misma manera en la que estaba hace un momento. En ese momento mi respiración está agitada y se empieza a calmar con el tiempo. No pienso en nada, recojo a Amber del suelo y me dirijo a la casa. Entro a la casa en calma y subo con Amber a su habitación, mi tía me sorprende al no articular ni una palabra, por lo que cree que Amber está muerta. Cuando la dejó en su cama, me asusta el hecho de que siga inconsciente, la beso en la mejilla y me derrumbó. Soy un monstruo como he podido intentar matar a la mujer que más amo. La persecución en el bosque se me ha quedado grabada a fuego, intentaré que eso no vuelva a pasar. Pero es increíblemente extraño que no pueda controlar mi cuerpo. ¿Y si no soy capaz la próxima vez? ¿Y si la acabo matando? ¿Y si...? Decido que esta será la última vez. Tengo que alejarla de mi, no quiero hacerla daño, sigue dormida.
Me hago la cena, unos sandwiches con ensaladilla rusa y los devoro. Subí a mi habitación dándole vueltas a lo de esta tarde, es una opcion bastante complicada, pero si Amber ya sufría con mi tía, lo que faltaba era que tuviera que aguantar mis persecuciones por el bosque con cuchillo en mano, decidido a acabar con su vida. Finalmente decido dejarla en el mercado, no es el sitio más seguro de la faz de la tierra, pero más segura que entre estas cuatro paredes va a estar. Espero a que mi tía se quede dormida para ponerme en acción, salgo de mi habitación, cierro la puerta, ando intentando no hacer ruido hacia la habitación de Amber, la cojo entre mis brazos, cierro la puerta de su habitación y empiezo a bajar por el oscuro bosque casi en silencio (menos por los grillos). Tardo unos 20 minutos en llegar al mercado, justo en la entrada dejó tumbada en el suelo a Amber y me escabullo corriendo, siento que mi cuerpo no me va a obedecer dentro de unos minutos. Sin pensar en lo que le podría pasar a Amber inconsciente en el mercado corro como si no hubiera un mañana. Así no podré ir a buscar a Amber si mi cuerpo está exhausto. Llego al bosque que hay pasando por casa, cuanto más lejos mejor, sigo corriendo y corriendo y corriendo. Hasta que me desplomo en el suelo.
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EL MISTERIO (Editando)
RandomEs una historia de un chico entre dos mundos, existe una mezcla del romance, con la fantasía y el realismo. Si lo leen por favor me gustaría que comentarán dando su opinión, también les pediría que si lo leen lo compartieran para su más gente pudier...