Obsesión || L.s || TERMINADA

• CAPÍTULO 43: ¿Despedida? •

Louis no sabía porque pero sentía que algo estaba pasando con su mamá y con Harry, ambos en algunas ocasiones actuaban de una manera muy extraña, muchas veces se repetía que quizás solamente eran paranoias suyas. Que seguro eran sus nervios por saber que el día de la boda cada vez estaba más cerca. Porque si, ya tenían fecha para su boda.

Un sábado por la noche hablaron de este tema él y Harry, ambos con tanta emoción e ilusión empezaron a dar sus puntos de vista e ideas que tenían para ese gran día y como siempre e igual que todo pudieron ponerse de acuerdo, escogiendo diferentes ideas del otro para cada cosa. Como su mente lo imaginaba todo realmente lucía demasiado hermoso y perfecto. Esperaban que para ese entonces así fuera, no querían que por ningún motivo las cosas terminarán en malas circunstancias.

Sin embargo ese mismo día aunque Harry estaba tan feliz y emocionado, había algo en él  que no lo dejaba estarlo del todo, varias veces Louis le preguntaba que si todo estaba bien o que si le estaba pareciendo muy precipitado que podrían posponer la boda para otra fecha, pero Harry le respondía que no, que lo disculpara por estar tan distraído y que no volvería a pasar.

El problema es que si volvió a pasar y no solamente en esta ocasión sino en muchas otras más, a veces Louis pensaba que quizás Harry se estaba arrepintiendo de casarse, que tal vez ya no lo amaba como lo hacia y que a lo mejor estaba saliendo con alguien más. Cuando se atrevió a decírselo, Harry lo abrazo con mucha fuerza mientras lloraba, repitiéndole una y otra vez que jamás volviera a pensar algo así, que lo amaba demasiado cada vez más y que nunca se arrepentiría de haberle pedido que se pasará con él, pero no podía decirle lo que estaba sucediendo, y no era porque no le tuviera confianza porque claro que confiaba en él, sólo que no lo hacia por su bien.

Louis al ver lo mal que se puso, sintió un enorme miedo, ¿Qué era eso que no podía decirle?, quiso llorar pero no lo hizo, en cambio abrazó a Harry fuertemente, dejando varios besos en su cuello mientras acariciaba su espalda para tranquilizarlo, después de ese día jamás volvió a preguntarle nada sobre eso que tanto lo atormentaba.

Y Harry luchó contra ese miedo que tenía a perder todo su mundo, tenía que ser menos obvio, estaba exponiendo mucho a Louis, por lo que cambió su actitud, muchas veces hacia su mayor esfuerzo por fingir que estaba bien o feliz, se sentía aliviado de que Niall y Liam supieran de esto, porque ellos en esos momentos eran de mucha ayuda cuando sentía que no podía seguir fingiendo que todo estaba bien.

Con Jay las cosas eran algo similares que con Harry, en excepción de algunas cosas.

Aunque Anne y Jay hicieran de todo por no hacer obvia la situación respecto a lo que sucedía, no podían ocultarle a Louis cosas que él desde pequeño conocía de su madre, como por ejemplo que ella no podía dejar pasar un día sin estar en su jardín plantando nuevas flores o regando otras, ella amaba demasiado la naturaleza, era por eso que cuando Louis, logró cumplir su sueño gracias a ella, (de ser un reconocido futbolista), al empezar a ganar bastante dinero por sus partidos y un poco extra por los goles que anotaba, decidió regalarle una casa, (en la cuál actualmente vivían), desde el momento en que la vio supo que debía ser para ella, pues esta contaba con un gran y hermoso jardín.
Cuando la llevó a conocerla y para que empezarán a instalar sus cosas, Jay no podía dejar de sonreír y llorar de felicidad, estaba tan agradecida por tener un hijo como Louis.

Desde ese día y en adelante ella no salía del jardín, a veces pasaba la mayor parte del tiempo ahí, por lo que ahora que no lo hacía para Louis representaba algo difícil de ignorar, muchas veces el mismo se dedicaba a regar y plantar nuevas flores, para que el jardín jamás dejará de lucir como a Jay tanto le gustaba.

También algo que no pasaba desapercibido por él, era que ya no cocinaba con frecuencia, ya no hacia esos deliciosos postres para consentirlo y no era algo que ella debiera hacer por obligación, sino que ella siempre lo hacia porque amaba la cocina, amaba preparar nuevos platillos y consentir a Louis. Siempre cuando cocinaba prendía la radio y ponía su estación favorita para cantar y al mismo tiempo crear esos deliciosos platillos que a Louis tanto le gustaban.