Obsesión || L.s || TERMINADA

• CAPÍTULO 47: Con amor, Mamá •

Todo había pasado tan rápido sin que ninguno pudiera haber hecho algo para poder cambiar ese cruel destino.

Aquel disparo que se había escuchado fue el de un policía, toda la casa había sido cubierta por policías. Harry les había llamado antes de ir hacia aquella casa, había esperado que hubieran llegado antes pero no lo hicieron hasta ahora.

Uno de ellos había entrado hasta el sótano y al ver lo que estaba sucediendo no dudo si quiera por un momento en disparar a aquel hombre que amenazantemente apuntaba con un arma a una mujer, esa bala sin duda alguna iba a dar justo en su corazón. Sin embargo nadie tenía esperado que Fionn hiciera algo como esto, reaccionó tan rápido y de una manera tan impresionante que cuando escuchó aquel disparo y sintió que aquella bala iba directamente hacia él, utilizó a Jay como un escudo. No lo dudo, ni mucho menos lo pensó simplemente lo hizo.

Al darse cuenta de lo que había hecho asustado la dejó caer en el suelo, mientras que Louis corrió hasta ella para evitar que su cabeza se golpeara contra el suelo. Harry por otro lado se quedó completamente en shock, todo esto tenía que ser una maldita pesadilla, se rehusaba a creer que de verdad esa bala había impactado contra Jay, pero en el momento en que escucho aquellos desgarradores y desconsolantes sollozos por parte de su dulce criatura, supo que esa era la jodida realidad. Se acercó hasta él para tomarlo entre sus brazos, para poder tranquilizarlo, calmarlo y arrancarle ese dolor, pero no podía, era imposible. El dolor que Louis ahora sentía iba a tardar demasiado en sanar, sin poder contenerse también comenzó a llorar de impotencia, de enojo, de dolor. Los paramédicos no tardaron en llegar y rápidamente subieron a Jay en una camilla para comenzar a darle los primeros auxilios para hacer que resistiera un poco más en lo que llegaban al hospital, pero todo lo que hacían era completamente en vano. Ella simplemente no respondía, los paramédicos con una evidente tristeza reflejándose en su cara se limitaron a hablar y sólo negaron lentamente con la cabeza.

Louis gritó y lloró tan fuerte que para todos aquellos que presenciaban la manera en que el dolor lo estaba destruyendo por dentro sin piedad alguna. Sentían como sus corazones se rompían en pedazos. Louis comenzó a forcejear con Harry cuando este le impidió ir con Jay para evitar que se la llevaran.

- ¡Harry suéltame, maldita sea! -lloraba con desesperación- ¡Mi mamá no está muerta, ella sólo está durmiendo! ¡No puedes dejar que se la lleven! ¡Suéltame!

Louis en ese momento no estaba pensando con claridad por lo que sin importarle nada más, le dio un fuerte golpe a Harry en la mejilla haciendo que este lo soltara ante la sorpresa, Louis ni siquiera se detuvo a pensar lo que hizo, el tenía sólo un propósito en su mente y ese era rescatar a su mamá de aquellos hombres malos que se la querían arrebatar.

Cuando llegó hasta ellos los aventó bruscamente contra el suelo, sin perder el tiempo se acercó a Jay para abrazarla con fuerza diciéndole en el oído una y otra vez:

- ¡Mamá por favor, por favor no me dejes! ¡No estoy listo, no ahora! ¡Te necesito conmigo, por favor despierta! -la sacudia, besaba sus mejillas, le lloraba y gritaba, pero por más que hacia ella no le respondía, no hacia nada.

Y eso sólo hacia que cada segundo que pasaba para Louis fuera un completo infierno.

Louis dirigió su mirada hacia las escaleras del sótano cuando escucho mucho ruido, dos policías venían forcejeando con brusquedad y algo de trabajo contra Fionn ya que este se rehusaba a ser encarcelado, tenía el descaro de gritarles que no cometió ningún crimen, que todo había sido un accidente y que el único culpable de todo esto era Louis.

Tanto Fionn y Louis se miraron fijamente por lo que fueron varios segundos, Louis sentía su sangre hervir al ver la cínica sonrisa que Fionn tenía en su rostro, al ver a través de sus ojos como estaba disfrutando de su dolor. Recosto a Jay con cuidado susurrándole un "Descuida mamá, ya vuelvo no tengas miedo". Apretó sus puños con tanta fuerza, fuerza de la cuál ni siquiera sabía de dónde sacaba porque en esos momentos se sentía totalmente destruido, los policías detuvieron sus pasos al ver que Louis venía hacía ellos y cuando este estaba a punto de golpear a Fionn, Harry lo detuvo poniéndose frente a él.