Obsesión || L.s || TERMINADA

• CAPÍTULO 46: Se acabó •

Harry al llegar a aquella casa abandonada sintió una gran angustia al ver que afuera de ella no había ningún guardia como le había dicho Fionn todo estaba completamente oscuro y en silencio. Se rehusaba a pensar que quizás había llegado demasiado tarde o que Fionn sólo lo había hecho caer en otra de sus trampas. A paso lento se fue dirigiendo hacia aquella casa tenía un aspecto demasiado tétrico y la oscuridad de la noche hacia que luciera aún más así. Además de que desprendía un olor demasiado pestilente.
Al estar en la puerta se tomó algunos segundos antes de tocar, tenía miedo de que algo terriblemente malo estuviera esperándolo ahí dentro, pero debía dejar su miedo en un segundo término pues la vida de Louis y Jay dependían completamente de él. Dio tres golpes esperando con los nervios a flor de piel a que le abrieran pero no lo hacían. Su impaciencia le hizo abrir la puerta arriesgándose a cualquier cosa, al entrar se dio cuenta que no había absolutamente nadie, todo estaba completamente oscuro, hasta que logro ver una luz que salía de entre la puerta que daba hacia el sotano, se acercó a ella lentamente tratando de hacer el menor ruido posible, pero el lugar estaba tan viejo y descuidado que la madera con la que estaba hecho el suelo de aquella casa, a cada paso quedaba rechinaba. Harry cerraba sus ojos con fuerza cada vez que sonaba ese molesto rechinido, su corazón latia con tanta fuerza que comenzaba a creer que además de ese rechinido también se podía escuchar con claridad los fuertes latidos de su corazón. Al estar frente a la puerta se asomó por la pequeña abertura que tenía para poder ver si había alguien ahí, pero al ser tan poco el espacio no lograba ver muy bien.

Así que abrió la puerta con la mayor lentitud posible y cuando dejó el espacio adecuado para que pudiera pasar sin problemas comenzó a bajar las escaleras, su corazón empezó a latir con más fuerza al ver que Fionn no estaba y que Louis y Jay estaban amarrados y acostados en dos sucios y desgastados colchones.

Bajó las escaleras con rapidez pues tenía que aprovechar esa pequeña oportunidad para salir de ese asqueroso y espantoso lugar cuánto antes. Louis al escuchar el fuerte rechinido que hacían las escaleras se asustó porque sabía que sería Fionn, pero al ver que se trataba de Harry comenzó a llorar desconsoladamente.

No podía creer que en verdad su jirafita mutante estuviera ahí con él. En las circunstancias que se encontraba le parecía tan irreal que si fuera un sueño no quería despertar jamás de el.

Harry al verlo en ese estado corrió hacia él para abrazarlo y besar sus labios varias veces. Lo había extrañado demasiado, había extrañado tanto esa calidez que le transmitía cada vez que estaba cerca de él, había extrañado su olor. Louis al estar amarrado por aquellas cuerdas se acercaba a Harry lo más que podía, lo había necesitado tanto que por un momento olvidó todo lo que estaba pasando. Y es que Harry tenía esa facilidad de hacerlo sentir bien aunque las cosas estuvieran mal.

Después de estar así por algunos largos minutos Louis se removió para pedirle a Harry que por favor viera como estaba Jay pues seguía sin reaccionar y tenía miedo de que algo realmente malo le haya sucedido. Harry no logró entender ninguna de sus palabras por la cuerda que tenía amarrada en la boca, pero no le fue difícil adivinar que era lo que le estaba pidiendo, así que antes de dirigirse hacia Jay, le quitó a Louis todas las cuerdas con las que había sido amarrado.

Soltó un fuerte gruñido al ver las marcas que aquellas cuerdas habían dejado en su cuerpo, deseaba tanto tener a Fionn frente a él para darle un buena golpiza y hacerlo pagar todo el daño que les estaba causando.

- Ha-harry p-por favor ayuda primero a mi mamá.

- Ya voy pequeño, tranquilo.

Al llegar a Jay se dio cuenta que estaba completamente inconsciente algo que lo hizo preocuparse demasiado y rápidamente le desato todas las cuerdas.