Cap.11

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Su rostro impenetrable tapado con su fedora negro de cinta naranja fue lo primero que le hizo detenerse en seco, lo segundo su su aura poderosa e intimidante, luego su figura en traje negro sin arrugas. Lo que le sacó de su asombro fue la risa sádica que soltó el hombro, tomo su pistola y le apuntó.

  — Tsunayoshi.— Dijo su voz hermosamente peligrosa, metió su mano izquierda en su pantalón. 

Todos los miembros de la Port Mafia se tensaron, esta sed de sangre es poderosa y no tienen que subestimar al hombre. Lo reconocen ¿Como no hacerlo? Tienen al mejor maldito hitman del mundo en el comedor mientras almuerzan. No ayuda que parezca conocer a Tsuna, quien casi se atraganta con su bebida.

  — ¡Reborn! — Grito sonriendo brillante, se levantó de su asiento e ignorando el arma le abrazo.  

¿Que? Se preguntaron todos. 

El sicario suspiro levantando un poco su sombrero y golpeando un poco el arma en la cabeza del castaño. Este solo rió, como si eso fuera normal. Dazai tiene la suerte de estar en una misión en este momento, no tiene que cruzarse con su considerado 'suegro'. 

  — Oh, Reborn-san.— Saludo Mori levantándose de su silla, es una rara ocasión donde están todos para almorzar, bueno, no todos. La única  no interesada en el invitado inesperado es Elise, quien está dibujando.  — Lo sirvientes no me avisaron de su llegada. 

  — No los deje, están en la entrada inconscientes.— Explico simple el hitman, sonriendo, los guardias y sirvientes no son nada para él.  — Para ser jefe de la Port Mafia permites una seguridad muy débil. 

Mori solo sonrió. 

  — ¿Por qué viniste Reborn? — Pregunto Tsuna separándose e inclinando su cabeza,  pueden verse flores a su alrededor. — Se supone que el tratado no lo permite.

  — Asuntos.— Dijo guardando su arma, León salto del sombrero al pelo de Tsuna,este le acaricio.  

  — Vayamos a mi oficina, Reborn-san, Tsunayoshi-kun.— Dijo Mori en la entrada, Elise está a su lado sonriendo.  

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Reborn se sentó en el sillón individual, cruzado de piernas y una taza de café en su mano. Su postura es elegante, tiene un toque que lo vuelve un hombre sin igual. Peligroso, atrayente y perfecto, él cual tuvo muchas amantes, cabe decir que ninguna tuvo una segunda noche en su cama. 

  — Nono se encuentra intrigado.— Dijo de forma casual.— ¿Por qué querría Mori, jefe de la Port Mafia, alargar los años de "salto de fe"? 

  — ¿"Salto de fe"? — Se preguntó Tsuna, hasta que recordó la conversación que tuvo con su abuelo el día de su boda.— Los años que Vongola no me puede ver.  

  — No solo alargarlo, sino que también por 4 años.—  Siguió el hitman moviendo su tasa en círculos, su café se movió a la par. Tsuna sintió su mundo caer ¿Alargar su tiempo por 4 años más? ¿No ver a su familia por tantos años? Un solo año, y contando, fue insoportable. 

  — En el futuro habrán problemas, tener a Vongola dando vueltas por acá será problemático.— Contesto Mori haciendo un movimiento de mano, restando importancia al asunto.— No queremos cruzar esa línea, ¿No, Tsunayoshi-kun? 

Bandaged eyes.|| Khr/Bsd ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora