25. "En compañía de la falsedad"

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¡Nuevamente les agradezco su gran apoyo y comentarios a todos!
Hoy especialmente a meanahis, ashleysolis, an-vhz, kiaber y a hun12han. ¡Gracias por todo!♡











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LuHan se levantó despacio del suelo.

Sólo quedaban un par de llamas pequeñas en la chimenea y en la habitación empezaba a hacer frío. Cravat, que había estado acurrucado al lado de LuHan, levantó la cabeza e hizo un ruidito.

“Shh-” LuHan le echó la manta por encima al ratón. “Toma, duerme aquí. Pero por favor no hagas ruido, ¿vale?”

LuHan se había acostumbrado a esa habitación hasta el punto de que podía andar por ella sin ninguna luz. Caminó con firmeza hacia la puerta. Quitó el pestillo, y antes de abrirla, volvió a girarse. Escuchó con atención. No se oía nada.

Parecía que el dolor no había impedido a SeHun dormir aquella noche. «Supongo que una herida tan pequeña como esa no es suficiente para mantenerlo despierto.»

Había muchas cosas que aún necesitaba decirle a SeHun. La alegría de haberle conocido, la gratitud por todo lo que había hecho por él, y el profundo respeto que le tenía. LuHan no había podido decirle todo eso.

«"Me alegro de haberte conocido." Eso es lo único que pude decirle.»

LuHan inhaló profundamente, sólo una vez, antes de abrir la puerta sin hacer ruido.

























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La luz se encendió, señalando que había una llamada de una extensión directa al Ayuntamiento. El hombre levantó la cara de los documentos que había estado leyendo y chascó la lengua levemente con irritación. El documento, impreso décadas atrás en papel, era muy intrigante, y tenía ganas de leer más. Pero la luz roja indicaba que era una emergencia. El hombre volvió a chascar la lengua y guardo el documento en una carpeta.

Cuando pulsó el interruptor, apareció la cara de un hombre que le era familiar. Era un hombre al que llamaban Fennec.

Fennec, el zorro del desierto. ¿Quién había sido el que había empezado a llamarle así?

“¿Qué pasa, Fennec?”

“Tenemos una emergencia. Han llevado dos especímenes de muestra al Hospital Central.”

“¿Y qué pasa?”

“Ninguno de los dos está registrado como muestra representativa en la base de datos.”

“¿Qué?”

“Son diferentes de las muestras que nos has pedido. Están pasando cosas que están fuera de nuestro control.”

“Quizás es muy pronto para concluir que son muestras. ¿No puede haber otra causa?”

Fennec negó con la cabeza. La imagen de la pantalla cambió. Se empezó a reproducir la información personal de los dos cuerpos.

Nombre, edad, dirección, ocupación, historial médico, medidas físicas, número de ciudadano…

Un hombre y una mujer. Dos cuerpos. Ambos tenían la cara contraída de dolor y habían envejecido y se habían marchitado. Si no fuese por la expresión de sus rostros, la causa de la muerte habría podido ser perfectamente la edad. Pero, según los documentos, uno estaba en sus veinte, el otro en sus treinta.

HACIA LAS ESTRELLAS⭐  [HunHan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora