Cap 13.

265 24 0
                                    

Narra Max:

Me quede sorprendido al oír lo que había dicho, pero también confuso, todo esto inicio por una apuesta, ¿que pasa si Jess se entera? No lo va a entender, creerá que todo lo que estoy diciendo es por una tonta apuesta, algo que no es así. De verdad me gusta Jess, acepto que en el inicio de la apuesta solo pensaba en que iba a caer y en que Jack limpiaría mi habitación por un mes, pero poco a poco las cosas fueron cambiando. Esa chica era diferente a las otras con las que había estado, y algo que adoro de ella es que se pone nerviosa cuando estamos muy cerca o cuando le digo un halago, estoy seguro de que esto va a funcionar, y no hablo de La apuesta.

—Max... ¿Te puedo preguntar algo?—dice Jess separándose de mí.

—Claro princesa—digo riendo.

—Esto que está pasando entre nosotros... ¿Es enserio? No es por desconfiar u ofender sino que...—la interrumpo evitando que pueda terminar la frase.

—¿Que quieres decir?—digo serio.

—Si... ¿De verdad sientes lo mismo que yo?, eres un chico que le gusta acostarse con todas, ir de fiesta en fiesta, ser popular, y tener una relación nunca ha sido lo tuyo, o eso dicen—dice bajando la cabeza.

—A ver. Sí, no te niego que me encantan las fiestas, eso de acostarse con cada mujer que veo, pero esto es muy diferente Jess, es enserio, tu tienes una sencillez que hace que me enamore, y otras cosas más. Solo dejemos que esto funcione ¿sí?—digo levantándole la barbilla para que pueda verme.

—Esta bien Max—dice riendo.

No dejaba de pensar en que iba a hacer con eso de decirle que había sido una apuesta.

Después de hablar en la playa, nos entramos en el agua y pasamos momentos fantásticos, esta chica me hace sentir increíble. Salimos, y la llevé a su casa, ya que estaba tarde y no queríamos volver a la fiesta.

—Bueno, Adiós—dice Jess abriendo la puerta del auto.

—Adiós Jess.

No la deje salir hasta halarla  por el brazo y darle un beso, ya me estaba empezando a gustar esto.

Era sábado y como siempre Jack iba a venir a jugar videojuegos, era una costumbre que viniera a mi casa los fines de semana, jugábamos, salíamos y hasta invitabamos chicas.

—¡Maxx, y no Steaal!—dice Jack resaltando la "X".

—Jackk, y no Miller—digo siguiéndole la corriente.

—Oye hermano, ¿y la apuesta?—dice mientras desenreda los controles de un Xbox.

—De eso te quería hablar. Pues ayer en la fiesta, me di cuenta de que no quiero seguir con la apuesta, esta chica me vuelve loco y no es solo para una "aventura" , sino que me gusta, cada vez que me lo preguntaba solo me hacia creer que no.

—Mierda, Max Green me esta diciendo que le gusta una chica y no para la cama—dice sorprendido.

—Algo así Jack, pero no sé que hacer ahora, no quiero herirla diciéndole que fue por una apuesta.

—Iniciaste a través de una apuesta pero lo que sientes ahora no lo es ¿no?

—Si, pero sabes que no va a creer, y mi reputación no me ayuda, ¿entiendes? Pero no quiero ocultárselo, y peor sería que se entere por otra persona.

—Lo mejor sería que hables con ella, si no lo entiende, dale tiempo y creeme que lo hará.

—Es verdad. Gracias hermano—digo dándole un golpe.

—No hice nada—dice riendo.

—Hiciste mucho, me hiciste la mejor propuesta de mi vida, que lograra salir con Jessica Smith, por ti acabé Enamorándome de ella idiota—digo riendo.

—Cierto, cierto. Pero solo una cosa, no te dejes llevar mucho, sí, se que se quieren y todo eso, pero hay personas que solo quieren lo malo para otros, y tú eres un chico bastante deseado, espero que eso no dañe esta bonita relación que acaba de empezar, y que estés seguro de lo que sientes—dice mirándome fijamente.

—Oye y otra cosa—digo poniéndome serio. La fiesta de ayer era de Tyler, un chico de la prepa, el cual trabaja para Gary, estaba hablando de mí con otros más en el baño, de verdad siento que este tipo no va a descansar hasta matarme Jack.

—¡Maldita sea! ¿Es enserio? Diablos, diablos—dice sorprendido y enojado.

—Si. Ahora que sé que hasta en la prepa hay personas trabajando para este asco de persona, debo de tener cuidado en quien confío —digo rascándome la cabeza por desesperación.

—No te preocupes amigo, saldrás de esto, ya verás, y yo te ayudaré.

—Gracias hermano—digo dándole pequeños golpes en la espalda.

Enamorando a una nerd.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora