Enamorando a una nerd.

Cap 32.

           

Narra Max:

Al oír eso me di cuenta que me había escuchado hablando con Rebecca, lo menos que quería era lastimarla, pero a ver, ya terminamos, no veo por qué se molestó.

Fui detrás de ella y la detuve.

−Me escuchaste hablando con Rebecca, ¿cierto?

−Diablos Max, por una vez en tu vida has algo bien y déjame sola−responde molesta.

−No te entiendo Jessica, ya no estamos juntos, ni lo vamos a estar, pero no quiere decir que no podemos ser amigos.

−Hablas como si quisiera volver contigo−dice cruzándose de brazos.

−Pues es lo que parece, en fin, ¿estás de acuerdo?

−No, ahórrate tus sugerencias y por favor, no me hables−dice mientras se va.

Si es lo que quiere, se lo daré.

Narra Jessica:

Iba caminando por el restaurante y alcance a ver a Ray, de inmediato me le abalance con un fuerte abrazo, siento como él se sorprende, pero luego me abraza.

−Vamos a allí−dice tomándome de la mano.

No me da tiempo a contesta, y me lleva a un pequeño y lindo lugar del hotel, pero apartado de todos.

− ¿Qué hacemos aquí? –pregunto mirando todo.

−Pues, es un muy lindo lugar y quise que lo vieras−dice tomando mi mano.

−Gracias otra vez, Ray−digo sin dejar de mirarlo.

−No hay de que−dice acariciando mi mejilla.

A lo que yo sonrío.

−Oye... Jessica, sé que es muy rápido y todo, pero quiero hacerte una pregunta.

−Sí, claro.

− ¿Querrías salir conmigo? –pregunta volviendo a tomar  mi mano.

Es raro escuchar que tu casi director te haga esta pregunta, pero en estos últimos días, él se ha convertido en algo más que un subdirector para mí.

− ¿Es legal? –pregunto riendo.

−Eso lo decides tu muñeca−dice acercándose.

Sus labios chocan con los míos, es una sensación algo diferente, ya saben, estar besándote con tu subdirector, alguien más adulto y maduro, es raro.

Narra Max:

Estaba buscando a Jessica por todos lados ya que mi llave se me había quedado dentro de la habitación y necesitaba la suya para entrar. Fui al restaurante y pregunte si la habían visto, y lo que me dicen es que hay un lugar en el que podría estar, y me explican su ubicación.

Cuando llego, esta Jessica con Ray, otra vez. Quise evitarme problemas con este tipo y me regrese a la habitación, me senté en la puerta a esperarla.

−Max... ¡Max! –grita Jessica haciendo que despierte, ya que me había quedado dormido.

Cuando abro los ojos la veo a ella, pero luego veo a Ray a su lado y agarrando su mano, esto no puede estar pasando.

− ¿Por qué estas afuera? –pregunta Jessica riendo.

Yo no respondo y me levanto.

Ella abre la puerta y entro, pero me volteo y la veo besando a Ray, ¿Cómo diablos está haciendo esto?

− ¿Por qué Jessica? ¿Por qué con él? −pregunto al ver que él se marcha.

− ¿De qué me hablas? −pregunta mientras cierra la puerta.

−De Ray y de ti Jessica−respondo molesto.

− ¿Qué tiene de malo Max? –pregunta, pero esta vez mirándome a los ojos.

−Él es peligroso, no es alguien bueno para ti.

− ¿Ahora te has convertido en mi padre o qué? No me importa si te parece bueno o malo para mí, no es de tu incumbencia.

−Te estoy hablando en serio Jessica, es peligroso, no sabes nada de él.

−PELIGROSO. Que me podría hacer, ¿bajarme la nota? O ¿hacerme un reporte? Dime, tu que lo conoces tanto.

−No, Jessica no, podría hasta hacerte daño−digo preocupado.

−Esto es el colmo, mi ex me está diciendo que mi novio es malo, que me podría hacer daño, por Dios Max, madura ¿sí?

De inmediato la cargo por la cintura y la llevo a la cama, quedando encima de ella, y le agarro los puños evitando que se pueda parar.

− ¿Qué demonios haces Max? Déjame levantarme−dice tratando de levantarse.

Es divertido verla tratando de levantarse JAJAJA.

−Como seguía, de verdad te lo digo, es muy malo para ti Jessica.

− ¿Cómo diablos sabes de el? Y dame una razón para poder creerte Max Green−dice entre risas.

−Contactos, y si, hay una forma de que me creas.

− ¿Cuál idio...

La interrumpo antes de que pueda terminar de hablar y la beso. Ella (como siempre), sigue besándome.

Hacía tiempo que no la besaba, Jessica era increíble, a continuación me dejo llevar y comienzo a desabotonar su camisa.