Ordinary World. (Billie Joe Armstrong y Vos) [Completa]

Capítulo 4.

• Narra Billie ↓

Estaba esperando a los chicos en el bar, y porque no, a _____ también.

Fui hasta la barra a pedir una cerveza, para que la espera sea más corta. Cuándo llegué, reaccioné en que _____ no había llegado, por lo que la barra estaba cerrada.

Maldije por mis adentros, y empezé a preparar el escenario.

Habíamos arreglado con el dueño de The Gilman para tocar de viernes a domingos, todo el horario en el que el bar está abierto.

Sería cansador, pero no imposible. _____, y el resto del personal, trabajan en esos horarios.

Estaba terminando de enchufar mi micrófono, hasta que escuché la puerta abrirse. Levanté la cabeza, y era _____.

Tenía una musculosa negra ajustada, un short de jean gastado, y zapatillas negras. Creo que me quedé embobado con sus piernas, porque cuándo me miró, se empezó a tentar.

- Hola- dijo sonriente, mientras se acercaba a donde me encontraba.

- Hola- la saludé de la misma forma, mientras le daba un beso en el cachete.

- ¿Querés tomar algo?

- Dale

Fuimos a la barra, y cada uno tomo su puesto: ella atrás y yo adelante.

Caminó hacia la heladera, y saco una Quilmes fría. La destapó con arte de barman, y sirvió en dos vasos de vidrio.

- ¿Viste a los chicos?- Le pregunté, mientras tomaba un sorbo de cerveza. Tenían que haber llegado hace horas, para empezar con la prueba de sonido.

- Se fueron de casa y vinieron para acá. ¿No llegaron?

- N...- Iba a negar, pero el sonido de la puerta me interrumpió. Así es, en el momento justo, llegaron los chicos.

- Perdón Billie, -Se disculpó Mike, saludandome con un beso en el cachete- Pinchamos una rueda y no pudimos venir antes.

- Si, no sé cómo llegamos- Dijo Tré, también saludandome.

- Hola _____- dijo Mike, salundandola a ella.

- Hola- saludó Tré, repitiendo el acto de Mike.

_____ sacó dos vasos más, y los lleno con cerveza.

- Gracias- dijo Tré, agarrando uno de los vasos y llevandoselo a la boca.

- ¿Que hora es?- Preguntó Mike.

_____ señaló un reloj, que indicaba "21:47".

- ¿Que vamos a tocar?- Pregunté

- ¿Tenés una birome?- Preguntó Mike a _____.

- Si- dijo ella, dándole la birome.

Tré agarró una servilleta, y con la birome escribimos una lista de 10 temas.

Nos quedaban 10 minutos, por lo que empezamos con la esperada prueba de sonido.

Una vez que todo estaba listo, abrieron las puertas, para que manadas de adolescentes punks, se avalanchen sobre la barra. Pobre _____.

Después de empezar a emborracharse, corrieron hacia el escenarios. Pobres nosotros.

Estabamos atrás del escenario, esperando a que nos digan que ya podíamos salir.

Miré a el dueño del bar, que no dió la señal para que empecemos.

Arrancamos a tocar súper adrenaliticos. Amabamos esto. La gente se enloquecía: armaban pogos, gritaban, escupían... Auténticos punks.

A eso de las 3:30 de la madrugada, terminamos de tocar. Agarramos las cosas, y fuimos a la barra.

Estubimos con _____ quince minutos, y nos fuimos a nuestra casa. Supongo que después _____ se fue a la suya.

• Narra _____↓

Terminé de trabajar a las 4, como todos los santos sábados. Estaba agotada, había sido una jornada muy cansadora.

Esta era una de las pocas veces dónde me tenía que volver sola a mi casa.

Caminé hacia la parada de colectivo, esperé a que llegara, me subí, pagué, y después de unos minutos, estaba en la esquina de mi casa.

Entré tranquila, dejé las llaves y el abrigo por ahí, me acosté, y en unos 5 minutos, estaba roncando.

[...]

Me desperté por esa puta cortina que deja filtrar la luz de afuera. Di vueltas en la cama, y agarré mi celular. Miré la hora: 10:18 AM.

Mi jefe me había mandado un mensaje, me asusté. Abrí el chat e instantáneamente me relajé.

Me decía que no iba a trabajar. A veces hacia eso, más que nada los domingos.

Me levanté despacio, y fuí al baño. Hize lo que tenía que hacer, y me volví a meter en la cama. Al rato, estaba durmiendo nuevamente.

Eran las 2 de la tarde, cuándo el sonido de llamada de mi celular me despertó. Moví mi mano hacia la mesa de luz, y lo agarré. Miré la pantalla: Billie.

- Hola- saludé con voz ronca al celular.

- Hola- saludó el del otro lado, con voz energética.

- ¿De dónde sacaste mi número?

- Me lo pasó Mike. Escuchame, son las dos de la tarde y es un día de mierda. ¿Tenes planes?

Levanté la cabeza y miré la ventana. Era verdad. Había una tormenta de esas fuertes. Corte lluvia, granizo, trueno, relámpago, viento... Todo.

- Emm no, no. ¿Por?

- Por nada. ¿Estás en tu casa? ¿Puedo ir?

- Bueno dale. Te aviso que no me encuentro en un buen estado, así que no esperes encontrarme limpia.

- No pasa nada. En un toque estoy allá. Llevo helado.

Me desperezé, y lentamente me levante de la cama. Me puse las ojotas y me arreglé un poco el piyama.

Después de un rato, Billie llegó.

Abrí la puerta, nos saludamos, y lo dejé pasar. Estaba solo, pensé que vendría con Mike o Tré.

- ¿Todo bien?

- Si ¿Vos?

- También. ¿Vemos algo en Netflix?

- Dale.

Fuimos al sillón, y abrimos mi cuenta de Netflix. Mientras el elegía la película, yo estaba en la cocina agarrando las cucharas y el pote de helado.

- Encontré una.- me indico desde el living.

- Ahí voy- dije, mientras caminaba hacia el sillón.

Me senté a su lado, y puso play. Mientras transcurrían los primeros segundos de película, yo empezé a atacar el helado.

Nos ibamos pasando el pote. Me explico: Cada uno tenía una cuchara, y agarrabamos helado desde el pote en el que lo venden en las heladerías.

Después de habernos acabado completamente el helado, me acosté horizontalmente, de modo que pueda ver la película.

Después de un rato, Billie hizo lo mismo, pero atrás mío. En la mitad de la película, me abrazó.

Estabamos en una posición muy tierna, y esto le ganó a la película. A los cinco minutos de abrazados, me dormí.

Ordinary world

1028 palabras.