3.Mr. & Mrs. Lehner®

17. Entrevista

—Entonces ... — pregunta el alto señor de edad—. ¿Existe una rivalidad entre usted y la modelo Ebba Kloss?

—No veo el porqué.

—Sutil, sin embargo Axel Lehner sigue llevándose con ella según las fotografías tomadas hace algunas semanas atrás.

—Confió en Axel, mi esposo es la persona más fiel que he conocido. Él me contó sobre ese encuentro y claramente sabía de eso, no veo porqué alarmarse.

—Entonces... ¿lo que se habla de usted es real? ¿Cómo lo define?

—No tiene que evadir ese tema. Creo la gente necesita saber que si yo fuera por el dinero de mi esposo, él no estaría a mi lado nunca jamás. En un hogar las únicas personas que saben lo que pasa en él, son aquellas que lo conforman. Axel y yo estamos felicites y agradecidos con la vida por volver a unirnos, he comprendido que mientras la prensa siga diciendo tantas cosas sin sentido, los dos seremos mucho más fuertes porque lucharemos juntos.

—¿Es un sí a mi pregunta?

—Técnicamente es un "dejen de meterse en nuestra vida cuando no saben de ella"

Él me mira y muy educadamente sigo.

>>No vine aquí a hacer más polémica, simplemente vengo a decirles que en mi familia todo marcha perfectamente. Nadie tiene el derecho de juzgar nuestro pasado, sé que varias personas han hablado de mí (familiares cercanos), sin embargo yo no soy la que está tras las rejas. No dejaré que sigan hablando y quiero anunciar públicamente que he tomado la decisión de seguir este proceso en la corte, mi agencia me respalda y estoy segura que es la única manera de acabar con esto. Ser periodista no es escribir más allá de titulares exagerados, fueron cuatro duros años de estudios y estoy segura que vieron diferentes tipos de investigación en ello, felicito a quienes han hecho de su profesión una pasión y para quienes no, lo lamento mucho, los veré en tribunales.

Sonrió ante las cámaras y miro a mi verdugo.

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Lily sonríe mientras camino hacia ella.

—¿Es verdad?

—Hablé con Axel. Creemos que es lo mejor.

—Muy bien, debo decir que pateaste el trasero de ese sujeto.

—Bueno, hice lo que pude.

—Está bien, no creo y debas seguir gastando tu tiempo en personas como él. Me parece correcto que emprendas esto a lo legal.

—A mí también.

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—Hola bebita bella.

Saludo tiernamente con Luá, ella me mira con sus ojos oscuros y lleva su mano a la boca.

>>¿Cómo están?

—Extrañándote.

—Nos veremos la otra semana.

—Te extraño demasiado.

—Yo también.

—Vi la entrevista.

—¿Crees y estuvo bien?

—Dijiste lo correcto.

—Bueno, sí, creo que ya era hora.

—Lo es. También es cansado para nuestros conocidos.

—Tienes razón. Espero llegar pronto, ya quiero estar con mi familia.

—Te estaré esperando. Sabes que el febrero cumplimos ya un mes de casados.