9.¡Venecia, ahí voy!

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-Por favor siéntese-hace un gesto con la mano invitándome a sentarme frente a el- Muy bien....-y antes de que el pueda hablar yo comienzo a hablar.

-Señor Lombardi, perdón por  lo que sucedió en la cafetería, yo no sabia que mi amiga iba a tomar esa foto, en serio perdónenos, es solo que ella es muy impulsiva y...-el levanta su mano y yo instintivamente me callo.

-No tiene por que disculparse, de igual forma a mi amigo no le incomodo ese acto, ya esta acostumbrado. A demás de eso no era lo que quería hablar con usted-¿Ah no?-Como usted ya debe saber, al ser mi secretaria debe acompañarme a los viajes- asiento con mi cabeza, ya que eso yo ya lo sabia por mi antiguo trabajo, con ese viejo verde-Bueno, lo que le quería decirle es que mañana debo que ir a Italia por unos asuntos que debo que arreglar y usted debe acompañarme, le voy a dar el resto del día para que empaque y mañana a las 7:00 am, la pasaría recogiendo. ¿Claro?

-Si señor

-Puede retirarse-ya me estoy yendo cuando recuerdo que yo no tengo ni idea de como es el clima a donde vamos hacia que no se que tipo de ropa debo empacar.

-¿Señor Lombardi?

-Diga.

-¿Que tipo de ropa debo que llevar?...Ya sabe de invierno o verano.

-Lleve ropa algo abrigada que vamos a un lugar algo frío en esta época.-me dice con esa cara mala leche que ni se como me la soporto.¿me pregunto a que lugar iremos?-Iremos a Venecia-¿es que mi jefecito me lee la mente o que?

-Bueno ya me retiro, con su permiso-voy a la puerta y al salir cierro esta misma.

Voy a mi escritorio a recoger los papeles que tengo en este, al terminar me coloco un abrigo color beige, ya que esta comenzando a hacer frío, algo normal al ser ya mitad de septiembre. Cojo mi bolso y voy al elevador, presiono el botón y espero hasta que llega. Cando llega al primer voy a la entrada y pido un taxi, ya que Sophie hoy necesitaba el carro y pues como el carro es de ella..

***

¡¡Por fin en mi hermosa casita!! 

Voy hacia el sofá y me quito esas cosas del demonio que se dicen llamar tacones, para mi son mas un arma mortal, creada para torturar a las mujeres. Aunque si debo decir que con esas cosas, uno se ve mas estilizada, pero bueno.

Me recuesto en el sofá deseando que la vida pase encima mio, pero no, debo ir a empacar. Aun no me lo puedo creer, voy a ir a Venecia. Yo que nunca he ido mas haya de Estados Unidos y voy a ir a Italia por cuestiones de la vida, o de trabajo mejor dicho.

-Oh no-digo sentándome abrupta mente-se me olvido preguntarle cuantos días nos quedábamos-me levanto del sofá y voy a mi cuarto para coger mi macbook y escribirle un correo a mi jefecito.

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DE: Annaiza Cooper

PARA: Constantine Lombardi, presidente de Lombardi's, inc.

ASUNTO: Viaje

Buenas tardes señor Lombardi,

Perdone si lo interrumpo, pero tengo una duda. ¿Cuantos días nos vamos a quedar en Italia?

Perdone de nuevo, que tenga una feliz tarde.

Annaiza Cooper

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Leo unas tres veces el correo antes de enviarlo y me quedo sentada en la cama esperando a que la respuesta de mi jefecito llegue. Cuando me canso de estar sentada, decido acostarme y mirar el techo de mi habitación. 

Mi jefe, Mi demonio||PAUSADA Y EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora