Parte 14

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Conan disparó un dardo anestésico a Kogoro. Entre un par de vueltas logró situarse en su tipíca posición que daría inicio al show "Kogoro el durmiente". Se mantuvo un leve silencio. Conan sacó su modificador de voz, ajustó el sonido y empezó a deducir, una vez más, otra de sus grandes hazañas detectivescas.

Kogoro el durmiente: en este momento revelaré la verdad del caso, el culpable es uno de los tres sospechosos que se hallaron en las 3 instalaciones al mismo tiempo.

Ran ya había escuchado esa misma conversación, cuando apareció el padre de Sonoko y su gerente administrador de ventas y la declaración del culpable. Lo odiaba, lo odiaba tanto por el simple hecho de haber lastimado a su pequeño hermanito. Se distrajo tanto que la dedución de su padre había terminado. Vió como conan salió corriendo hacia la dirección en la que fue el terrorista. Ahora que sabía que el personal estaría a salvo, no tendría que preocuparse por eso, siguió a conan antes de que fuese tarde. Esta vez no dejaría que le pase nada.
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Mientras ran intentaba esquivar los escombros que caían poco a poco y seguir adelante para poder llegar tiempo, conan, recuperando el aliento, miraba fijamente al terrorista. Él, durante pequeños segundos de ventaja que obtuvo, logró amarrarse una larga cuerda a su cintura cuyos extremos se econtraban dispersos en la habitación. Conan, mostrando una expresión astuta, caminó hacia el centro del lugar sin mirar sus pasos. Su mirada estaba clavada en aquel culpable y en sus más mínimas acciones:

- sabía que llegarías hasta aquí, eres tan predecible, Kouta-san.- exclamó con confianza conan.

- y tú solo buscas el peligro, pequeño mocoso. Pero no podrás evitar que escape.

Conan encendió uno de sus zapatos, produjendo una chispa eléctrica. Apretó su cinturón, lanzando una pelota de goma al aire y la pateó con dirección a su objetivo. Logró darle en el blanco, pero no fue lo suficientemente fuerte como para dejarlo inconsciente. Lanzando un débil quejido, Kouta se levantó lentamente y sacó un revólver que tenía oculto en su pantalón y empezó a dispararle.
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El humo se hacía cada vez más denso y el fuego se propagaba cada vez más rápido. Conan trataba de evitar respirar demasiado humo, pero al estar en el cuerpo de un niño le resultaba difícil. Se había escondido detrás de varias cajas de cartón, encendió sus zapatos y pateó la pelota nuevamente, rogando de que esta vez lograse noquearlo. Para su mala suerte, la chispa de sus zapatos delató su posición haciendo que su oponente lo esquive seguido de una serie de disparos a la que a su vez, conan los evadía. Ambos sabían que no esquivarían los ataques por siempre, alguien caería y estaban dispuestos a no ser esa persona.

De repente, se escuchan pasos apresurados como si estuviese corriendo:

- ¿quién será?.- Se preguntó conan para sus adentros.

se quedó impresionado al ver que era...Ran. ¿Qué estaba haciendo ella allí?.

Lo que lo impresionó más fue que al instante que Ran recuperó un poco el aire, le dedicó una patada de karate a Kouta lanzándolo a través de la ventana. Sin embargo, éste antes de que cayera cogió el tobillo de conan, arrastrandolo junto a él. El pequeño detective logró sujetarse del marco de la ventana. Los pequeños vidrios que aún prevalecían en el marco se inscrustaban rápidamente en su mano, hiriéndolo lenta y dolorosamente. El dolor era tan grande que no le permitiría sujetarse por más tiempo. Sus dedos ae fueron resbalando, uno a uno. Ran reaccionó imediatamente, intentando coger la mano de conan antes de que se resbalara por completo... pero ya era demasiado tarde. Unos pequeños centímetros de distancia le impidió sujetarle su mano herida. Aunque solo tardó varios segundos caer al suelo. Para ran, esos segundos se volvieron más lentos de lo normal, viéndolo caer...  el pequeño detective le dedicó una pequeña sonrisa de ternura, aliviado de que el que recibiría el golpe fuese él y no ella, que ella estaría bien... a salvo.

Poco después perdió la consciencia, un charco de sangre empezó a derramarse. Las personas que se encontraban en el lugar acudieron rápidamente a su rescate. Afortunadamente la ambulancia lleguó más rapido de lo esperado y pudo llegar a tiempo para llevarlos a un hospital. Ran bajó del piso antes de que el edificio se quemará por completo.
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. No pudo ayudarlo... nuevamente, había desperdiciado su segunda oportunidad tan preciada. Debió haber pateado en otro lugar o tal vez haber dado un puño en vez de una patada. Los sentimientos de culpa y remordimiento empezaron a invadir su mente cada vez más. No tenía la seguridad que su hermanito se salve, de volver a escuchar un "ran nee-chan", no estaba segura de nada! Y eso la comía por dentro.

El inspector Megure llevó al tío Kogoro y a los demás para testificar y cerrar el caso. Después de eso, Ran le pidió de favor si podía llevarlo al hospital donde se encontraría Conan hospitalizado. Ran decidió irse al baño de la estación para secarse las lágrimas que se esparcían en todo su rostro. Abrió su teléfono, tenía una leve esperanza de que Shinichi le ayudara. Marcó su número y empezó a timbrar...una vez....dos veces....tres veces... Siguió esperando hasta que escuchó el contestador de llamada.

¿Por qué?...,¿Por qué en estos momentos donde más lo necesitaba no lo tenía?. Tenía tantas ganas de llorar, liberar todo lo que llevaba adentro, todo ese sentimiento de la culpabilidad que había en su interior. Quería escuchar un "no te preocupes, todo estara bien Ran" aunque no fuese verdad, quería algo que la reconfortara pero no había nada... él no estaba cuando ella lo necesitaba. Empezó a maldecirlo. ¿Por qué tuvo que alejarse en Tropicaland y dejarla sola, con un nuevo hermano?. Era su cita esperada, ¿Por qué no dejó su lado detective por ese día y disfrutarlo?. Pero así era él y eso es lo que gustaba de él. Ya no había remedio, su "príncipe azul" no vendría a ayudarla. Debía que hacer esto sola. Se secó las lágrimas y lavó su cara para eliminar toda evidencia de llanto. Había terminado la testificación. Bajó hacía el garaje, esperando a su padre y al inspector Megure.

¿Estás segura de que quieres ir, Ran-kun? - preguntó el inspector Megure. Él sabía que Ran quería mucho a Conan. Y no estaba seguro si Ran estaba preparada para ver a Conan en un estado tan horrible.

Sí, vamos rápido. No podemos perder el tiempo.- argumento Ran con una voz decisiva. No sabía cómo o en qué estado lo encontraría pero no podía echarse para atrás.

Hola! Lamento el atraso. La verdad es que el mes de mayo estuvo lleno acontecimientos. Y mi falta de inspiración no ayudaba mucho. Espero que el capítulo les haya gustado. Posiblemento en un futuro, se me ocurran mejores ideas y cambie algunas cosas del cap pero no se preocupen, eso no afectara en absoluto el progreso de la historia que habrá hasta ese momento. Solo cambiaré un poco la narrativa para que sea más placentera la lectura. Eso es todo por hoy. Dejen sus comentario, la verdad esque adoro leerlos :3. Nos vemos!

Revelado por las memorias Detective Conan FanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora