Con la gasita ya citamos a los kabros para que vengan, no quería desbloquear al Matías, pero la maraca, digo Mariana, me obligó y le mandó el WhatsApp para que viniera con el Juandha.
Uuuy, los weones que se demoran por la cresta. Me hartan, ahora entiendo a la Mariana.
— les voy a pegar una patá en la raja cuando lleguen wn— dije enojá.
— Hola xicas— llegaron los kbros, me levanté y les di una patá en la raja.
— OE QUE WEA TE PASA LOCA ENFERMA CULIA— me gritó el Juandha adolorido.
— QUE VENÍ A GRITARME A MI SHUSHETUMARE— grité yo toa xora. Debo defenderme po.
— DEJEN DE GRITAR FLAITES CULIAOS— gritó el Matías.
— CALLENSE CONCHETUMARE— gritó la Mariana.
Nos quedamos todos callados, mientras todos lo de la plaza nos quedaban mirando.
— OE VO' NO GRABÍ— el Matías se tiró encima de un weon que nos estaba grabando.
— ¿¡NOS ESTABAI GRABANDO SACO WEA!?— el Juandha se lanzó también.
— Puta wn, que vergüenza— dije. La gasita asintió.
Cuando los kabros borraron el vídeo y se levantaron, el weón se fue corriendo asustado. Lo traumaron, pobre.
— mejor vamos a otro lao weón, van a llamar a los pacos— dije y todos nos fuimos de la plaza de los héroes, para ir a una plaza que estaba cerca del colegio.
Nos sentamos en el pasto en un circulitos. A este punto ya sabía porque el dedo me dolía tanto, la cosa es que ahora hay que explicarle a estos weones.
— Ya, seguramente se estaran preguntando porq.-..— la gasita me interrumpió.
— Otra vez vai a empezar con tu wea— rodó los ojos — Los citamos aquí por esto— ella tomó nuestras manos, y puso los dos dedos frente a ellos. Siempre al grano. Me gustaba agregarle misterio a la weá.
Ellos los miraron sorprendidos.
— ¿Us-ustedes también?— murmuró el Matías, mirando su dedo, que se encontraba literalmente súper rojo. Ni mis manos que son rojas naturalmente están así por el dolor.
El Juandha venía con guantes. Tonto culiao.
— Sí. Miren, la Amandha ayer tocó su espejo con esto mientras sentía una wea rara en el cuerpo, y sospechamos que esto tiene algo que ver con los reflejos y por eso los cuatro tenemos la marca y nos duele cuando estamos cerca— dijo la Mariana.
— Anuma— dijo el Matías.
— ESA ES MI FRASE CONCHETUMARE CÁLLATE— grité y tomé una respiración — Anuma.
El Juandha fue el único que se empezó a reír.
— Muestren sus marcas— ordené. El Juandha se sacó su guante rápidamente, y abajo tenía otro guante, y abajo otro, y otro.
Lo miramos todos.
— ¿Erí weón o te hací?— dije.
— UUUY, pero es que mientras más apretao menos dolía po— dijo — Y no iba a ir mostrando esta wea de marca por todos laos, yo juraba que era cáncer— agregó.
Rodé los ojos.
— ¿De verdad te gustaba este gil?— le susurré a la gasita.
— Aish, sí— dijo haciendo cara de asco.
Los chicos mostraron sus dedos. Tenían exactamente la misma marca que la gasita y yo.
— ¿Y si las tocamos...?— preguntó el Matías.
— No.— respondió la gasita.
— Intentamos hacerlo, pero antes de tocarlas nos dolió más que la mierda, así que no— respondí.
— Pero intentemos po, ¿Y si pasa algo bacan?— dijo el Juandha.
— No— dijimos la Mariana y yo.
Si nos dolió solo a las dos, imaginen con los cuatro.
— Kbras, por algo tenemos las marcas, algo debemos hacer— dijo el Matías.
La gasita y yo nos miramos indecisas.
¿Y si era cierto..?
Tal vez debamos volver a intentarlo.
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La venganza de los reflejos (II)
MaceraHan pasado dos años desde lo sucedido dentro del espejo y los reflejos. Todos creen que acabó. Pero, ¿Qué piensan que hicieron los reflejos en esos dos años? Es hora de su venganza. ••• Segunda temporada de "Nuestro reflejo en el espejo" así que vay...