"capítulo dos"

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I tried so hard to act nice like a lady You taught me that it was good to be crazy

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I tried so hard to act nice like a lady You taught me that it was good to be crazy

Me despertó el cantar de las aves, la tenue luz se colaba por las pequeñas ventanas, intenté moverme pero mi brazo se quedó dormido por la mala posición en la que quedé, miré a John él aún dormía me fui a levantar del sofá pero....

—¿Eh y tú adónde vas? —murmuró—Siento haberme quedado dormido nena. —acomodo mi cabeza en su pecho.

—Tienes que darte un respiro, quizás deban parar por un tiempo los conciertos. —propuse jugeteando con el botón de su camisa.

—Sonrió—Eso es imposible—miró el reloj de su muñeca—aún tengo tiempo ven.

Se incorporó para sentarse yo me coloqué encima de él con mis manos en el espaldar, me apretó contra su masculinidad agarrando mis glúteos, bese sus labios con ansias, John era increíble haciendo el amor, nadie lo podría igualar o mejorar, esa era la maldita cosa que me ataba a él.

—¿Por qué me obsesiona tanto tú olor?—formule oliendo su pelo.

—Eso es porque estas loca por mí.—decía a la vez que besaba mi escote.

—Eres un idiota.—sonreí.—Sabes que cuándo yo quiera puedo dejarte.—lo agarré del cabello obligándole a mirarme.

Él sabía de sobra que no era cierto, alguna vez has sentido que estando con esa persona el resto del universo no importa nada, podrías morir mañana mismo si es junto a él, pues eso sentía yo estando con John Lennon.

Subió un poco el vestido, él roce de sus manos al hacerlo provocó en mí una descarga eléctrica, yo desabrochaba sus pantalones, deje al descubierto su erección, a causa de la rutina ya sabía que hacer alcanze su mochila y saqué un preservativo el guió mis manos hasta su miembro y lo colocó mirándome lascivo mientras yo le contestaba mordiendo mis labios lo introduje lentamente en mí deseo.

—Mmmmh Johnny.—gemí hundiendo mi cara en su cuello.

Aspire su aroma y mordi su cuello, agarraba mis caderas ayudándome a subir y bajar de su pene

Entre estocadas lentas y violentas jadeos y alguna que otra palabra mal sonante culminamos con un gran orgasmo.

—Nena sacame un cigarrillo de la mochila.—pidió tirando el preservativo aún lado.

—¿Hasta cuándo tendré que esperar para la próxima?—formule encendiendo el pitillo y colocandolo en sus labios.

Después de una intensa calada respondió.

—Pues el mes próximo será imposible, tenemos una gira y será larga.—respondió dándome un beso en la frente.

—¡Johnny cada vez estoy más cansada de esto!—exclame levantándome.—Cansada de esperarte cuándo tú quieras.

—Sabias donde te metias cuándo aceptaste, bueno, déjame donde siempre que ya llegó tarde.—se levantó recogiendo sus cosas.

—Sí por que ella va a empezar a hacer preguntas.—dije resentida.

Él se acercó a mi dónde yo ya lo esperaba en el umbral de la puerta, rodeo sus brazos en mi cintura y pego su cara a la mía.

—No seas tonta, siempre estarás en mi cabeza, por mucho que ella esté en mi vida, tú seras mi aliento para que cada día sea mejor.—murmuró  besando mis labios.

Una vez en el coche hizo un gesto de asombro.

—¿Que pasa?

—Olvidé una cosa.—rebusco en su mochila y saco una cajita.—Toma Nena esto es para ti.

—¡Johnny!—exclamé sorprendida.—Me da miedo abrirlo.

Cerré los ojos y fui abriendola lentamente, colé mis dedos e intente averigüar que era.

—¡Ay! ¡Dios! John estoy muy nerviosa.

Él reía a carcajadas.

—Venga va, abre los ojos.

Le hice caso, pude ver una cadena de donde colgaba un pequeño reloj de plata, era precioso.

—Ooooh John es hermoso.—dije sollozando.—¿Pero por que un reloj?

Secó las lágrimas de mis mejillas.

—Cuando sientas que me extrañas míralo y piensa en mí y recuerda que cada minuto y segundo es uno menos para que nos volvamos a ver.

—¡Johnny idiota para!.—exclamé sin poder dejar de llorar.

Me lancé a sus brazos y me senté en su regazo, nos miramos intensamente a los ojos, quería decirle que no se fuera que se quedara conmigo por siempre, pero a quien quería engañar eso nunca pasaría en cierto modo maldigo el día en que lo conocí.

                   ***********

Habían pasado 3 semanas desde nuestro último encuentro, yo descansaba en un gran sillón de mi sala, sin hacer nada, sólo admiraba mis pies desnudos y de vez en cuándo el gran ventanal a mi izquierda el verano se hizo presente con una rara lluvia torrencial, él teléfono sono, lo agarré y volví a sentarme.

—¿Si? ¿Quién es?

Pero nadie contestaba, estaba a punto de colgar, cuándo escuche los primeros acordés de una canción muy especial para mí, maldito supe al instante que era él, quise a hablarle pero comenzó a cantar.

—A pesar de todo el peligro,
a pesar de todo lo que puedo hacer.
Voy a hacer cualquier cosa por ti,
cualquier cosa que quieras,
si vas a ser fiel a mí.—cantaba con su característica voz.—A pesar de todos los dolores de cabeza
para que me causa,
Voy a hacer cualquier cosa por ti,
cualquier cosa que quieras,
si vas a ser fiel a mí.—se quedó callado.

—John Winston Lennon voy a matarte quieres que muera de un paro cardíaco.—dije nerviosa mirando él reloj que me regaló.

Él comenzó a reírse yo lo seguí.

—¿Cómo estas nena? Tuve un rato y pensé en ti.

—Estoy aburrida en casa sola, pero bien, ¡Ah! Entonces sólo piensas en mí a ratos muy bonito. —dije imitando un tono de molestia.

—No seas boba, pienso en ti todo el tiempo, me estás arruinando la vida, ¿Ahora que voy a hacer contigo? Extraño tú cuerpo.—dijo dando un gran suspiro.

—Cállate no me hagas sentir peor, en serio, yo no estoy mejor que tú. ¿Cuándo nos veremos?—formule jugeteando con el cable del teléfono.

—Pues nena creo que dentro de unas 3 semanas más, lo siento, hago todo lo que puedo.

De repente una voz lejana lo interrumpió, "Vamos John" pude escuchar.

—Pequeña tengo que irme, prometo volver a llamar cuándo tenga un espacio, cuídate y ya sabes haría cualquier cosa por ti si prometes ser fiel.

Y entonces colgó, di un gran suspiro, las lágrimas no tardaron en salir, estaba más que cansada de aquello de esperar y esperar.


Lucky ones | John Lennon. ×Corrigiendo×Donde viven las historias. Descúbrelo ahora