Un paraíso no tan lindo.

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DIPPER

-Y después hicimos una mini guerra de helados y fue muy lindo porque luego me quito todo de mi cara- dije entre risas contándole a Will mi salida no planeada con Evans- ¡y me dijo que tengo unos lindos ojos!- hablé emocionado. -Y estaba a nada de besarme, pero nos interrumpió su jefe.

-¿Quien habría dicho que caminar traería algo bueno en la vida?- dijo entre risas.

BILL

¿Uhm?  -regresaba de la cocina con una manzana y una botella de agua y me detuve al escuchar unas risitas y juegos que provenían del cuarto de mi hermano menor, will.

-Y después hicimos una mini guerra de helados y fue muy lindo porque luego me quito todo de mi cara.- podía distinguir la voz de Dipper

- ¡y me dijo que tengo unos lindos ojos!- hasta aquí escuchaba su patética emoción

-Y que estaba a nada de besarme, pero nos interrumpió su jefe.

¡Ese maldito!  -susurre y mordí la manzana- ¿quien se cree que es ese mocoso para salir con alguien más y encima emocionarse? 

No puede hacerlo, necesito hacer algo con ese estúpido adolescente, esta pequeña oveja es mía... Aunque no le guste.

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Como es de costumbre entre semana fuimos a la escuela y en los pasillos me encontré con el chico por el que la pequeña oveja se emocionaba.

-Evans, hola- lo saludé poniendo mi brazo sobre su cuello- Escuché que estuviste con un niño patético, de nombre Mason Pines.

-¿Dipper? ¿Patético?- dijo confundido- creo que te equivocas- hablo quitando mi brazo de su cuello- Dipper es muy lindo y divertido- dijo cruzándose de hombre y sentía como la sangre me hervía.

¡Estúpido!

-Te voy a decir una cosa- dije mientras lo tomaba del cuello- aléjate de él, ¿Te quedó claro?- lo amenace apretando cada vez con fuerza

-¿O si no qué?- dijo sin ningún rasgo de temor en su voz, más no le contesté nada- sabes Bill, yo no tengo nada que esconder, y me importa un comino lo que la sociedad piense- Su rostro cada vez se tornaba a una de satisfacción, sabía que todo lo que decía era real- No soy un cobarde que se esconde y lástima a las personas para que tener la aprobación de los demás.

-¡YA CÁLLATE!- le grité con irá, odiaba a ese sujeto pero más me odiaba a mí porque él era mejor que yo y sabía que Dipper lo iba a escoger a él.

-No me das miedo Cipher- dijo soltando se de mi agarre- Y si vuelves a tocar a Dipper serás tú quien deberá temer. - y se dió la media vuelta notando que esté entraba a su salón.

Perfecto, si el sujeto quiere jugar sucio entonces jugaremos sucio. Y yo tenía un as bajo la manga.

Me dirigí como si nada a mi salón buscando con la mirada a mi nuevo juguete.

-Será perfecto- murmuré acercándome a ella

-Hola Alexa- hablé sentándome a su lado
-Oh, hola- me saludó la chica, está era fácil porque como todas, esta enamorada de mí.
-Me preguntaba si después de la escuela querías ir al cine.- pregunté acariciando su mano.

-¡Claro!- respondió sin pensarlo dos veces a lo que yo sonreí
-Hasta entonces querida- me acerque a ella para darle un beso en la mejilla e irme del lugar para después limpiarme la boca con asco.

Las horas de clases tardaban eternidades, odiaba los martes. Tocaban las materias más aburridas y pesadas. 

Por fin, después de mucho tiempo, tocaron para salir de esa cosa a la que nos referimos como escuela.

Me dirigí al asiento de Alexa esperando que está terminará de recoger sus cosas.

No tenía porque ayudarla, lo puede hacer ella sola y no es como que me importará impresionar la.

Pero note que su hermano entraba a nuestro salón.

Evans se acercaba a Dipper así que tenía que hacer algo y rápido.

-Dejame te ayudo- dije intentado llamar la atención de ambos chicos y así fue.

Pase mi brazo al cuello de la chica y está puso el suyo en mi cintura, dirigiendonos a la salida.

-Ni creas que te dejaré ir con ese patán.- dijo Evans deteniendo a su hermana, tomándola de su brazo.

-Suéltala Evans, ella puede hacer lo que se le plazca ya está grande, ¿O no cariño?- dije con una sonrisa egocéntrica notando las caras de Dipper y Evans al nombrarla de esa forma

-Si, yo puedo salir con quién se me plazca- dijo su Alexa soltandose del agarre de su hermano.

Esta vez salimos del lugar, guiñándole el ojo a Evans en forma victoria y noté como este tornaba su cara en una de frustración.

Alexa me platicaba sobre cosas muy superficiales, las que no me interesaba y sabía que el cine era el lugar perfecto para que se callará.

Dipper

¿Bill podía ser un estúpido? Si, ¿Por qué lo es? No tengo idea.

-¿Estas bien?- le pregunté a Evans al notar su comportamiento.

Evans y yo ahora caminábamos a la heladería, se había vuelto una costumbre ir a ese lugar.

-No- dijo de manera cortante- es decir,  no quiero que Bill lastime a mi hermana, ¿Sabes?- dijo encogiéndose de hombros

-Si, entiendo- dije al imaginarme si Bill saliera con mi hermana, era horrible, y de inmediato eliminé ese pensamiento de mi mente.

Al entrar pedimos lo de siempre, helado de menta con chocolate y sin esperar tanto tiempo nos lo trajeron.

-La verdad es que no sé porque Bill se comporta así, es decir, antes era una persona totalmente diferente.- hablé encogiéndome de hombros comiendo un poco de mi helado.

Evans tenía una cara totalmente rara, como si hubiese dicho algo malo.

-¿Que pasa?- pregunté con el ceño fruncido

-¿Te preocupas por Bill?- dijo intentando ocultar su seriedad, pero no le salía muy bien que digamos.

-Me preocupo por Will- corregí- Will es mi mejor amigo y él vive con ese demonio- dije y pude notar un poco de sarcasmo en mi voz que no era intencional.

-¿Qué?- pregunté al ver como Evans me veía.

Tenía una sonrisa boba pero linda, sus ojos grises me veían como si estuviese viendo un cachorrito haciendo una cosa adorable.

-Nada, solo eres muy lindo cuando comes helado- dijo con una sonrisa tierna y no pude evitar sonreír.

The Love List   ∆Billdip∆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora