Bofetada

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Una vez que el pequeño se calmó recogimos todo y salimos de la casa para montanos en el coche dirección al centro comercial.Marcos iba conduciendo y yo iba en los asientos de atrás con el pequeño recostado sobre mi pecho totalmente dormido.Yo lo miraba con ternura, y pensando en todo lo que habría tenido que pasar.Apoye mi mejilla sobre su cabeza y susurré:"Ahora yo cuidaré de ti pequeño".Marcos de vez en cuando nos dirigía una mirada a través del retrovisor y no podía evitar que una sonrisa rostro.
-Yo:¿Por que sonríes?
-Marcos:Porque te ves preciosa con el bebé en brazos
-Yo:Eso es amor de mejor amigo—dije sonriendo
-Marcos:Eso es amor punto
Después el coche volvió a quedarse en silencio, y continuó avanzando con normalidad hasta que, de pronto, se oyó como una pequeña explosión y el coche se descontroló, Marcos intentaba no salirse de la carretera pero le costaba mucho.Yo abracé fuertemente al pequeño cubriéndole la cabeza con mis manos;Marcos al ver que no podia controlar el coche tiró del freno de mano y el coche paró en seco.En cuanto el coche hubo parado dos hombres y una mujer armados aparecieron de entre los arbustos, mas tarde apareció un tercer hombre que iba desarmado.Cuando me percaté de la situación coloqué al niño en el suelo del coche y le dije que se mantuviese ahí.Acto seguido bajé del coche para we no lo vieran, uno de los hombres armados me apuntó y se acercó a mi para llevarme delante del hombre desarmado, que parecía ser el jefe, después el otro hombre armado fue a por Marcos y lo sacó del coche.
-"Jefe":Vaya vaya, ¿Que tenemos aquí? Una parejita
-Yo:No tenemos nada
-"Jefe":Callate
-Yo:De verdad, acabamos de salir de un grupo de esas cosas
-"Jefe":¡He dicho que te calles!—me cruzó la cara, y el bofetón resonó en mis oídos, segundos después comenzó a sangrarme el labio.
-Marcos:¡No la toques cabrón!—Marcos intentó abalanzarse sobre él, pero otro hombre lo mantenía sujeto
El jefe al oír a Marcos sacó una pistola y le disparó en el hombro, Marcos gritó de dolor y calló al suelo de rodillas, y apareció una manchade sangre en su camiseta que crecía más y más.
-Yo:¡No!
-"Jefe":Tranquila preciosa, el se lo buscó—soltando una carcajada—no tengo pensado hacerla nada, pero si me interesan vuestras provisiones y vuestras armas
Acto seguido le dijo a la mujer algo y ésta comenzó a registrar el maletero de nuestro coche.
Después me miró y se me acercó, me agarró la barbilla y me levantó la cabeza.
-"Jefe":Aunque si tu quieres nos podemos divertir un rato
-Yo:Me das asco—luego le propine un rodillazo en su entrepierna
-"Jefe":—Haciendo una mueca de dolor—Zorra—justo después me golpeó con la culata de su pistola cerca de la sien y caí al suelo, justo detrás de el hombre que sujetaba a Marcos.Estaba muy mareada y sentía como comenzaba a sangrar.Cuando recobré la vista me fijé en que la mujer había encontrado al pequeño, lo sacó del coche y lo empujó hacia mi.Mientras el hombre que me había estado sujetando y el Jefe comenzaban a rebuscar en el coche, recordé que aun tenía mi navaja en el bolsillo.Me levanté muy despacio y sin emitir ningún ruido, segundos mas tarde había hundido la hoja de mi navaja en el cráneo de aquel hombre que mantenía preso a Marcos.
-Yo:—susurrando—¿Estás bien?
-Marcos:Si tranquila—cogió el arma del hombre que yo acababa de asesinar y disparóal otro armado y después a la mujer, y le alcanzó en una pierna, corrí hacia el coche con cuidado de que no me vieran y cogí mi pistola, después apunte de lejos al jefe y le acerté en el pecho, calló al suelo mientras se desangraba.Luego me acerqué a la mujer que estaba en el suelo le apunte a la cabeza y sin pensarmelo apreté el gatillo.Mas tarde hice lo mismo con el jefe,hecho esto me agache para recoger las llaves del coche en el que ellos habían venido y me fui a por el pequeño
-Marcos:—señalando hacia la cuneta—mira aquel debe de ser el coche de estos desgraciados
Cogimos todo lo qu teníamos en el coche y nos montamos en el de nuestros atacantes, para poder por fin volver con los demás.Yo, junto con el pequeño me quedé dormida en el camino.Cuando llegamos Marcos me despertó y caminamos hacia la entrada, yo, con el niño en brazos.Marcos entró delante de mi, pero desde dentro a mi no se me veía, así que, cuando entré todos me miraron sorprendidos, en parte porque no me esperaban y en parte por que traía al bebé en brazos.Todas las chicas se acercaron a mi para ver al pequeño, pero mi prima y Mariangeles me sacaron del bullicio para llevarme a la tranquilidad de mi tienda.Cuando llegué dejé al pequeño en lo que utilizabamos como cama.
-Noelia:Lucy, ven, deja que te vea—dijo mientras miraba la brecha que había quedado sobre mi ceja debido al culatazo con la pistola y la herida de mi labio
-Yo:—sentndome sobre el mostrador—Vale pero con cuidado,todavía estoy un poco mareada
-Noelia:A ver—dijo mientras me desinfectaba la herida del labio—¿No me vas a contar que te ha pasado?
-Yo:Nos encontramos con otro grupo y nos atacaron...—apartando la cabeza—Auch
-Noelia:Lo siento...¿Que le ha pasado a Marcos?Tenia su camiseta manchada con mucha sangre
-Yo:Le dispararon...
-Noelia:Ahora cuando termine contigo iré a ver
Mi prima centró su atención en mi brecha; acto seguido me la desinfectó.
-Noelia:Es bastante profunda,tengo que darte unos puntos.Mariangeles,¿Puedes ir a mi tienda y traer el maletín que hay sobre el mostrador?
-Mariangeles: Si, voy—dijo saliendo de la tienda
Al rato Mariangeles volvió con el maletín,y mi prima empezó a buscar en su interior el material de sutura.
-Noelia:Esto te va a doler
-Mariangeles: Toma anda—dijo ofreciéndome una toalla
Mordí la toalla y mi prima hundió la aguja en mi carne; yo gritaba de dolor sin dejar de morder la toalla.Cuando terminó de coser mi herida, la tapó con un apósito y lo recogió todo.
-Mariangeles: —acercándose a mi—Gracias por devolverme a mi hermana—me abrazó
-Yo:—susurrando—Nuestra hermana, y...de nada
Mariangeles rió y las tres salimos de la tienda.Cuando nos acercamos escuchamos una risa que no conocí;entonces, Mariangeles me paró.
-Mariangles:Lucy, te tengo que informar
-Yo:Informame jajaja
-Mariangeles: Junto con Pablo, Lucia, y Jin llegó una chica nueva
-Yo:Valee jajaja
Seguimos avanzando, y cuando llegué vi a una chica que no conocía sentada encima de Marcos y le besaba.Esta vez no me iba a parar a hablar; me acerqué a ella y la separe de Marcos tirando de su pelo.Ella se levantó y me cruzó la cara pero entonces la tiré al suelo y comencé a golpearla y habría seguido haciéndolo, si no hubiese sido porque alguien me sujetó para sacarme de allí mientras yo me resistía.Era Bruno.
-Yo:¡Bruno, sueltame!
-Bruno:Solo si me prometes que te calmarás
-Yo:Sii¡Sueltame ya!
Bruno me soltó y al contacto con el suelo caí de culo, ya que seguía muy mareada por el golpe.
-Yo:¿Quien era esa zorra?—dije desde el suelo
-Bruno:—sentandose a mi lado—no importa, olvidalo y calmate
Sabía que Bruno me ocultaba algo importante y me daba mala espina.
-Marcos:Es mi novia—la voz de Marcos sonó a mi espalda
Esas palabras retumbaron en mis oídos, me levanté y me giré para mirarle a la cara.
-Marcos:Yo iba a...—le corté
-Yo:¿Ibas a que Marcos?¿Cuando pensabas decírmelo?—lágrimas luchaban por brotar de mis ojos, pero no le daría el gusto de verme llorar.
-Marcos:—acercandose a mi—Lucy yo no la quiero
-Yo:¡No me toques!—dije apartándose de él—¿Ya has conseguido lo qué querías de mi verdad?Eres un hijo de puta—lo miraba con odio
Bruno miraba la escena sin decir palabra alguna.Llegó un momento en el que no pude mas y salí a correr lejos de Marcos, de su novia , de Bruno y de todos, necesitaba estar sola.Mientras buscaba un sitio para poder estar sola, revivía todo lo que había pasado con él y por último el momento en que la otra lo besaba. Llegué a mi tienda y me senté al lado del pequeño, segundos después comencé a llorar, me sentía tan imbécil ¿Como había podido creerle?Poco después me quedé dormida, mas tarde Bruno me despertó haciendo el menor ruido posible para no molestar al niño, que seguía durmiendo.
-Bruno:¿Has estado llorando?
-Yo:—agachando la cabeza—No...
-Bruno:Mentirosa, ven aquí anda—dicho esto me abrazó
-Mariangeles:¿Se puede?—dijo desde la puerta
-Yo:—Separándome de Bruno—Si... entra no te quedes ahí
-Mariangeles:¿Que ha pasado cuando os habéis ido?
-Yo:Marcos vino a hablar conmigo, esa muchacha es su novia.
-Mariangeles:¿Te lo ha dicho él?
-Yo:—suspirando—si
Mariangeles se levantó y salió rápidamente, yo me levanté para ir detras de ella y Bruno nos siguió
-Yo:¿Mariangeles a donde vas?
Pero ella no me contestó y siguió su camino, yo la seguía porque sabia que iba a hacer algo que no debía.Cuando llegamos a donde todos estaban fue directa a Marcos,que estaba de pie y a su lado estaba "su novia"
-Mariangeles:Marcos eres un cabrón—dijo, y acto seguido le cruzó la cara de un bofetón, que resonó en todo el centro comercial.
Cuando todos vieron lo que estaba pasando cada uno se fue para un lado y pronto desaparecieron de allí.
-Andrea:¿Quien te crees que eres para pegarle a mi novio?
-Mariangeles:Tu callate perra—dijo mientras le dirigía una mirada intimidante.
Marcos no contestaba y le mantenía la mirada a Mariangeles.
-Mariangeles:¿Porque haces esto Marcos? Ella te quiere.
Marcos no contestó.
-Andrea:Pobre tonta...
Mariangeles se giró hacia ella y le propinó una bofetada que hizo que se le saltaran las lágrimas.
-Mariangeles:Eso es para que aprendas a cerrar esa bocaza—acto seguido se giró y tiró de mi de vuelta a mi tienda.Yo todavía seguía flipando por lo que acababa de pasar.

Los Muertos CaminanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora