LA FUERZA INTERIOR DE KODI

CAPÍTULO 10: 27 de Enero de 2005

Las fiestas navideñas pasaron, el día de Reyes fue sensacional; viajamos a Canadá para celebrarlo con una hermana de mamá y pasamos tres días allá.

Los días pasaron y mis pensamientos del lobo, de aquellas patas café oscuro, de mi extraña transformación no tuvieron importancia, regresamos a Nome fue toda una aventura, definitivamente éramos una familia unida, los días pasaron y la nieve comenzó a caer menos, las tormentas eran menos fuertes.

Mis amigos regresaron de sus países de origen, los esperé en la estación de tren, ya que el aeropuerto internacional más cercano está en la lejana ciudad de Fairbanks. Para llegar hasta allá existen dos medios de transporte, el automóvil privado o el tren. Éste último es el más recomendable y seguro en tiempos de invierno, ya que los caminos y carreteras se llenan de nieve, causando accidentes e incluso dejando desaparecidos.

Al llegar el expreso 34 ellos bajaron del quinto vagón, corrí hacia ellos y nos dimos un abrazo de bienvenida. Posterior a ello fuimos a la cafetería de la estación donde mis hermanos nos invitaron unas croquetas de atún y hot cakes. Era la primera vez que mis hermanos y mis amigos se encontraban frente a frente, Rodrigo nos

hacía reír y Humphrey le seguía la corriente, al parecer se llevaban muy bien ya que ambos eran bromistas.

Subimos a la camioneta y nos dirigimos a dejar a Colmillo blanco, cabe mencionar que su padre tuvo que volar a Ontario Canadá por asuntos urgentes de trabajo, por lo que Colmillo blanco vino solo desde Rusia, entró a su casa y nos dirigimos a dejar a Humphrey, por último Daniel al final no quiso bajar por que había entablado una amena conversación sobre medicina con Dakota, no tuvo opción más que despedirse.

La escuela y el trabajo volvieron a su curso normal cuando entró Febrero. Nos levantamos temprano aquel primero de Febrero, Dingo y Dakota nos dejaron en la escuela y partieron a la Universidad.

Al entrar a clases volví a ver a mis amigos, a Dusty y por desgracia a Kodiak, quien no tardó ni un segundo para mirarme de nuevo con desprecio como siempre lo hacía

Empezamos con una clase de química aburrida copiando modelos atómicos y ecuaciones para determinar la energía de átomos de elementos básicos de la tabla periódica. La mañana avanzaba, entre clases frecuentaba a Dusty para platicar sobre cómo fue nuestro fin de año, ella estuvo en Eslovenia junto con su hermano y su familia de parte materna, vaya que se sentía muy extraño y a la vez especial tener amigos de