Capítulo 20 - Despedida (Final)

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En el instituto, había una gran cantidad de alumnos pegados mirando el listado que fue publicado. Yo, había llegado media hora más tarde de lo pautado, justado considerando el hecho de que habría muchos alumnos ansiosos por saber si aparecían o no en el famoso listado. Así que decidí esperar a que estuviera un poco despejado. Durante la espera, llegaron Yve y Carmen. Minutos más tarde apareció Liz, estaba cabizbaja.

—¡Hola chicas! —Saludó a todas y les dio un beso en la mejilla. Dudó en acercarse a mí, sin embargo lo hizo. Me dio un beso, que me hizo sentir una energía tibia expandiéndose en mi pecho.

Liz e Yve se apartaron, fueron a revisar el listado. Mientras tanto me quedé con Carmen poniéndome al día con las cosas que no habíamos podido conversar en el último mes.

Me contó que, tristemente, no podría comenzar los estudios en la universidad pues, para su familia, era difícil cubrir sus gastos. Lamenté enterarme de eso; Carmen siempre había sido muy buena alumna, dedicada y constante. No dudaba que sería una gran profesional, lástima que tenía no podría continuar con estudiando, al menos no por ese momento.

Estuvimos conversando sobre la posibilidad de que consiguiera un trabajo de medio tiempo y así poder costear sus estudios y pareció entusiasmarle la idea. Quizá no estudiaría lo que ella quería, pero al menos intentaría hacer algo que le interesara y que pudiera costear. Me pidió que no lo comentara con nadie más, pues no quería ser el blanco de burlas o que sintieran lástima por su situación.

Le comenté sobre la situación por la que había pasado con Liz, desde el día de la fiesta de grado hasta ese día. Le conté todo muy rápido, pero no le di detalles; pronto regresaría Yve y Liz. Me hizo reír con las caras de sorpresa que hacía a medida que le iba describiendo lo sucedido. No me reprochó nada, pero sí me hizo saber que comprendía la actitud de Liz, no la juzgaba y tampoco la justificaba porque para ella, también, debió ser difícil estar en esa posición, considerando que ella me quería, aunque no lo reconociera. Esas últimas palabras de Carmen me dejaron pensativa... Liz me quería «Ja, maldito orgullo»

Las chicas regresaron, estaban contentas porque habían sido asignadas en las universidades que ellas seleccionaron. No nos dijeron cuál era el resultado para nosotras para que lo viéramos con nuestros propios ojos. Así que, Carmen y yo, nos dirigimos a ver lo que nos correspondía.

Miramos el listado y allí estaba. Había sido asignada en la universidad que solicité y para la profesión que escogí. Carmen, también resultó seleccionada; ella, había ido a revisar el listado por mera curiosidad de ver si la habían aceptado, le hacía ilusión aunque sabía que no podría asistir.

Ver sus ojos llenos de tristeza, me arrugó el corazón. Mientras leíamos el listado, pasé mi brazo sobre su espalda y apoyé mi cabeza en su hombro «Ánimo Amiga». No hizo falta decir más, ya habíamos hablado del tema y no pensaba volver a tocarlo; no quería meter el dedo en su herida.

—¿Y? —preguntó Yve, al vernos regresar.

Sonreímos —¡Listo! hemos sido asignadas en lo que queríamos —dijo Carmen.

—¡Celebremos! —Se apresuró a decir Yve.

—Quisiera pero no puedo, debo regresar a la casa. Tengo cosas que hacer —respondió Carmen.

—Yo también —dije, para tratar de apoyarla.

—¡Que aburridas son! —Exclamó Yve sonriendo. Liz le acompañó en la risa.

—¿Nos vamos? —preguntó Liz, Carmen e Yve asintieron.

—Yo no, me quedaré un rato —Las tres se quedaron mirándome de forma extraña.

Amando por primera vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora