Capítulo 4-Perdido

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CAPÍTULO 4 - PERDIDO

Se inclinó ante ella y educadamente, Sun Hee, se presentó.-Soy Sun Hee, Lee Sun Hee-dijo lo más sonriente que pudo.

El chico sonrió con más dulzura aún.-Bienvenida a la YG Family.

Esa era la primera vez que alguien le daba la bienvenida de verdad, y estaba muy agradecida, así que lo demostró con una gran sonrisa.

-Puedes contar conmigo para lo que necesites, sé lo difícil que es ser nuevo aquí-dijo amablemente.

Ese chico era encantador, estaba muy agradecida de que existiera alguien ahí así, alguien que le hablaba mientras no estaba pensando en si había alguna manera de deshacerse de ella. Fueron a tomar un café juntos mientras hablaron sobre su trabajo, la cosa era que el chico sería su compañero, por eso había ido a presentarse. Eso animó a Sun Hee, no quería pasar todo el tiempo escapando de todo el mundo, al menos podría charlar tranquilamente con Dong Hyung, era una persona muy agradable.

-Sun Hee, tienes que trabajar, no estás aquí para charlar con donsaengs...-se giró y encontró a Jiyong detrás de ellos, con el ceño fruncido y mirándolos rencorósamente. Sun Hee hizo una mueca y se levantó de mala gana, le hizo una reverencia a Dong Hyung para disculparse y siguió al cantante.

-¡Nos vemos, noona!-se despidió el chico alegremente. Ella se giró y le sonrío, Jiyong la agarró de la muñeca y la jaló tras él.

Ella, con toda la fuerza que pudo, se deshizo del agarre y se paró en seco. Jiyong suspiró antes de girarse para mirarla.-Mira, aquí estás para trabajar conmigo, no para ligar con donsengs, que te quede claro.

Ella le lanzó una mirada desafiante.-Mire, alteza GDragon-dijo con un tono sarcástico bastante enfadada.-No estoy aquí sólo para trabajar para su majestad, también tengo más cosas que hacer.

El cantante suspiró y la jaló de nuevo a pesar de las oposiciones de ella, que se quejaba mientras la arrastraba.-Te dije que me llamases Ji Yong-dijo molesto por ser la tercera vez que lo repetía.

Cuando llegaron al ascensor y estuvieron dentro la soltó con desgana. Pulsó el botón para dirigirse a su sala. Cuando las puertas se cerraron la miró con desdén, ella le dirigió una mirada fulminadora.-Estoy aquí para trabajar, cierto, pero no soy tu esclava. Eres tú el que no tiene las cosas claras-las puertas metálicas se abrieron y ella salió rápidamente dejándolo con la palabra en la boca.-Inmaduro...-dijo en un murmullo esperando que lo oyera.

Jiyong salió detrás de ella y la siguió.-Yo no soy el inmaduro... ¿Acaso sabes por qué estás aquí?

Sun Hee se paró en seco, tomó aire y se giró.-¿Acaso tú lo sabes?

El cantante sonrió con importancia.-Estás aquí porque tu inmadurez nos arruina la existencia a todos.

Ella hizo una mueca.-¿Y por qué tengo que estar contigo?

-Para que madures un poquito-dijo golpeando suavemente su frente con dos dedos.

-No me toques-le ordenó molesta. Ella sacudió la cabeza y caminó hasta su oficina, en cuanto entró cerró la puerta tras ella. No quería verle.

Se acercó a la ventana que había en su oficina y la abrió, se asomó para respirar aire fresco. Contempló la calle, al mirar hacia la izquierda encontró a Ji Yong asomado a la ventana, al igual que ella, para tranquilizarse un poco. Él le sonrió, la escena le pareció, en cierto sentido, graciosa, ella, rápidamente, se metió en la sala. Cerró la ventana y bebió un poco de agua para relajarse. Tenía una horrible sensación dentro, sabía que era porque tendría que pasar muchísimo tiempo viéndole, escuchándole, hablándole... Un escalofrío recorrió su cuerpo.

Mr. EgoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora