Mr. Ego

Capítulo 14-Because...

-¡Dios mío!-exclamó más que sorprendido.-¡Deberías pensar en colocar en tu perfil la palabra "genio"!

Lo tomó por los hombros y lo empujó hasta la oficina del presidente.

Este le echó un vistazo muy detallado a la canción con una gran sonrisa en el rostro. Cuando terminó de analizarla mentalmente dejó el cuaderno sobre la mesa y comenzó a aplaudir al cantante, cosa que imitó el manager, ambos muy felices.

-Te felicito, has hecho un trabajo genial-comentó muy orgulloso. El cantante hizo una reverencia frente a ambos.-Lancemos inmediatamente la fecha, ¿deberíamos hacerlo el dieciocho?-preguntó cayendo en la cuenta de que sería el cumpleaños de él.

Jiyong negó con la cabeza.-Ese día será la boda-los dos, al escuchar eso, agacharon la cabeza y comenzaron a pensar.

El presidente sonrió de nuevo.-Bien, será un single sorpresa para las fans. Saldrá un día antes-los otros dos quedaron boquiabiertos.

Jiyong dudó de la decisión nada más oírla.-Presidente, creí que después de la presentación yo le...

-Crees bien-le interrumpió.-Todo seguirá según estaba planeado, sólo asegúrate de que salga bien.

Jiyong suspiró y se agarró el cabello.-Sólo quedan unas semanas...-le recordó, pero al ver la mirada confianza del presidente, aceptó.-Haré mi mayor esfuerzo-dijo antes de hacer una reverencia y marcharse.

Salió de allí y tomó su teléfono, y de nuevo se citó en la cafetería.

******** ********* ******** ********

Una lágrima resbaló hasta caer en el suelo.-¡Sigue así y estarás solo en el altar!-amenazó antes de limpiar su rostro.

Él rio tenebrosamente.-Sabes que no tienes salida, ¿o acaso incumplirás el último deseo de un buen hombre?-se burló haciendo que ella agachase la mirada, intimidada.

Se acercó con pasos grandes, se agachó frente a ella y tomó un mechón de su pelo para colocarlo hacia atrás. Ella retiró su rostro hacia un lado evitando que la tocase. Él agarró con fuerza su barbilla y la obligó a mirarle. Agarró con fuerza el resto de su cuerpo y le dio un corto beso antes de soltar su rostro con furia, haciendo que se diese contra la pared de nuevo, y se marchó con un fuerte portazo.

¿Cómo podría mirar para otro lado si cada día era más salvaje? Del golpe en la cabeza se sintió mareada. Cuando consiguió ver todo medianamente bien, intentó levantarse pero por un terrible dolor en su pierna derecha cayó de nuevo al suelo.

-Mierda...-soltó agarrando su mano que había sido atravesada por un trozo de cristal de los que estaban esparcidos por el suelo.

Se arrastró como pudo hasta el teléfono fijo. Y telefoneó a su madre, pero esta no contestó a la llamada. Marcó un número diferente y esperó.

Con voz temblorosa respondieron al otro lado.-¿Sun Hee?

-Tienes que venir, él... él...-pidió intentando mantener la compostura, pero aún así su voz se escuchó rota y dolida.

Pudo escuchar un fuerte sonido.-¡No te muevas!-gritó preocupado antes de colgar.

Ella comenzó a soltar las lágrimas que había conseguido aguantar por unos minutos y rompió en un fuerte llanto. Tomó su mano temblorosa e intentó sacar el cristal con un enorme chillido y sin éxito, finalmente lo dejó allí. Se abrazó las piernas y hundió la cabeza entre ellas mientras lloraba.

Tras unos quince minutos la puerta se abrió y entró Tzao con la respiración acelerada y sin aliento. Corriendo se abalanzó sobre ella y la abrazó.