Estaba sentada en la proa del barco con un pedazo de tela apoyada en el corte que me hice en el cuello cuando un mink pantera se acercó a mí. Por su aspecto podía notar que había pasado un mal rato bajo las órdenes de su "capitán".
- Muchas gracias.
- No hay porque, realmente solo hice lo necesario para salvar a mi amigo – Bepo se encontraba del otro lado del barco ayudando allá demás minks a recuperarse y curar sus heridas.
- De cualquier manera, gracias... estoy en deuda con ustedes – diciendo esto se arrodilló frente a mi.
- Oi, oi, oi, no es para tanto – levantó la cabeza para mirarme-. ¿Cuál es tu nombre?
- Mi nombre es Kito.
- Un place conocerte Kito. Por favor levántate me estas empezando a incomodar jajajaj...
- Lo lamento.
Todo ese tiempo buscando minks y ahora estaba rodeada de ellos, solo tenía que preguntar y nos llevarían a destino. Cumpliría con mi promesa y podría estar en paz.
Kito se empezó a alejar de mi en dirección al grupo cuando pude soltar unas palabras que dieron un cierre a esta aventura.
- Kito, ¿podrías guiarnos a Zou?
De ahí en más el resto del viaje fue tranquilo. El mar, el viento incluso el submarino estaba en paz, casi como si hubiéramos encontrado una paz divina. La llegada a Zou no fue muy distinta, inclusive nos recibieron muy a gusto, aunque nos mantuvieron en un área apartada por ser extranjeros. Todo parecía que estar bien.
- Yuuki, el capitán llama – me levante de mi cama para ir al encuentro del den den mushi.
- Law?
- Yuuki – podía escuchar su voz del otro lado del teléfono – veo que consiguieron llegar.
- Si, costó, pero lo conseguimos – era un alivio escuchar su voz -. ¿Cómo vas tu?
- Hubo unos cambios de planes, pero creo que podré solucionarlos.
- ¿Cambio de planes? – no era habitual en él.
- De alguna manera los mugiwara están en la ecuación, interrumpieron en el peor momento, pero pude solucionarlo. Somos aliados ahora y vamos por la cabeza de Doflamingo.
- ¿COMO? ESE NO ERA EL PLAN. NO PUDES IR TÚ SOLO CONTRA ÉL.
- No estoy solo, los mugiwara son capaces de hacer milagros. Yo confío en ellos, además no pelearé con él, solo destruiremos todo a su paso – pude notar como desbordaba de confianza, lo cual me daba seguridad a mi. Si el confiaba en ellos, yo también debía de hacerlo.
- Esta bien, es bueno saber que no estás solo – empecé a toser fuertemente y sangre salió de mi boca manchando mis manos que intentaron cubrirlo.
- YUUKI, ¿QUE FUE ESO? ¿ESTAS ENFERMA? – su preocupación se notaba a leguas.
- No, no, solo un pequeño resfrío. Nada de que preocuparse. Solo concéntrate en derrotar a Doflamingo y vuelve a mi, te estaré esperando.
- ¿Segura que no es nada? Puedo volver ahora.
- Jajajaja... Trafalgar Law, no te atrevas a detenerte ahora, has pasado por mucho para llegar a este momento. Yo estaré bien, solo no te tardes.
- Te amo.
- Yo también te amo.
Y colgó. Lágrimas empezaron a correr por mis ojos mientras me dejaba caer nuevamente sobre mi cama. No sabía si volvería a verlo, si sobreviviría hasta ese día. Mi salud cada día empeoraba más y a este paso no duraría un mes.
Pasaron los días y cada vez era peor, la tos empeoraba y los desmayos eran más seguidos. Toda la tripulación estaba al tanto de lo que pasaba, pero prometieron guardar silencio, sabíamos que no podíamos decírselo o todo se arruinaría. No podíamos permitirnos fracasar. Estábamos ahí para apoyar a nuestro capitán. Sin importar cual fuese el costo.
Para empeorar aún más la situación, unas semanas luego de nuestra llegada Zou fue invadida y atacada por unos subordinados de Jack. Buscaba un hombre, un ninja que el pueblo no conocía, ellos no lo escondían allí. Pero no fue de importancia para ellos, destruyeron todo a su paso y acabaron con todo. Si no fuera por ese maldito gas hubiesemos ganado, pero nos inmovilizaba, nos debilitaba, no podíamos hacer nada contra ello. Hasta que un día se retiraron dejándonos derrotados en el suelo. Dejandonos morir.
Parecía que habían pasado meses desde que estábamos tirados allí inconscientes, lastimados, muriendo lentamente cuando una parte de la tripulación de los mugiwara apareció para salvarnos. Se deshicieron del gas y nos dieron un antibiótico, nos curaron y vendaron, nos alimentaron y nos ayudaron. Podía entender porqué Law confiaba en ellos, porqué yo confiaba en ellos. Después de todo no era la primera vez que los veía ayudar un reino sin pedir nada a cambio.
Todavía recuerdo al doctor Chopper gritando desesperado por mi situación cuando me encontró. "No hay nada que pueda hacer, nada que pueda hacer" mientras corría en círculos y buscaba entre libros y medicamentos. Su medicina no era suficiente para mi, solo podía ayudarme a mantenerme de pie, regalarme un poco mas de tiempo, pero no podía extirpar lo que me estaba matando.
- Yuuki como te sientes hoy – Chopper apareció en la puerta de mi dormitorio con sus medicinas.
- Estoy bien, doctor.
- ¿Tomaste tu medicina el día de hoy?
- No, no lo hice.
- ¿COMO QUE NO LO HICISTE? – se empezó a mover frenéticamente de un lado al otro de la habitación – Si no las tomas no te recuperarás
- Lo lamento, pero ya tengo aceptado mi destino. No hay nada que puedas hacer por mi Chopper – lo tome de las pezuñas para que se tranquilizara-. Solo hay una persona capaz de ayudarme – lo mire a los ojos -. Realmente lo lamento.
Su mirada se apagó, completamente destrozado por mis palabras. Lo peor que puede sentir un médico es saber que no tiene el poder para salvar a alguien y acababa de decírselo al reno médico más tierno de todos.
- Chopper, ayúdame a levantarme quiero ir con el resto de la tripulación. No quiero pasar el resto de mi día aquí adentro.
Salimos de la habitación en la que me encontraba para poder reunirme con mis nakamas en el bosque, rodeada de bellos arboles. Era un hermoso día, tan tranquilo y en paz. Cuando la alarma de intruso empezó a sonar. Alguien había entrado a Zou, tal vez eran los subordinados de Jack, tal vez habían vuelto.
Nos miramos entre todos y nos preparamos para luchar, pero un repentino silencio se hizo nuevamente y todo parecía calmado.
----------------------------------------------------------------
Ya nos vamos acercando al cierre de la historia, o tal vez no... dependerá de ustedes.
Si tienen alguna sugerencia o alguna idea para los proximos capitulos me los pueden escribir y con mucho gusto los leere.
Gracias por llegar hasta acá conmigo.

ESTÁS LEYENDO
No huiré
FanfictionMi nombre es Yuuki Kuzora y tengo 20 años. Junto a mi hermana Hiyori hemos recorrido el Grand Line y llegado al New World buscando una cura para mi enfermedad pero aún no la hemos encontrado. No me pertenecen los personajes.