Capítulo X

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Paul

Después de aquel beso seguimos nuestra cena muy agusto hasta irnos a la cama, no paso nada mas qué besos y abrazos la tradición aquí era qué el prometido o prometida del Rey debe de llegar virgen al altar así qué no podiamos tener relaciones sexuales hasta nuestra boda.

Cai dormido en los brazos de John quién me apegaba mas a su cuerpo sintiendo lo calientito qué era su pecho.

A la mañana siguiente...

— Rey John es hora de levantarse, tiene muchos deberes el día se hoy —Un hombre abrió las cortinas despertandonos por los rayos de Sol

— Es muy temprano Raymond

John hablaba mientras seguia con los ojos cerrados, segua agarrado a mi cintura mientras qué yo ya me había despertado pero el castaño no me quería soltar.

Raymond Hall asistente personal de John, era lo contrário a serio cuando vivía en la ciudad o pueblo el siempre lo veiamos pasear felizmente por las calles de Londres.

Al ver qué John no se despertaba hizo algo qué se qué no le iba a agradar.

— ¡Paul se esta besando en el pasillo con una empleada!

Abrió los ojos mientras se levantaba rápidamente de la cama, se puso sus chanquitas y salió corriendo. A veces pensaba qué estaba medió idiota para no fijarse qué estaba a su lado abrazándome.

— ¡Paul! ¡¿Donde carajos estas?! —Gritos de John se escuchaban

— No se porque nombraron a John el Rey de todo el Reino Unido —La voz gruesa de Hall llamo mi atencion

— ¿Sera porqué es hijo de los ex-reyes? — Lo mire incredulo

— Raymond dime ahora mismo donde esta Paul ¡Es una orden!

John volvió a la habitación, por fin se dió cuenta de qué estaba hay pues la mirarme se lanzo encima mío.

— Hola mí amor —Sonreí

— ¿Como te atreves a engañarme con una empleada? Despues de lo de ayer..

— Yo nunca te engañaría John, lo que dijo Raymond es mentira todo fue para que despertaras —Bese su mejilla

— Tanto amor me da diabetes

John fulminó a su asistente pero despues una sonrisa un poco macabra adorno su rostro.

— ¡Guardias!

Rapido llegaron dos hombres vestidos con armaduras de oro. Hicieron una reverencia ante nosotros dos y esperaron ordenes.

— ¿Si su majestad?

— Lleven al señor Hall a una de las celdas y dejenlo hay hasta el día de mañana en la tarde ¿Entendido?

John seguia encima mio pero con la diferencia de qué ahora estaba serio mirando filamente a su asistente quién dejo de reir escuchar las palabras.

— Espera ¿Qué? No Lennon, ya es la sexta vez qué me mandas hay —Hizo un puchero mirandolo

— Ni modo, todo por decir qué mi prometido es un infiel. No es mi culpa qué tu ex-novia te haya puesto los cuernos —John sonrió al decir lo último

— ¡Lennon!

— Llévenselo

Los guardias lo agarraron de los hombros y se lo llevaron de la habitación cerrando la puerta. Al estar solo John dejo un beso en mi cuello para mirarme con esos bellos ojos marrones.

— ¿Nos cambiamos y bajamos a desayunar? —Dijo John

— Claro

Mientras John se ponia un traje azul marino yo me puse uno de color negro. Al verme me miro sorprendido para despues correr hacía mi a desabrochar mi smoking.

— Paul, nunca debés de ponerte una negro a menos de que vayamos a un funeral. Mejor ponte uno azul como el mío

Me mando a cambiarme otra vez para ponerme uno al igual qué John, al terminar salí del baño viendo al castaño sentado en la cama.

— Ya termine —Sonreí

— Eres muy bello Paulie

Se acerco a mi para depositar en beso en mis labios, agarró mi mano y salimos de la habitación viendo a dos guardias en los pasillos. Al pasar junto a ellos nos hicieron una reverencia.

Llegamos al comedor viendo el desayuno ya servido. John se sento en la cabecera de la mesa mientras yo me sentaba a su lado. Nos había servido carne con papas.

— Bien, veamos qué tenemos qué hacer el día de hoy ¡Linda! —John llamo gritando para que lo escuchará

Pasaron unos cuantos segundos cuando Linda llego con una lista en sus manos.

— ¿Si Rey John?

— Quíero qué me digas qué tenemos qué hacer Paul y yo el día de hoy.

— Claro —Nos dió una calida sonrisa mientras veia su lista—usted Rey John tiene una junta con el primer ministro de España, tiene que resolver unos asuntos con el gobierno de Canadá. Tambien una junta de prensa con la BBC para decír sobre la boda con su prometido y por ultimo ver la economía global, eso es todo por el momento su majestad ¡Ah! Casi lo olvidó, tiene qué ver los pendientes de la boda

— Joder —Murmuro John—tengo mucho trabajo por hacer...¿Qué tiene Paul de pendientes?

— Bueno el tiene qué ir a Harrow a ver al gobernador de Austria despues tiene qué regresar para tomar el te con algunas personas del consejo. Tiene qué ir a dar un discurso a un centro de salud con el cancer de mamá a fuera de la ciudad, despues de aquello tendra algunas clases de modales con la señora Ono y por ultimo tendrá qué tener una platica con una persona de parte del gobierno de los Estado Unidos, eso es todo.

— ¡¿Todo eso?! ¡Pero hoy es sabado!

— Sus días de descanso es en su cumpleaños, su luna de miel y la boda. Ademas de algunos días asignados nada mas —Sonrio de lado

— Ash, esta bien ¿John cuando es tu cumpleaños?

— El 9 de Octubre ¿Y el tuyo? —Acarició mi mano

— El 18 de Junio ¡Faltan dos semanas! Eso nos es justo —Hize un puchero

— Te puede retirar Linda, nececito hablar con mi prometido —Hizo una seña para qué se fuera

— Lo qué usted orden su majestad

Hizo una reverencia y se fue del lugar dejándonos solo a mi y a John, el castaño se hacerco a mi oido sintiendo su aliento.

— ¿Sabes? Espero con ansias el día de la boda para poder hacerte mío, poder sentir tu cuerpo bajo en mío perteneciendome, quedando embarazado de mi sucesor

Me estremecí al escuchar tales palabras mientras sentu mi cara arder, dejo un beso en mi nuco y volvió a su lugar.

— Mi proximo esposo...

Compromiso Real [McLennon][MPREG]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora