Capitulo 8. Parte 1/2 -Sin editar.-

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Capítulo 8

 

“¿Crees que nuestra vida solo da un giro cuando nos pasa algo muy bueno o algo muy malo? No, ¡para nada! Nuestra vida cambia a cada segundo que pasa, incluso cuando no miramos y estamos despistados. Unas palabras duras o amables, una sonrisa inesperada, una elección que aparentemente no tiene repercusiones... Son esas decisiones, esos detalles del día a día, los que nos transforman a nosotros y a los que nos rodean. Y de ellos debemos sacar las fuerzas para no dejar de luchar y seguir siendo un poquito mejores”.Leí dejando que un suspiro se escapara de mis labios. Decidí que era suficiente lectura por hoy, cerré el libro no sin antes poner un separador para  no perder la página. Guardé el objeto en el bolso negro que traía –De hombre, que quede claro- levante la mirada verificando que mi rubio amigo no hubiera llegado ya.

Me encontraba en un Starbucks, donde había citado a Niall hace unas horas mientras hablábamos por teléfono, no sabía porque le había citado realmente, simplemente  le echaba de menos; no nos habíamos visto desde la fiesta de Liam, y no era que me gustara ni nada por el estilo, pero me agradaba su compañía.

Mire la ventanilla que se encontraba a un lado de mi asiento apreciando un cielo nublado por completo, ni un rayo de sol se colaba por las densas nubes que se formaban esa mañana en la pequeña ciudad de Doncaster. Volví la vista hacia mi mochila sacando mi móvil de esta. Pulse el botoncito de la parte superior desbloqueando la pantalla.

Un 11:34 am llenaba la pantalla, suspire guardando el móvil en el bolso nuevamente. 

Hace 3 días que no veía al irlandés, contando el día de la fiesta y sin contar el día de hoy. Era domingo y ustedes se preguntarán ¿Y por qué no lo viste el jueves, viernes y sábado? Pues porque el jueves, obviamente, no fui a clases y por lo que me dijeron, no hubo. El viernes el teñido no se había dignado en aparecer. Finalmente, el sábado me fui con mis abuelos y allá no había ni WiFi ni señal como para mensajear a mi amigo. ¿Qué clase de persona no tiene internet o siquiera algo de señal en su jodida casa?

Me removí un poco en mi incomodo asiento, intentando sentir algo de movimiento en mis pobres piernas que comenzaban a sentirse entumidas, ya que llevaba alrededor de 2 horas y media ahí sentado. No es que Niall me haya dejado más de 2 horas plantado, sino que había decidido llegar con un par de horas de anticipación, aprovechando que el famoso Starbucks a mi parecer era un excelente ambiente para disfrutar de un poco de lectura, que justo ahora se concentraba en el libro “Pulsaciones” deJavier Ruescas y Francesc Miralles.  Era cierto que Niall se había retrasado media hora, pero con el poco tiempo que llevaba de conocerlo me había hecho la idea de que mi nuevo amigo no era de lo más puntual.

-Hey- me saludó una voz que reconocí al instante como Horan. Me volteé hacia él regalándole una sonrisa que remarcaba mis hoyuelos a los lados de mi boca.

-Hola- le correspondí observando cómo se sentaba al otro lado de la mesa con una de sus típicas y gigantescas sonrisas plasmada en su blanco rostro.

-¿Qué pasa? ¿Por qué me has citado?- se interesó apoyando su peso en ambos codos sobre la mesa y mirándome fijamente con las cejas alzadas.

-Pues… nada importante en realidad, solo te extrañaba- expliqué encogiéndome de hombros sin borrar mi sonrisa.

-¿En serio?- Arqueó un ceja mirándome divertido, me encogí de hombros desviando la mirada por un segundo para después regresar la vista hacia sus orbes azules.

-Nop- hablé finalmente – Pero igual te extrañaba- sonreí levemente, Niall sonrió ampliamente negando con la cabeza

-Awww, Hazz eres puro amor- se enterneció apretando ligeramente mi mejilla apoyándose sobre la mesa. 

Tutoría [Larry Stylinson] CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora