Cada día era igual.
El mayor llegaba luego de clases y los fines de semana para ver a el albino.
-¿Rurú?-
-¿Sí?- salio de sus oensamientos, Reaccionando y le miró.
-Te quedaste callado por un tiempo...-
-No es nada.-
-Me preocupas...-
-¿Yo te preocupo?-
-Nos preocupamos.-
-Simplemente... No lo quiero creer... un mundo donde no estes tú...-
-Rurú.-
-¿Sí?-
-Luche día tras día contra tu depresion y ganas de morir..
No hagas que no hayan valido nada.-El mayor tomo la mejilla del contrario para luego ambos juntar sus frentes mientras se veían.
-Entonces, Viviré por los dos...-dijo el mayor.