Redemption • [YoonSeok]

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Dejó escapar un pequeño suspiro antes de volver la vista hasta el paisaje frente a él. La ciudad encendida en un millón de pequeñas luces se veía mágica desde la distancia y aunque el cielo estaba  cubierto de nubes grises, Yoongi creyó que era el momento adecuado.

Habría preferido una noche estrellada como esas que Jimin amaba, pero no importaba en realidad.

Con estrellas o no iba a hacerlo.

Ahora estaba decidido.

Lo había postergado tal vez demasiado, la idea llevaba rondando en su cabeza tanto tiempo que ya no podía ser exacto, un año, tal vez más, pero definitivamente apareció cuando Jimin le dejó.

Pero luego, contra todo pronóstico, en una noche de tormenta el idiota de Hoseok apareció y Yoongi creyó ver una pequeña luz, creyó, que aunque su corazón parecía haber detenido sus latidos hacia mucho, que podía sentir la sangre volver a bombear con fuerza en sus venas. Volvió a sonreír, al menos un poco y su mente se sintió un poco más liviana bajo el suave tacto que Hoseok le ofrecía.

No preguntó nunca nada, tal vez solo fue intuición, lo supuso o alguien se lo dijo, pero Hoseok le acompaño a la tumba de Jimin regularmente. Dejo flores bonitas y le hablo al lindo roble que Yoongi había plantado para él. Le contó historias sobre las caminatas a las que forzó al mayor a acompañarlo, le confesó las pequeñas sonrisas que Yoongi dejaba escapar cuando hablaba de él, le habló con algo de timidez cuando seco sus lágrimas, pero sobretodo Hoseok le pidió a Jimin un montón de veces que le diera la fuerza necesaria a Yoongi para poder resistir.

"Por favor"

Hoseok sabía que Yoongi quería darse por vencido.

Hoseok sabía que Yoongi solo quería reencontrarse con Jimin.

Pero para que Yoongi pudiera volver a verlo, tenia que acabar su vida, de la misma manera en la que él lo había hecho años atrás.

Pero Hoseok no podía dejarlo ir.

Yoongi caminó hasta la cornisa, respiro hondo y le dio una ultima mirada a las luces de la ciudad. Tal vez lo extrañaría un poco y tal vez ese lugar en especial, pues allí justamente fue donde conoció a la única persona que parecía brillar como el sol para el nuevamente.

"Gracias."

Volvió sobre sus pasos y entró en el auto. Disfruto la sensación del viento helado chocando contra su rostro en el trayecto, el sonido del motor de su auto acelerando por las calles y el olor a comida callejera en cuanto se detuvo en su ultima parada.

Camino con una ligera sonrisa en los labios mientras veía a las parejas y a las familias pasar por su lado, disfruto el sonido de las risas de los pequeños y no pudo evitar sentir esa conocida presión en el pecho cuando la risita de Jimin resonó en su mente.

Faltaba poco.

"Solo aguanta un poco más."

Tras una pequeña visita al supermercado camino hasta la farmacia y compro su receta usual. Necesitaba más.

Necesitaba estar seguro de que funcionaria.

"¿Porqué?"

Cuando llego a su pequeño departamento, cambio sus ropas por algo mas cómodo, una sudadera y una camisa blanca estarían bien, a Jiminie seguro no le importaría y se encamino al pequeño cuarto de baño. Lleno la tina y se detuvo un momento, saco su teléfono y repaso la pequeña lista de tareas que tenia para ese día.

DrabblesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora