¿Quieres ser mi amo o no?(JJ x Otabek)(Cancelado )

Desde Cero

Afortunadamente para nosotros sus amigos no permanecieron tanto tiempo en el apartamento, después de dos horas ambos se marcharon a su habitación, al parecer seriamos vecinos a partir de ahora. Ver a mi JJ tan amistoso con su amigo me producía celos e incomodidad no lo puedo negar, ya que se me notaba directo en la cara que no me agradaron para nada sus amigos, pero no puedo hacer nada para evitar que se vieran.

-¿Qué te ocurre? – me cuestiona mientras me sujetaba de la cintura, sentía su respiración en mi cuello eso se sentía... muy bien.

-No es nada, olvídalo – le respondi cortante para hacer que me soltara, por la vergüenza.

-Vamos Otabek, no seas tan frio conmigo – dijo para volver a abrasarme apegándome a su torso, sentí un leve impulso de querer arañarle la espalda de nuevo pero me detuve.

-Suéltame es vergonzoso... - el color de mis mejillas dejo en evidencia mi sentir. Aun mi cuerpo no se reponía de las heridas que aunque mi amo no las notara, estaban aun ahí.

Quisiera pensar que solo es un tonto que no nota las cosas, pero se que sabe de ellas. Mi cuerpo estaba marcado con rasguños y chupones, logro recordar claramente su existencia cuando el me arrebata nuevamente la camisa y me obligo a recostarme en la cama, se quedo viéndome por completo. Su expresión de sorpresa solo me llego a mi a cubrirme con mi manos intentando que dejara de verme, pero el sujeto mis manos apartándolas de mi torso y las admiro con mejor precisión, quería desaparecer de su vista, ahora el debe aborrecerme por esto.

-¿Quién te hizo esto? – pregunta el sin dejar de verme, yo simplemente aparte la mirada.

Luego que estuvimos apunto de hacerlo dos veces desde que nos reencontramos ¿estabas ciego o que? Quizá la calentura del momento lo cegaron pero no podía haber una persona en este mundo mas despistado que el, sujetando con fuerza mi mentón me forzó a mirarlo, no quería responderle.

-Otabek, será mejor para ti que respondas – la seriedad de tus palabras me ponía inquieto, mis orejas bajaron por el pavor que sentía - ¿Quién fue? Esa persona también te regalo esto– su mirada estaba clavada en mi collar- No soy un tonto para no haberlas notado, pero pensar que alguien mas te haya tocado me hace arder en celos – pronuncio.

-No te dire su nombre, después de todo ya no importa – fue mi respuesta, la única que le daría sobre el.

-Te ordeno que me lo digas – protesto acercando a su rostro a mi cuello – Se que Seung no me dira de donde te rescato, pero necesito saberlo o podría enloquecer – se alejo de mi para buscar en los cajones de su habitación unas tijeras y acercarse a mi de nuevo.

Tuve miedo de lo que pretendía hacerme que me vi forzado a cerrar los ojos, pero lo único que sentí fue el frio roce del metal cerca de mi cuello, temblé un poco pero cuando sentí que me arrebato el collar me atreví a verlo. Tiro a la basura esa cosa para posteriormente volver a recostarse a mi lado, me tomo entre sus brazos sujetándome con fuerza para besar  mi frente.

-No quiero que vuelvas a irte de mi lado – me susurro cerca de mi rostro, pude ver la mirada de tristeza que tenia, sentí como mi pecho dolia. Era mi culpa – Si lo volvieras a hacer no se de lo que seria capaz con tal de dar contigo. Recuerda que eres mío Otabek, solo yo debo ser el único dueño de tu corazón, el de tus pensamientos y ser el único que pueda tocarte -sus manos soltaron mi cuerpo para sujetarme de las mejillas.

-Eres mi dueño desde que me rescataste de la calles, sin ti ahora seguro habría muerto en algún callejón – le dije para suspirar – Pero no soy bueno para que permanecer a tu lado, luego de todo el sufrimiento que te hice pasar, hubo momentos en donde ni siquiera podía recordarte por pensar en alguien mas debido a la confusión en la que vivía día a día durante mi extravió- cuando le dije eso su expresión se volvía mas armaga – Solo pude decirte que creía que mi afecto hacia ti era únicamente por la dependencia que te tenia, porque tu fuiste el único humano que me dio su cariño y un hogar estable en donde dormir – dije para tratar de hacer mas fácil las palabras que quería decirle.