¡Advertencia!
Esta historia es correlativa a la de “un sueño de amor”.
Para entender este libro tendrías que leer primero “un sueño de amor” y luego este, si no sería un poco complicado entenderlo….
Espero les guste…
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Capítulo 1
La boda había sido el acto social más grande de la temporada, David no había escatimado en gastos.
El vestido blanco, largo,con abundante bordado y decorado con perlas y algunas piezas de plata que había llevado Anabel haciéndola lucir como una reina,había sido envidiado, criticado y alabado por cada una de las mujeres de la aristocracia londinense.
Además de que su boda, tan repentina y acelerada había sido un gran escándalo, escándalo que nadie quería perderse.
David la vio acercarse a el altar, casi con el terror impreso en su rostro, al ver como ella era tan genuina y transparente con sus emociones, se preocupo, preguntando si realmente estaba haciendo lo correcto.
Eso mismo era lo que le preocupaba a Anabel, no tenía la certeza de estar haciendo lo que realmente debía, lo que su padre hubieran aprobado.
Era un duque, aun así no sabía mucho de él, podía ver el comportamiento que tenía para con su hermana, parecía amarla más que a su propia vida, podía notar que era caballeroso, atento y humilde. Pero ya había sido testigo de cómo un hombre que parecía ser todo un galán caballero, se había terminado por convertir en la peor persona que una mujer podía conocer en su vida.
Sacudió su cabeza intentando no pensar en ello.
Había dudado cuando el obispo había preguntado si aceptaba, sabía que aquello volviera a producir habladurías, pero ¿qué más podía hacer?
Todo lo que había pasado esos últimos meses estaban acabando con ella y con su buena disposición por mantener una sonrisa en su rostro.
Parecía que la divinidad se había reunido sólo para ensañarse con ella por algún pecado cometido. Solo que por mas que lo intentaba, no podía encontrar en su mente o su recuerdo aquello que la hubiese condenado a aquel calvario a la que había sido sometida.
Casarse con el duque probablemente era lo único bueno que podía haber pasado en su vida, o almenos eso creia.
Estaba a la expectativa, todos esos meses lo había estado, y aun cuando todo había acabado y se encontraba allí sentada en la mesa principal, en el banquete que su, ahora esposo, había ofrecido para todos aquellos que habían asistido a la boda, no salía de su cabeza la idea de que todo estaba por empeorar, que realmente había cometido un error, solo esperaba equivocarse.
David se acercó a ella y colocando su mano en la espalda, le proporcionó unos intimos masajes, era notorio para el, y para gran parte de la sociedad, lo tensa que se encontraba la novia.
Aquello lo hacía sentir mal, como si la estuviera obligando a algo que ella no estaba de acuerdo.
La realidad era que, él había hecho la propuesta de forma conciliadora, sin presiones reales.
Había expuesto de forma cortés lo que esperaba de un matrimonio entre ellos, si ella aceptaba.
Y de la misma forma había recibido una respuesta negativa, y él lo había aceptado de buena gana, sin rencores.
Sin embargo una semana más tarde,el mismo dia de la boda de su hermana, la llegada de una carta había cambiado el rumbo de la situación, colocándola a ella en una posición de obligado compromiso para así poder mantener la casa y todo lo que pertenecía a su padre.
Ella había ido en su búsqueda, por un consejo, se veía desesperada sin saber que hacer, mencionaba una y otra vez que si le quitaban todo aquello ella quedaría en la calle junto a su madre que al parecer estaba sumergida en la melancolía que había producido perder a su esposo.
Aquello había asombrado a David quien sin más le había realizado nuevamente la propuesta y dejado la decisión en sus manos, y ella regañadientes había acepto.
Se acercó a su oído, demasiado, tanto que ella al sentir su respiración acariciando su piel se estremeció dejando de forma inconsciente, su cuerpo totalmente tenso ante la cercanía de aquel hombre.
-sonríe querida- susurró en su oído, con la voz ronca.
Había notado el cambio en la respiración y el cuerpo de la joven y aquello no había hecho más que provocar en él el deseo de acariciarla hasta que su cuerpo volviera a estar completamente laxo, relajado.
Ella intentó, en un momento de lucidez, alejarse de aquel hombre que parecía alterarla demasiado.
Cada vez que se encontraba a su lado tenía la necesidad de sentirlo, de tenerlo cerca, de… acariciarlo.
Era la sensación más extraña y excitante que había experimentado en su vida, sin embargo no sabía a qué atribuir aquello que su cuerpo sentía.
El si sabia que era lo que ocurría, la deseaba y sabía que aquella noche la tendría, solo para él y saciaría todo aquello que provocaba la cercanía del cuerpo de su esposa.
-lo estoy intentando, milord- contestó aún tensa.
El se sentó en la silla que se encontraba a su lado y continuó con aquellas caricias, ella le miró y sin poder evitarlo le sonrió, agradecida.
Sabía que la idea del casamiento había sido de él, sin embargo, no podía sacarse de la cabeza que lo unico que lograria con aquel enlace sería arruinar la vida del bueno de David, y por mas que lo intentaba, no lograba sacar la culpa de su cabeza.
¿Porque no le decía la verdad? ¿cuánto daño podría causarle con aquello que ocultaba? si se enteraba de la verdad ¿la despreciaría de la misma forma que lo había hecho todo el mundo al saberlo?
Nerviosa apretó su mano en el vestido que aun llevaba puesto.
La hora del vals que iniciaría el gran baile y el cual era llevado a cabo por los anfitriones y novios de la boda, la obligó a ponerse de pie y acompañar a su esposo al centro del salón donde todo los ojos estaban puesto en ellos.
Ella suspiró intentando encontrar el control a sus nervios que por alguna razon habia decidido desaparecer el momento que más lo necesitaba.
El la miro intentando darle confianza, los músicos dieron inicio al vals y las melodía comenzaron a llenar el ambiente en el mismo momento en que veía la reverencia que era realizada por el hombre más decidido y hermoso que había tenido el placer de conocer y al que presentía, le arruinaria la vida.
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Holissssss
Espero que esten bien…
No pude con mi ansiedad por subir el primer capítulo de esta historia..
Espero que la disfruten tanto como yo estoy disfrutando escribiendo….
Sin mas que decir
Besitos 😘
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Si No Es Demasiado Tarde Para Pedir Perdón #2.1
Historical FictionDavid conocía lo que era el dolor de perder a la familia, de perderlo todo. Por esa razón cuándo, Anabel llegó a su vida, intentó ayudarla con el problema que la atormentaba en aquel momento. Sin embargo también la quería en su vida para que ella ll...