Capítulo 15

1K 152 3
                                    

Despertó con un fuerte dolor de cabeza, recostado sobre su cama.

Miro un poco aturdido a su alrededor y se detuvo en el rostro preocupado de Marcus que lo miraba con el ceño fruncido parado frente a la cama.

Intento levantarse, pero un dolor punzante en su mano derecha se lo impidió, observo con atención la venda que le cubría sin recordar con exactitud qué era lo que había pasado.

- ¿qué sucedió? -pregunto aun concentrado en su mano lastimada-mi cuerpo entero duele

-Deberías pensar en ello la próxima vez que decidas echarnos a tu hermana y a mí, para darte a la bebida-contesto su cuñado con una voz que claramente denotaba enfado

-lo siento-contesto cancinamente- ¿qué sucedió? - volvió a preguntar

Marcus quien ya había hecho un análisis de la situación, recorrido las caballerizas y parte del cobertizo que se habían incendiado y se encontraba prácticamente destruido y había hecho una serie de interrogatorios a los empleados de la casa, quienes había contestado de buena gana aun cuando no era su señor. Pensaba como contarle la situación al hombre que se encontraba en un estado lamentable recostado sobre aquella cama y quien ya estaba lo suficientemente destrozado por la huida de su esposa y no sabía si iba a poder lidiar con aquella situación.

-al parecer, no solo quieren terminar con la vida de tu esposa- e hizo una mueca al darse cuenta de lo inapropiado de su comentario-lo siento- se disculpo

David lo miro e intentando darle la menor importancia a lo dicho, hizo una seña con su mano sana para que continuara con su explicación

-ayer por la tarde alguien fuera de tu servicio entro y prendió fuego los henos que se encontraban fuera de la caballeriza y pronto las llamas tomaron todo a su alrededor, gracias al cielo tus empleados supieron tomar el control de la situación rápidamente, porque por lo que tengo entendido, si hubiera sido por ti, la casa hubiera ardido en llama, ni siquiera estabas en estado para cargar un balde con agua

Frustrado por aquella situación de la cual no entendía nada, intento levantarse una vez más, pero el mareo que sintió lo volvió a dejar tendido en la cama.

-maldiciones- grito con furia, preguntándose porque todo aquello le estaba pasando a él, ¿no había sido suficiente el haber perdido a sus padres, haber estado distanciado de su hermana?, ahora también perdía a su esposa y parte de su hogar.

-tal vez si dejaras de lamentarte de tus desgracias y comenzaras a hacer algo para saber quién está atentando contra tu vida y porque razón tu esposa huyo de esa manera tan asustada por una simple nota, aun dejando en claro que te amaba, no estaría tirado en una cama con una borrachera de los mil demonios y una mano cubierta de quemaduras- le hablo Marcus, sabiendo que estaba siendo cruel con aquellas palabras. Sabía que su cuñado se estaba convirtiendo en un ser totalmente auto destructivo y que, si nadie le decía la verdad en la cara, terminaría acabando con él. Por otro lado, si algo le sucediera a David, por pequeña que fuera la situación afectaba a Sara enormemente y como ella era lo más importante que él tenía en su vida, se veía en la obligación de intervenir para así no tener que ver la cara triste que ponía su esposa cada vez que algo le alteraba.

-he estado investigando y los empleados pudieron ver a un jovenzuelo dando vuelta por los alrededores, hay alguien que afirma poder reconocerlo si lo ve nuevamente, no es mucho, pero es una pista, te has tardado tanto en volver en sí, que hasta he tenido tiempo de contactare con alguien que me debe algunos favores y que se dedica a hacer esta clase de investigaciones, por lo que, si vuelve a suceder algo parecido, primero vas a estar protegido, y vamos a tener más posibilidades de conseguir nombres para saber quién anda detrás de todo esto.

-ya sabemos quién anda detrás de todo esto

-sí, pero por alguna razón sospecho que no es solo el barón quien está detrás de estos atentados, aun así, vamos a dejar que el detective nos los diga

-no encuentro quien más podría intentar hacerme daño- contesto un David aun aturdido

-por si no lo recuerdo mal, los problemas que tenías cuando te conocí eran muy parecidos a los que estamos tratando en este momento, y no era el barón, sino tu tío quien se encontraba tras ellos.

David no le quedo más que aceptar que Marcus se encontraba en lo cierto, su muerte les convenía a ambos hombres por igual, a uno por venganza y humillación y a otro por el título y el dinero.

-otra cosa-cometo su cuñado antes de salir de la habitación- el doctor dejo un ungüento para que le coloques a las quemaduras y tu hermana quiere verte, por lo que te levantaras,  te pondrás presentable y le darás las explicaciones que se merece, no quiero que su situación con el embarazo empeore- medio le ordeno, dejando en claro que por muy duque que el fuera, no aceptaría replicas y se marchó ante que el pudiera contestar.

Vio entrar a su servicio con el agua para un baño y dejo que una de las doncellas pusiera el ungüento sobre su mano, para luego salir de allí un poco más decente de lo que estaba  aquella mañana o los días anteriores.

Escucho a su hermana hablando con voz angustiada, sin embargo, no podía distinguir que era lo que decía, tomo el pomo de la puerta y la abrió provocando un estruendo que le molesto en sobre manera y casi inmediatamente sintió los brazos de su hermana rodearlo y al escuchar el suave llanto que escapaba de su boca, se le rompió un poco más el corazón.

-estoy bien- le intento tranquilizar, sin embargo, Sara no soltaba su agarre, sino que lo abrazaba más fuerte aun cuando su abultado vientre se interponía entre ambos.

-cuando llego uno de los mozos a avisarnos que había un incendio y que te encontrabas en mal estado vinimos enseguida, tirare tus orejas si nuevamente te pones en ese estado, es más, ya mandé a tirar todo el alcohol que había en esta casa- lo reprendo Sara, sin dejar de abrazarlo-me he preocupado mucho, pero Marcus me ha asegurado que solo te encontrabas borracho, no entiendo por qué ella hizo esto, pero si tanto la amas ¿porque no la has buscado?

Sintió como se separaba de él y lo miraba a los ojos buscando las respuestas a algo que para ella no parecía tener lógica.

-no sé si es tan fácil Sara, no tengo ninguna pista de donde pudo haber ido- le contesto suavemente mientras secaba las lágrimas que caían por el rostro de ella- y no sé por dónde empezar a buscar

-ella venía a ver una prima cuando la conociste y tú la acompañaste hasta allí, tal vez ella sepa algo

-¿y si  ya no quiere volver conmigo?

-entonces al menos tendrás la certeza de que hiciste lo que debías y podrás poner tu cabeza en alto sabiendo que ella no se merecía tu amor, tendrás una razón para olvidarle.

Si No Es Demasiado Tarde Para Pedir Perdón #2.1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora